¿Pueden dos opuestos enamorarse? Kim Taehyung es un chico agradable, cariñoso y todos a su al rededor lo adoran, es popular en redes sociales debido a que es abiertamente homosexual, mientras que Min Yoongi es un chico odioso, homofobico y con el co...
—¿Te gusta el japchae?—Preguntó sin voltearlo a ver, estaba muy concentrado en su cocina, quería hacerlo perfecto y ver si así podía cambiar el mal genio de ese chico, en el fondo creía que en realidad no era tan malo como se hacia ver, ya no le importaba tanto el como lo trató antes.
—¿No estabas molesto de que comiera fideos instantáneos?—Reprochó mientras caminaba hacia la mesa de comedor, se sentó en una de las sillas.
—Oh, tienes razón. ¿Entonces bulgogi? Puedo preparar verduras salteadas también, de todas maneras ya las he picado.—Taehyung rió de si mismo y se dirigió al refrigerador para poder sacar la carne.
Yoongi no contestó nada, mantenía el ceño fruncido y su mano izquierda en un fuerte puño mientras lo miraba caminar de un lado a otro en la cocina. Sacando sartenes y preparando ingredientes. Pasó una mano por su cabello dándose cuenta de inmediato de que hacia falta su gorra, no recordaba que Taehyung se la había quitado antes cuando estaban fuera, ya se la pediría después.
Siendo realistas no quería entablar mucha conversación con él, se sentía extraño cada vez que ese castaño abría la boca.
Así que solo continuo mirándolo, la carne comenzaba a desprender un agradable aroma desde la sartén, realmente tenia hambre. Había estado siguiendo el consejo de Taehyung acerca de combinar la comida instantánea con algunos otros ingredientes. Compartió la información con Hoseok y ambos lo hacían ya que no sabían muy bien como cocinar... pero a veces el dinero no era suficiente, no lo sabían manejar y terminaban gastando la mayoría en drogas, igual eso era lo único que en verdad podía satisfacerlos, eso era lo que decía Hoseok cuando Yoongi le mencionó la idea de comenzar a ahorrar.
Namjoon no había cedido aún a aumentar su paga por lo que los últimos días solo había estado comiendo una vez al día, la mayoría del tiempo la pasaba drogado y eso lo hacia olvidarse del hambre momentáneamente. Es por eso que su hambrienta boca había comenzado a salivar en demasía al olfatear la preparación de Taehyung. Comida real.
—Muy bien... casi está listo. ¿Prefieres té verde o simple agua con hielo?—Dio a escoger está vez volteando a ver al pelinegro.
—Lo que sea.—Susurró mientras miraba un punto fijo en la mesa, estaba a punto de ser alimentado por el afeminado al que casi degolla con una navaja el primer día que lo conoció.
—Bueno, te miras cansado. Agua con hielo será.—Sonrió mientras sacaba una jarra y servia el agua en un vaso.
Taehyung apagó el fuego y comenzó a servir la comida ya lista en dos platos, ya había preparado bulgogi antes... pero esta vez de alguna manera fue diferente para él, lo sentía un momento especial. Inmediatamente recordó aquella vez en casa de Yoongi, cuando él preparo aquél ramyeon para ambos y de alguna manera le supo mas delicioso que de costumbre.
Llevó los platos a la mesa junto con cubiertos y dos vasos de agua, había colocado su comida junto a la silla donde se encontraba Yoongi. Este ultimo levantó por fin la mirada fijándola esta vez en el platillo que se presentó frente a él. Lucia realmente delicioso.
—Espero que lo disfrutes y cambies ya esa cara.—El mayor se sentó a un lado chocando su hombro momentáneamente con el del contrario lo que hizo que Yoongi volteara a verlo después de tanto tiempo. Taehyung le sonrió.
—Alejate.—Mencionó con ese típico tono en su voz.
—Lo haré si comienzas a comer.—El mayor se acercó mas a él, Yoongi tenso su cuerpo, avergonzado. Se bajó la mascarilla del rostro, tomó los palillos y comenzó a comer de aquella comida, estaba realmente asombrado por el sabor ya que hacia tanto tiempo que no se daba el lujo de comer algo que no fuera instantáneo, si no preparado especialmente para él. Solo para él.—Eso es. ¿Te gusta?—Taehyung se alejó dandole su espacio y comenzando a comer de igual manera.
—Es bueno.—Murmuró para rápidamente meter otro bocado en su boca, joder... realmente era delicioso pero no quería darle el gusto de elogiarlo.
En esos momentos... preparándole la comida, lo hizo sentir tan pequeño a su lado, como si Yoongi necesitara de él y no quería necesitarlo.
—Hey, ¿Qué te pasa?, estás extrañamente callado hoy, antes no parabas de maldecirme a diestra y siniestra.—Mencionó el castaño dándose cuenta de ello, ciertamente no recordaba que Yoongi fuera así de callado mientras estaba con él... tal vez porque no se encontraba en su territorio. Había un sutil cambio en su manera de comportarse por lo que había notado.
—¿Por qué te importa?—Preguntó después de tragar un bocado, tomo un largo trago de agua para ayudar a bajar la comida.
¿Por qué le importaba?
¿No habían dejado claro todo en su pequeña discusión en la habitación de Yoongi?
¿Por qué lo había invitado a su casa? Aún sabiendo todo lo que era Min Yoongi.
—Yo...—La cabeza de Taehyung ahora se encontraba dando tantas vueltas, no estaba seguro.
—Gracias por la comida, debo irme.—El menor se levantó rápidamente de la mesa, la silla hizo ruido por el movimiento tan repentino, pero Taehyung no lo dejo ir, lo había tomado por la muñeca impidiéndolo mientras se levantaba de su silla al mismo tiempo.
—Esta semana, realmente quería verte.—Menciono sin pensárselo mas tiempo, el rostro de Yoongi palideció.—Sé que suena extraño, pero... mi vida nunca había sido tan interesante antes de conocerte, si... al principio te tenia miedo pero ahora, creo que ahora ya no pienso lo mismo.
—¿Cuál es tu punto?—Preguntó Yoongi sintiendo el agarre de la mano de Taehyung pasar hacia la suya lentamente.
—No sales de mi cabeza...—El mayor lo jaló hacia si mismo, logrando que Yoongi lo mirara quedando así frente a frente, demasiado juntos para el gusto del menor.
A los ojos de Yoongi, él se miraba increíble, Taehyung frunció el ceño después de mencionar aquella inesperada frase ya que las mejillas blanquecinas habían tomado algo de color.
Taehyung se lo pensó algunos segundos antes de comenzar a acercarse mas de lo que tenia planeado, tuvo que agachar un poco su cabeza.
—¿Ya te miraste?—Susurró peligrosamente cerca.—¿Aún quieres destrozar mi cara?—Rápidamente, después de terminar la ultima frase, pudo acercarse lo suficiente como para robar un beso a los labios del mas bajo, sus labios solo permanecieron sobre los suyos, sin moverse. La cabeza de ambos seguía dando vueltas pensando en si eso era realmente lo que querían.
Pero Yoongi reaccionó antes, tomando toda su fuerza para poder empujar a Taehyung lejos de él. Aún estando separados, podía sentir el peso de aquellos labios sobre los suyos, si, se sentía humillado... y no entendía por qué razón le había gustado tanto.
—Estás loco.—Fue lo único que pudo formular antes de salir corriendo... nuevamente. Taehyung solo lo miró alejarse hasta que salió de la bonita casa. El mayor sonrió ampliamente mientras tocaba sus labios con la punta de sus dedos.
Comenzaba a querer realmente a ese delincuente grosero y lindo.
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