Capitulo 32

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CALLEJÓN DETRÁS DEL ALMACÉN

Taeyang sale del almacén con paso pesado, su rostro reflejando una mezcla de emociones. Namjoon lo espera en el callejón, con una expresión seria.

Namjoon con tono grave

-Es hora, Taeyang. Tenemos que irnos antes de que alguien nos descubra.

Taeyang mira a Namjoon con ojos cansados, su voz llena de frustración.

Namjoon lo mira y con la voz entrecortada

-¿Por qué lo haces, taeyang ? Sabes que no eres un asesino. No puedes seguir así.

Taeyang sostiene la mirada de Namjoon, con una mezcla de compasión y determinación en sus ojos.

Taeyang con tono tranquilo

-Lo sé, Namjoon. Pero a veces las circunstancias nos obligan a tomar decisiones difíciles. No podemos cambiar lo que ya ha pasado, pero podemos controlar lo que hacemos a partir de ahora.

Namjoon asiente lentamente, procesando las palabras de taeyang.

Namjoon con resignación

-Entiendo. Siempre haremos las cosas a tu manera, ¿verdad?

Taeyang pone una mano reconfortante en el hombro de Namjoon

Namjoon con empatía

-Esta bien, no estás solo en esto, taeyang. Estamos juntos en esto hasta el final. Ahora, vámonos antes de que sea demasiado tarde.

-Lo se Namjoon, pero está perra se lo merece y sabes muy bien que por Jungkook soy capaz de volverme un asesino

Namjoon asiente en silencio, aceptando la situación mientras se preparan para partir juntos hacia un destino desconocido. Mientras sus hombres se estaban encargando de luna.

....

Las luces de la ciudad parpadeaban como luciérnagas dispersas en la distancia, mientras Taeyang avanzaba por las calles solitarias con la melodía de la noche susurrando en sus oídos. Había pasado más tiempo fuera de casa del que había planeado, sumergido en las exigencias de compromisos inesperados que habían surgido al final del día. Aún así, la idea de regresar al calor de su hogar y de encontrarse con Jungkook y Taehyung, las dos personas más importantes en su vida, le daba la energía suficiente para sonreír al cansancio.

El reloj de la pared marcaba pasada la medianoche, la sala apenas tenia el brillo de una lámpara nocturna que había dejado encendida.

Avanzó hacia la habitación compartida, donde la puerta estaba entreabierta, invitándolo a entrar en el santuario de la intimidad que habían construido los tres. La escena ante él era la personificación de la paz, la luz de la luna se filtraba por la ventana, creando un juego de claroscuros sobre las figuras entrelazadas de Jungkook y Taehyung. Dormían profundamente, ajenos al mundo exterior, envueltos en un abrazo fraternal que, en cierto modo, también lo incluía a él.

Con movimientos medidos y cuidadosos, Taeyang se acercó a la cama, deslizando la manta para hacer espacio. Se despojó de su ropa, quedándose solo con su ropa interior, y se deslizó bajo las sábanas con la suavidad de una caricia. El calor de los cuerpos de Jungkook y Taehyung lo envolvió al instante, una bienvenida silenciosa pero palpable que le hizo cerrar los ojos y exhalar un suspiro de alivio.

Jungkook se movió ligeramente, murmurando algo ininteligible en su sueño, y Taehyung, en respuesta a la nueva presencia, se acurrucó un poco más cerca de Taeyang, buscando inconscientemente el confort de su calor. Taeyang, con su corazón hinchado por el amor, rodeó con un brazo la cintura de Taehyung y con la otra mano encontró la de Jungkook, entrelazando sus dedos con los suyos.

En ese momento, con la serenidad de la noche como testigo, Taeyang se sintió completo. No había palabras necesarias, ni gestos grandilocuentes. Todo lo que importaba estaba allí, en esa habitación, bajo esa manta, entre sus brazos. El mundo exterior, con sus ruidos y sus prisas, se desvanecía ante la simpleza de ese abrazo compartido.

Y así, en la quietud de la noche, los tres corazones latían al unísono, tejidos por el mismo hilo invisible del destino que los había unido. Taeyang cerró los ojos, permitiéndose ser llevado por las corrientes suaves del sueño, sabiendo que al despertar, los primeros rayos del sol encontrarían a los tres juntos, listos para enfrentar un nuevo día con la fortaleza que solo el amor verdadero puede dar.

.....

Los primeros rayos del sol se filtraban por la ventana, pintando de tonos dorados la habitación donde Taeyang, Jungkook y Taehyung yacían abrazados. El ambiente era tranquilo, como si el mundo entero se hubiera detenido para permitirles disfrutar de ese instante de paz y armonía.

Sin embargo, la calma se vio abruptamente interrumpida por el sonido insistente del teléfono móvil de Taeyang, que reposaba en la mesita de noche. El joven se removió ligeramente, desentendiéndose del abrazo fraternal para alcanzar el dispositivo y revisar el mensaje que acababa de recibir.

La expresión de Taeyang no cambió en lo más mínimo al leer las palabras en la pantalla, pero sus ojos reflejaban una sombra de conocimiento, un destello de algo que los demás no podían comprender. Jungkook y Taehyung, confundidos por su aparente indiferencia, intercambiaron miradas antes de preguntar con voz temblorosa

-¿Qué sucede, Taeyang?,-Dijeron al unisono

El silencio se extendió por un momento, cargado de una tensión invisible que flotaba en el aire. Taeyang finalmente levantó la mirada, con una serenidad que contrastaba con la conmoción que se reflejaba en los ojos de su novio y hermano.

-Luna ha sido encontrada muerta en un callejón. Parece que fue un asalto a mano armada, -informó Taeyang con voz tranquila, sin una pizca de emoción en sus palabras.

Jungkook y Taehyung se sorprendieron por la noticia, pero parecían no darle mucha importancia, como si la noticia no lograra conmocionarlos del todo.

- ¿Cómo pudo suceder algo así?, -exclamó Jungkook, con la voz cargada de sorpresa.

Taeyang los observaba en silencio, con una expresión enigmática que no dejaba entrever sus pensamientos más profundos. Sus ojos parecían contener un conocimiento oculto, una verdad que aún no estaba lista para revelar.

-Es una tragedia, -musitó Taehyung, con la voz tranquila.- Se merecía muchas cosas, Pero algo así, pero bueno ya está muerta

En medio del silencio que pesaba sobre la habitación, Taeyang finalmente habló, rompiendo la quietud con sus palabras calmadas pero cargadas de significado

-Bueno al final el destino se hizo cargo de esta mujer, Así no tendremos que preocuparnos más adelante

La aparente falta de reacción de Taeyang llamó la atención de los chicos. Su rostro impasible, sin ninguna expresión visible, contrastaba con la posible noticia que acababan de recibir.

-¿Estás bien, Taeyang?, preguntó Jungkook con preocupación en su voz, notando la aparente indiferencia de su novio.

-De maravilla mi amor,-Habló mientras se sentaba en la cama,-¿Porqué pasa algo?

-Solo que no te sorprendes de nada,-Dijo Jungkook sin dejar de mirarlo

-Como quieres que reaccione por esa mujer, que solo causo daño, bien merecido se tenía lo que le pasó

Jungkook queda sorprendido con sus palabras.

-Taeyang tiene razón Jungkook,-Dijo taehyung,-Ella solo daño,es una pena, si?, pero ya que

Los tres se volvieron a acurrucar en la cama y siguieron durmiendo por otro rato más.

......

Hola mis bell@s lectores
Les dejo un nuevo capítulo
Espero que lo disfruten 💞🥰

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