Capítulo : 2

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Lleve a la chica a una clínica sercana a la que siempre recurro , cuando necesito ayuda médica . Dejo que la revisen y busquen el diagnóstico , mientras yo pago por los servicios . Media hora más tarde veo salir el doctor del cuarto y me acerco a preguntar .

— ¿Es unted familiar de la pasiente? . -me preguntó el doctor.

— Somos conocidas , puede hablar tranquilo .

— La chica sufrió varios abusos sexuales , y no es desde hace poco se ve que lleva siendo abusada más o menos por uno o dos meses . Le recomendamos visitar a un especialista , como un psicólogo (a) , también ir a terapias .

— Muchas gracias doctor . Y si le entra algún ataque de anciedad o de deprecion ¿Qué debería hacer en estos casos ? , ¿Cómo la ayudaría ? .

— Bueno en algúno de esos casos . Le recomiendo que esté al tanto de ella, que le haga saber que tiene en quien confiar y que no está sola . Por ahora no es necesario mandarle medicación,   como sedantes o algo parecido.

— Gracias.
 
Voy al cuarto de la chica. Al entrar la veo recostada en la cama, tocó la puerta para que sepa que estoy aquí. Me mira y en sus ojos veo la esperanza de poder salir adelante. Y lo hará porque la ayudaré , haré con ella lo que no pude hacer con mis hermanas.

— Ya estás de alta, podemos irnos . - solo la ví asentir con la cabeza .— ¿Necesitas ayuda para levantarte?.

— Gracias por todo. - la escuché decir por lo bajo. — Te debo la vida.

— No me debes nada ok , Ise lo que tenía que hacer. Ahora nos vamos .

— Está bien.

   Salimos del hospital ,rumbo a mi apartamento. Bajamos del coche una hora después , subimos al ascensor y óprimo el botón del número 12 el cual es mi piso. Este hotel es de 12 pisos decidí cojer uno de los apartamentos del último piso son mis favoritos.
Entramos a mi departamento la veo que mira todo con asombro. La entiendo yo también me quedé haci la primera vez que lo ví.

Mi vida antes de que todo esto pasará era de clase media, nunca tuve necesidades pero tampoco estos lujos. Y ahora me los puedo dar, pero no como quisiera. Y aunque me gane el dinero de la forma más sucia posible, es la única forma que me ayuda a disminuir el dolor, la rabia, y la tristeza. Trato de alejar los pensamientos que nunca me avandonan.

Le enseño el cuarto a la chica y le indico que saldré un momento. Ella simplemente asiente, le dejo mi número en la mesa por si algo le pasa. Antes de salir me ducho y cambio de ropa por la de deporte. Me dirijo hacia el gimnasio del hotel, dónde se a convertido desde que llegué en mi lugar de desahogo.

                             *****

Me llamaron para un trabajo. Antes de irme le dejé el desayuno preparado a la chica que anoche me dijo que se llamaba Sam. Me preparo y salgo en mi coche al lugar. Mi teléfono víbra en mi bolsillo y lo saco, como lo sospeche:

Llamada entrante de SCORPION🦂🦂🦂.

— Habla. -digo a penas descolgar.

— Por dios, cuando será el día que no me respondes en ese tono o con más de una palabra. - dice riendo.

— El día que deje de matar porque me e enamorado y no por placer o dinero. - digo con una sonrisa en los labios. — Habla que estoy conduciendo.

— Logico. El lugar al que te debes dirigir, es por la avenida 13, calle 40, es el único local que está en mal estado, pero que aún así entran muchas personas. Te preguntarás el porque, muy simple tiene un sótano que por fuera parece un almacén pero al abrir una puerta que parece ser de una nevera te encontrarás uno de los cacinos más grandes de todo el estado. Tienes que eliminar a uno de los clientes, es nombrado como snake. ¿No crees que es una coincidencia viper.? - dijo eso enfatizando la última palabra. Yo solo rei por como lo dice.

— Yo no creo en coincidencias, yo creo en los hechos. Y ya déjame en paz,  tengo que terminar un trabajo. - cuelgo sin dejarlo hablar.
Condusco en silencio hasta llegar al sitio. Entro sin mirar a nadie y voy directa al sótano nadie me presta importancia, todos pensaran que soy una clienta ya. Al lado de la puerta ay un hombre que con cara de pocos amigos.

— Abre. -digo señalando la puerta.

— No.- dijo sin mirarme.

—¿ En serio? ¿ Porqué les gusta hacerme el trabajo más difícil? - digo con un claro tono de estresada .

— No.

— Ok como quieras.

Caminé en su dirección y me miró con cara cancina. No lo deje que viera mis intenciones. Pues le pege mi talón en su boca, lo escuché quejarse pero no espere a que se levantará. Entre y me quedé estatica al ver el espectáculo que tenía en frente. Scorpion me lo había dicho antes, pero no es lo mismo verlo tú misma. Me dirijo al bar, el barman me pregunta que deseo beber.

— Un daikiri de fresa.- digo mirando a mi alrededor.

Cuando estoy a punto de fijar mi vista en mi bebida recién servida, captó a una persona, si me preguntaran diría que muy diferente de las que están aquí. Es un hombre bien vestido, de tes blanca,  de pelo rubio dorado, es alto muy alto y está bien fornido. En ese instante se da la vuelta y me pilla mirandolo, no volteo me quedo fija mirandolo a los ojos.

Eso lo extraña, se le ve en la cara. Pongo mi mejor cara de aburrida y de poco interesada y le doy un sorbo a mi bebida. Y eso sí que llama su atención al parecer nadie lo a ignora así y sé que está a punto de venir.

Tal como lo sospeche siento una mirada en mí nunca o en mi trasero. En uno de los dos, veo de reojo que se sientan a mi lado, no lo miro.

— Un whisky. - oigo que le dije al barman. Tiene una voz ronca y seductora.
Siento su mirada en mi, lo miro con cara de indiferencia. Lo veo sonreír, es una sonrisa que apenas se ven sus dientes, pero que se le hace un hoyuelo.

Pero esa perfección no fue lo que en verdad me sorprendió, si no lo que dijo :

— ¿Vienes a matarme verdad? -

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Hola, hola. Sorry por la tardanza, pero tengo una excusa aceptable. Y esa el gran nombrado internet. Me quedé sin internet todo este tiempo. Por eso subiré doble actualización.🦂🦂 Besos y no olviden votar.

¿Y si no son mariposas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora