Luz en tu oscuridad

Capitulo 2 ღ~Primeras Impresiones~ღ

Eran las doce de la noche y habíamos terminado con el karaoke, las cervezas se acabaron junto con la botella de vodka, los malvaviscos estaban por terminarse al igual que las papas. Me había tomado solo dos cervezas y con eso me bastaba. Emmet y Jake no estaban en sus cinco sentidos.

Rose y Ángela nos entregaban los globos de cantoya. Yo compartiría el mío con Jacob.

El día de ayer había escrito mis propósitos este año, los que le mencione a Jacob eran pocos, en mi lista tenía más. Pegamos las notas afuera del globo y lo prendimos, colocándonos en la orilla del lago.

La música sonaba a barios metros de nosotros, la canción de ''Dishwalla: Angels or Devils''. fluia y solo pude concentrarme en la letra mientras el globo de cantoya se calentaba para emprender su rumbo.

Todos tenemos demonios, miedos que nos pueden acabar e impedir crecer. Uno de mis miedos eran que las cosas cambiaran, le tenia miedo al cambio, pero lo solía enfrentar siempre, lo puedo enfrentar cuantas veces se me presente.

Este comienzo de curso no espero grandes cambios, tan solo las preocupaciones de la universidad, maestros nuevos, despedidas y todo lo demás.

Pero hay demonios que uno no sabe enfrentar. Tengo el ejemplo de mi madre, ella le tiene miedo a la vejez, por lo cual tiene una actitud de niña pequeña, suele ser inmadura, eso afecto la relación que tenia con mi padre, por lo cual se separaron.

-Tierra llamando a Bella.-Jake llamo mi atencion.

-Lo siento.-Me sonroje.-¿Lo soltamos?

Jake asintió con la cabeza e impulsamos el globo con delicadeza. Mire a mi alrededor y todos ya habían soltado los globos.

Me encantaba observar cómo se perdían en el cielo, me  detenía a pensar sobre los animales que vuelan. Les tenía tanta envidia, eran libres y podían ir a cualquier lado del mundo. En cambio yo, no me sentía así, no me sentía con la libertad de marcharme o hacer lo que quisiera. Antes de mi, tenía que pensar en mis padres y no decepcionarlos, René y Charlie apostaban mucho por mí, desean tanto verme graduada de la universidad, teniendo  un buen trabajo, viajar para conocer el mundo, una infinidad de cosas que esperan de mi y al menos por el momento los complazco ya que es algo que no me cuesta trabajo. Lo que menos desean es que desperdicie mi vida cometiendo las locuras que hacen en estos tiempos los adolescentes. Tener un hijo a una corta edad y no poder ofrecerle una buena vida. Típico de los padres. ¿Pero tienen razón no?

-Hey Bella.-Jacob me señalo la pequeña cabaña.-Necesito darte algo.

Asentí con una sonrisa y lo seguí. Al entrar a la cabaña, espere en la sala mientras el entraba a uno de los cuartos. Después de un minutos el regreso con una pequeña caja en su mano.

-Al estar con mi hermana en Hawái, fui al mercado artesanal y encontré algo que te encantara, su significado me recordó mucho a ti.- Sonrió.

Al abrir la cajita se encontraba una hermosa pulsera de pequeñas perlitas blancas y una hermosa tortuga colgando en ella.

-Es una tortuga verde de mar, simboliza el amor al océano en las antiguas tribus polinesias, representan amor, protección y curación.-Coloco la pulsera en mi muñeca.- Estas tortugas aman el océano, y eso me recordó a ti, tu adoras el océano, eres una buena nadadora en el.

-Es hermosa Jake, no debiste molestarte.-Observe la pulsera.

-Claro que no fue molesta Bells.-me despeino un poco mi cabello.

-Regresemos con los chicos, deben de estarse preguntando donde nos encontramos.

Continuamos la noche entre chistes y burlas hacia Emmett por su presentación de hace un rato, jugamos un poco verdad o reto y contamos historias de terror.