Estoy perdida, buscando desesperadamente ese algo que sé que no tengo.
Pero entonces te conocí, alguien intrigante y genuino, ¿Quién eres?
Quiero saberlo.
•••
[Este en un fic de Arlecchino x Reader. Es femxfem, así que tenganlo en cuenta por favor...
Me estremecí al escuchar ese grito. Shina ya se había levantado.
Abrí mis ojos, llena de pereza. Sentía el cómo me pesaban. Miré fijamente el techo blanco, no pensaba en nada, no sentía nada. Cada día sintiendome como ese algo insignificante, sin proposito, sin ese algo que me hiciera brillar.
Wao, nunca parará—. Pensé.
Me giré hacia mi mesita de noche y tomé mi teléfono. Lo encendí para leer los mensajes que me habían dejado. Me sorprendí al ver un mensaje de Ayato. Honestamente no pensé ver en mensaje suyo tan pronto.
Lo ignoraré, por ahora.
Los siguientes mensajes eran de grupos de la universidad o conocidos. Entre ellos, noté un nuevo mensaje de Hu tao.
" ES HOY!!! A PARTIRRRRNDEE LAS XKSLWKKE 777777777777!!!!!!"
"No faltes o la furia de los nonvivosscaerá sobre ti l????#??!!!! UHHH"
Me: "JAJAJA va"
Contesté y dejé el teléfono a un lado. Revisaría lo demás en otro momento.
Me estiré perezosamente en mi cama para así tratar de activar mis sentidos. No funcionó del todo, pero al menos lo intenté.
Aún podía escuchar el estruendo que provenía desde fuera de mi cuarto. De la nada escuché el golpe seco de algo caer contra el suelo, posterior a ello escuché el grito enojado de mi amiga.
— ¡____! —. Gritó mi nombre.
Me asusté por la manera en la que gritó mi nombre. Me levanté un tanto nerviosa y acelerada de la cama. Busqué mi uniforme y me dirigí corriendo al baño.
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Caminé a la sala principal mientras cepillaba mis dientes, buscaba a Shina con la mirada, y también me preparaba para lidear con su mal humor mañanero. Pero me sentí un poco confundida al no escucharla hacer tanto escándalo como hace rato.
Vi una cabellera roja de espaldas en el sofá.
Ah, ya. —. Pensé deteniendome en seco.
Observé un poco más y pude ver a Shina sentada a su lado usando su teléfono, aún podía notar que estaba molesta por el pequeño tic que tenía en su pierna derecha.
