Bad Girl (Rivari)

Capítulo 30

Pov Samantha

— Realmente me estas causando muchos problemas en mi familia, ¿ahora quieres llamar la atención de mi hija? — una de sus manos golpeaba mi hombro cada vez más fuerte, causando que retrocediera. — ¿Quieres que vuelva a recordarte lo miserable que eres? No sabes de lo — alce mi mano para que parara, estaba cansada de tantas amanezas.

— No pienso volver a estar junto a Ari, no porque usted me lo pida sino que lo hago por mi propia decisión, así que por favor, déjeme tranquila. — tomé fuertemente las muletas para empezar a caminar.

— ¡Arruinaste su boda! ¡Solo eres una entrometida que causa problemas, es por eso que lo perdiste todo! —  mientras me alejaba escuchaba perfectamente sus palabras, que siendo sincera, me habían dolido. — ¡Nunca debiste de haber nacido! —

Al dar la vuelta al pasillo me recosté en la fría pared ¿por qué siempre se encontraba atormendandome? ¿Realmente me merecía ser tratada de esa manera por ella? Deje caer unas cuantas lágrimas, sentía como todas mis emociones volvían a caer al igual que mis fuerzas, esa señora hacia que la felicidad que tuve por unos momentos se fuera. Unas palmaditas en mi cabello hicieron que levantara mi vista, viendo a mis dos amigas.

— Nada de eso es cierto, no lo haz perdido todo, porque nos tienes a nosotras. — los tres sin pensarlo nos abrazamos. — no nos vuelvas asustar de esa manera. — Asentí, dando una leve sonrisa, sabía que tenía que controlar mis pensamientos negativos, tal vez mi vida sea miserable pero me acostumbrare y crearé un nuevo futuro para mi, uno en el que posiblemente Ari no estará.

—Me alegra de que estén aquí —

Pov Ari

— Peleare por mi chica.— alce mis puños al aire, no iba a rendirme solo porque ella me lo pidiera.

Habían posibilidades de que Samantha este negando sus sentimientos hacia mi, forzandose a reprimirlos pero me encargare de que todos ellos vuelvan a florecer, así que iba a preparar lo que necesitaría para volverla a conquistar.

Corrí deprisa detrás de Sam, me había quedado atrás por unos minutos.

— ¡Arruinaste su boda! ¡Solo eres una entrometida que causa problemas, es por eso que lo pediste todo! — me quede de pie mirando a mi madre gritandole a Sam mientras que iba de espaldas —¡Nunca debiste de haber nacido! — sentí como mi sangre hervía de la rabia, como se atrevía a decirle eso.

Tomé una cubeta llena de agua sucia y sin pensarlo dos veces la tire encima de ella, rápidamente volteo a verme, pero me adelante en hablar.

—  Cuando dije que hicieras lo que quisieras con tu vida no me refería a que volvieras acosar a Samantha e insultarla, de algún modo sabía que lo harías así que Ama y yo tomamos una decisión — de mi bolso saque unos papeles y lo puse en su mano. — felicidades, ¡Haz ganado un viaje a un asilo de por vida!— bese sus mejillas despidiéndome de ella  — te recogerán mañana. Con dinero todo puede suceder. — su rostro se puso pálido.

Me rei un poco para empezar a caminar en dirección al estacionamiento, no iba hacer tan malo para ella, podría adaptarse con los meses al lugar aunque significaba no tener ninguno de sus lujos y comida de buena calidad. Pero estará bien, es un problema menos para mi vida, después de todo mi madre nunca se comporto como una, siempre me obligó a cosas que no quería.