ACOSÓ ENTRE LAS SOMBRAS

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me encontré en mi cuarto leyendo "The never king ", un libro con un tono y contenido un poco macabro. Imaginaba los escenarios y me daba calor entre mis venas; el dolor comenzaba a doler en excitación en mis pliegues húmedos, los escenarios subían de color rojo hasta entrar en mi cabeza... Pasé a la siguiente página y comencé a bajar mis dedos hasta mis pantalones oscuros. Metí mis dedos entre el pantalón y comencé a acariciar mis pliegues húmedos

-Ahh -Los gemidos resonaban en mis labios. Mientras mis dedos entraban y salían en mis pliegues húmedos sentí que iba a correrme en cualquier momento, pero no quería parar. Aparte el libro con una mano y con la otra me aferraba a la almohada con fuerza.

Las gotas de sudor de mi cara caían en mi camisa de tirantes transparente. Saqué mis dedos con cuidado de mis pliegues, mis bragas ahora estaban mojadas al igual que mis dedos pegajosos. Mi respiración seguía alterada, mi teléfono sonó y sentí un escalofrío en mi espalda. Tomé mi teléfono y atendí la llamada sin ver el número que marcaba.

—¿Qué pasa cariño? ¿Por qué dejaste de acariciar tu vagina? Si ya estaba a punto de correrme... —

una voz siniestra y gruesa sonó tras la línea telefónica. Un escalofrío se recorrió entre mi cuerpo y me entró un pánico de muerte. Miré a todos lados y vi que la ventana de mi cuarto estaba abierta. Un carro Mercedes oscuro estaba parqueado afuera y encendió el motor. Solté un chillido de pánico y corrió hasta la ventana, el carro se marchó y me quedé con el pánico en la sangré. Escuché unos toques en la puerta de mi cuarto y entre en pánico. Me di la vuelta y abrí la puerta. Era mi hermano mayor, que estaba medio dormido, mirándome.

-—Lucya dice que le contestes el mensaje, dice que hay una fiesta el sábado en su casa y que vayas conmigo.—

dijo mi hermano y salió del cuarto como si nada. Carajo, aún no estaba tranquila y necesitaba pensar quién era esa persona. Si le decía a mi hermano probablemente me golpearía, así que no tuve más opción que ir a la habitación de mi papá. Toqué la puerta de mi papá. Escuche su voz diciendome que entrara. Abrí la puerta y encontré a mi papá fumando mientras miraba unos informes. Mi papá era uno de los mayores mafiosos de la ciudad y siempre me había protegido, incluso cuando tenía solo 6 años. Una vez se había peleado con una mujer por tocarme el pelo sin permiso.

-¿Qué harías si un hombre me vigilara?-, pregunte mientras me pellizcaba los dedos para calmarme y no parecer nervioso.

—¿Por qué lo preguntas?— Me dijo.

—Por curiosidad.— Fue lo único que pude responder. Me aleje del cuarto y cerré la puerta, la inseguridad y el miedo se apoderaron de mí después de saber que ahora habría un pervertido observándome de cerca. No quería meterme en problemas y no quería que mi padre se alarmara. Pero, al mismo tiempo, no podía dejar de preguntarme quién era ese extraño que intentaba contactarme...

Pero para ser realistas me llamaba la atención El pensamiento de tener un 'Dark Romance' cruzó por mi mente, pero me dijo a mí misma que estaba siendo una locura. Estaba nervioso, el acosador me daba miedo, pero a la vez me intrigaba saber quién era. A lo mejor podría tener mi primer Dark Romance... entre a mi habitación y cerré la puerta con energía, me tendí en la cama y esa siniestra y gruesa voz del teléfono todavía me resonaba en la cabeza...Mis mejillas se tornaron rosas y abracé la almohada. ¿Qué estaba pensando? Eso no era común en mí, pero solo recordar la voz del hombre... me hacía sentir emoción en las venas. Por su voz no parecía tan mayor, apenas tengo 17 años, pero su voz parecía de unos 21.

Pensé un poco, baje los dedos hasta mis pantalones y comencé a tocarlos otra vez, mordía la almohada para no hacer mucho ruido. Senti un dolor y un placer a la vez. No pude contenerme más, Bajé mis pantalones y me quitó las bragas. Agarré la punta de la almohada y la froté contra mis pliegues.