¡Luces, cámara, Yangs!

versus los recuerdos.

Chenle estaba sentado en la silla del escritorio, con la laptop de Yangyang delante suyo, estaba explorando una USB, buscando alguna carpeta que llamara su atención.

ㅡEsta se llama "familia". ㅡYangyang se acercó a él, dejando la cámara que tenía en sus manos, nuevamente en la caja. ㅡMe llama la atención, ¿qué será?

Conectaron la laptop a la televisión, para poder ver las fotos y vídeos que esa carpeta guardaba, en una pantalla muchísimo más grande. Todos los archivos eran de el crecimiento de los niños Wen, desde que apenas eran unos bebés, hasta algunas otras cosas que ya podían recordar con claridad.

ㅡParecías un changuillo. ㅡUna almohada cayó sobre Jaemin tras aquel comentario, él sólo se quejó. ㅡNo te pediré disculpas por mi sinceridad.

ㅡShh, no me dejan escuchar.

Era un vídeo grabado horas después del nacimiento de Yangyang, se escuchaban las voces de sus padres, una más fuerte que la otra. Aquel bebé era pequeño, con su piel rojita y su cabeza llena de cortos cabellos oscuros; vestía un mameluco de rayas blancas y verdes, con unos guantecitos del mismo color.

"Hola, papi y yo te estuvimos esperando con mucha emoción, nos alegra conocerte." era esa la voz de Jun, que desde el primer momento se preocupaba porque ellos estuviesen bien.

"Bienvenido al mundo, Yanggie." dijo Hao, quien lo cargaba entre sus brazos, prestándole su pecho para que durmiera. "¿Seremos buenos padres?" le preguntó a su pareja, que asintió con seguridad.

"Quizá no los mejores, pero a él nunca le faltará nada. Lo amaremos en esta y todas las demás vidas que vengan, es una promesa." ambos adultos entrelazaron sus dedos, acercándolos a la mejilla visible del recién nacido.

Cuando el vídeo concluyó, los dos chicos que estaban de visita se giraron a ver a ese bebé que ahora era un adolescente. Él estaba mordiendo su labio inferior con algo de fuerza.

ㅡ¿Vas a llorar? ㅡNegó rápidamente. ㅡCreo que va a llorar.

Otra almohada fue lanzada hacia Jaemin, tirándolo esta vez de la cama.

Yangyang estaba encerrado en el baño, fingiendo demencia ante las inmensas ganas que sentía de llorar (porque sí, su amigo había tenido toda la razón). Se encontraba viéndose en el espejo, pensando en el vídeo que minutos antes había visto.

Al escuchar las palabras de los adultos, se sintió angustiado y no porque sus palabras fueran falsas, sino porque eran reales, lo eran en su totalidad.

Era consciente del amor que en su casa había, de la familia que Junhui y Minghao habían formado en base a la sana relación que llevaban años manteniendo. Los tres niños Wen crecieron recibiendo todo lo que un niño podía pedir, empezando por el inmenso cariño que merecían.

De forma personal, Yangyang tenía un montón de cosas que lo perseguían y no, no se trataba de algo peligroso, pero sí de un lado suyo que en la mayoría de veces prefería no mostrar por miedo a lo que otros piensen. Siempre creyó que ser parte de su vida era toda una aventura, pero ahora lo entendía: él no era difícil de amar, sus padres lo amaron desde el día uno e inclusive antes de eso ya lo hacían.

Salió con su cara recién lavada y sus ojos teñidos de rojo, inventando en automático una excusa en caso de que alguien preguntara. Pasó frente a las escaleras cuando el sonido de la puerta principal llamó su atención, viendo entonces a los culpables de su llanto entrando por ella.

ㅡ¿Está todo bien? ㅡPreguntó Minghao al verlo, lucía preocupado. ㅡ¿Sucedió algo?

El chico negó, conteniendo sus lágrimas una vez más. ㅡOh, sólo me cayó jabón en los ojos.

Pero ambos padres conocían a sus hijos como las palmas de sus manos, sabían perfectamente sus miedos, pasiones y sueños, tanto que esa mentira no era para ellos nada más que eso.

ㅡVen acá. ㅡMinghao abrió sus brazos y Yangyang bajó corriendo, escondiéndose en la persona que sería su lugar seguro desde que su formación gestacional había comenzado. ㅡLas cosas mejoran, ¿sabes? ㅡSu primer niño rió, sabiendo perfectamente que nada malo había pasado, pero apreciando aquel afectuoso abrazo.

Tras observar la escena, Junhui se acercó también, besando los cabellos de su hijo, dándole la seguridad de que estaban ahí y que no se irían así él lo deseara.

ㅡ¿Qué hacen? ㅡEsta vez era el dúo dinámico quienes los observaban desde en medio de las escaleras, sentados y esperando una respuesta. ㅡYo también quiero un abrazo. ㅡJongseong trató de enredar sus brazos en el cuerpo de su mellizo, pero este fue más rápido y esquivó el gesto, ocasionando que el otro se estampara con los barandales.

ㅡ¿Puedo unirme? ㅡNi bien esperó una respuesta, Seungmin se metió también a la cálida situación, quedando en medio de su hermano y su más alto padre. Fue seguido por Seong, quien quedó del otro lado de Yangyang.

ㅡCrecieron demasiado, ya no puedo abrazarlos al mismo tiempo. ㅡSe quejó Hao, pues aunque fuese un abrazo grupal, los tres adolescentes estaban recargados sobre él.

Jun los rodeó, cubriéndolos del lado por donde su esposo ya no los alcanzaba. ㅡ¿Te he dicho que juntos somos mejores?

Cuando regresó a su habitación, Chenle y Jaemin estaban viendo otro vídeo, esta vez era de él siendo un poco más grande. Se encontraba sentado junto a un Minghao que tenía una voluminosa pancita, mientras la voz de Junhui se escuchaba fuertemente tras la cámara.

ㅡPusimos otro, no vayas a llorar.

ㅡCállate el hocico, Jaemin. ㅡAhora no fue una almohada, sino Yangyang quien cayó encima suyo, sacándole el aire. ㅡ¿A qué hora se van? Comienzo a creer que no tienen casa.

El par compartió miradas. ㅡTú me invitaste.

ㅡY te puedo correr también. ㅡObservó después a su primo. ㅡ¿Te vas a quedar de nuevo?

Chenle negó. ㅡVendrán a recogerme como en unas dos horas porque están en una reunión o algo así. ㅡSuspiró, poniéndole play al vídeo que habían pausado apenas el de cabellos blancos comenzó a hablar. ㅡ¿Seguro que no llorarás?

ㅡQue no, chingada madre.

Entendió el significado tan importante de aquella carpeta, porque él también desearía guardar cada uno de sus recuerdos en un lugar especial. Supo entonces que de eso se trataba tener una familia y a Yangs le llenaba de orgullo poder presumir lo maravillosa que era la suya.

𖣠

hola q pedo

sé que tardé un poco, pero prometo
que ya estamos entrando en la parte
buena de la historia, sólo aguanten
un poquito más.

es un gusto saludarlos de nuevo,
espero podamos leernos pronto. 🫂