Amo Temerte

1-Sangre

Llevo 5días encadenado y encerrado en esta jaula, o fueron 15 ?
Ya no lo recuerdo, mi percepción del tiempo está rota, la única medida de tiempo que tengo es cuando el viene a verme, escucho como suenan sus pasos firmes y fuertes a través de la obscuridad en dirección a mi, siempre con la misma pregunta

-¿ Me amas   ?  - su voz es tan gruesa y fuerte pero a la vez tan suplicante, cargada de una aura electrizante, que rompe aquella obscuridad y silencio absoluto que me tortura día y noche, escucharlo es  tan reconfortante que espero con ansias el momento donde el viene, trato de disfrutar cada letra y sílaba que sale de su boca, , pero siempre termina igual
Conmigo diciendo

-No-

Y como podría amar a una bestia como el, un hombre que me arrebato mi libertad por simple capricho, yo no lo amo, le temo,
Temo que un día se canse de la espera y tome mi vida entre sus manos.

Me mira con esos ojos helados, como si nada ni nadie pudiera perturbar esa calma aterradora que desprende, pero cada vez que digo - No - veo un pequeño destello rojo en su mirada, el mismo destello que vi el primer día que lo conocí, como una pequeña gota de sangre que poco a poco lo consume todo y a todos.

A paso firme se hacerco a mi, se agachó para estar a mi altura, sujeto mi menton para que lo mirara a los ojos, apenas perceptibles en la abrumadora obscuridad

-Todo esto puede acabar corderito, solo tienes que decir, si, solo eso una simple palabra, y todo estará bien, mi amor puede ser la más dulce de las mieles si así lo deseas-  puso una mano sobre mi cuello y apretó fuertemente, lo suficiente para saber la amenaza que significaba pero no tanto como para lastimarme
-pero también puede ser el más cruel de los venenos, puedo tenerte aquí por años si así lo prefieres hasta que caigas en la locura y tú única elección sea yo- quito su mano de mi cuello y con una delicadeza y calidez acarició mi mejilla con ternura
-¿Me amas corderito?- volvió a preguntar, en sus ojos podía ver una súplica silenciosa.

Mi respuesta fue la misma, sin vacilar.

-No-

Sin ningún aviso la mano que tan dulcemente acariciaba mi mejilla, me dió una bofetada que hizo girar mi cabeza, el ardor era tan  abrumador que no pude evitar las lágrimas que se derramaron sobre mi piel ardiente y roja por el golpe
-vamos corderito, una vez más se que puedes hacerlo.. ¿me amas ?-

Me quedé sin palabras, está fue la primera vez que el me alzaba la mano , siempre supe que esto pasaría, pero lo que no sabía es lo que provocaría en mi mente y corazón, creí que con el primer golpe me llenará de rabia, la fuerza que necesitaba para no ceder ante el, pero lo único que sentí fue un dolor en mi pecho, no por el golpe si no por decepcionarlo, me estaba volviendo loco.

Yo.. - mi voz salió quebrada, el nudo en mi garganta me impedía hablar estaba temblando de miedo, no por el, si no lo que me hacía sentir

-Sabes que?, estoy arto corderito, pensé que eras más listo, lo único que tienes que decir es, SI ROMAN TE AMO,- tomo con fuerza mis cabellos rizados y levanto mi cabeza con rabia contenida
-acaso eres tan subnormal que no puedes pronunciar unas cuantas palabras, es fácil, tu aceptás yo te cuido, te amo, me dejas hacerte mío y dejas que yo ponga una linda marca en tu cuello para que todos sepan que me perteneces.
SOLO DI LAS JODIDAS PALABRAS
- su voz salió distorsionada, casi desgarrada como si dos personas hablarán al mismo tiempo, supe que trato de usar La Voz, conmigo, pero no le funcionaria, nunca supe cómo o por qué, pero era inmune a la manipulación de la voz, eso lo enloquecia, ya había tratado de usarla conmigo en varias ocasiones y nunca funcionaba.

Me llene de coraje, entre lágrimas lo mire directamente a los ojos
-No voy a doblegarme ante ti, jamás he agachado la cabeza a ningún alfa y te aseguro que tú no serás el primero, prefiero morir aquí mismo, atado y encerrado, vamos, adelante hazlo te reto, no importa cuantas veces lo preguntes, mi respuesta siempre será No, jamás podría estar con un monstruo como tú- justo después de pronunciar estás palabras me arrepentí, su mirada tan Azul cómo el hielo cambio a un intenso carmesí, me tomo del cuello y hacerco su boca a mi oído para susurrar
- Si me vez como un monstruo entonces no me queda otra opción que serlo- se levantó bruscamente caminando a la salida de aquella prisión antes de cruzar la puerta, pude ver una pequeña mancha que se arratraba con el, como si fuera un gusano de sombra serpenteando hacía él, trepando su pierna hasta llegar a desaparecer de mi vista