Naruto - Nación del Nuevo Viento ✔️

17 - Guarida de la Serpiente ~ Buceador (parte 3)

Naruto volvió en sí lentamente. La cabeza le latía con fuerza y sentía el cuerpo extrañamente dolorido. Aunque parpadeó con los ojos incrustados de sal, todo seguía muy oscuro. El único sonido era su propia respiración áspera y el suave chapoteo del agua contra la roca.

"Tranquilízate. Casi te ahogas", dijo alguien suavemente a su lado.

"Yo... ¿Isaribi?" dijo Naruto. "¿Me salvaste...?"

Intentó incorporarse, pero la cabeza le daba vueltas, lo que le obligó a cerrar los ojos para no vomitar. Una mano suave le frotó la espalda, y una especie de recipiente se acercó a sus labios. Naruto bebió lentamente, aunque probablemente iba en contra de lo que los shinobi considerarían sentido común.

Sólo era agua, ligeramente rancia, pero Naruto se alegró de ello. Con la garganta despejada, por fin pudo respirar y hacer balance de la situación.

Cuando se adaptó a la penumbra, pudo ver que Isaribi estaba arrodillada junto a él, ambos aún húmedos por el baño en el mar. Ella había encontrado y encendido una linterna, que iluminaba una tosca caverna, con un charco de agua oscura a un lado y una estrecha franja de costa rocosa al otro. Había varias cajas viejas apiladas contra la pared, y cerca algo que parecía una puerta.

"Gracias. Me has salvado de verdad", dijo Naruto, sonriendo a la chica, que se dio la vuelta rápidamente. No dejó que su timidez le molestara: no era más extraño que el extraño comportamiento de Gaara. Ambos habían tenido vidas difíciles.

"Te dije que te mantuvieras alejada", dijo Isaribi en voz baja. "Porque así es peligroso".

"¿Así que me seguiste porque estabas preocupada?" preguntó Naruto. "Gracias por eso también. Pero ahora estamos en la Isla de los Demonios, ¿no? Y esta cueva..." Vio cómo Isaribi se ponía tensa, pero continuó. "...Es el lugar donde se llevaron a los desaparecidos".

Su instintivo respingo fue respuesta suficiente. Parece que hemos encontrado la guarida de Orochimaru", pensó Naruto.

"Pero parece que este lugar lleva mucho tiempo abandonado", continuó con indiferencia. "Así que supongo que no tenemos que preocuparnos de que nos atrapen ni nada por el estilo. Eso está bien". Gimiendo un poco, se puso en pie y se estiró. Sonriendo, Naruto decidió: "¡Voy a echar un vistazo!".

"¡No debes!" estalló Isaribi. "¡No es seguro, aunque no haya nadie aquí!"

"No pasa nada. No tienes por qué preocuparte", le aseguró Naruto con una sonrisa. "Soy un shinobi. ¡Puedo evitar las trampas fácilmente! Y por eso he venido al País del Mar. Gracias por guiarme hasta aquí. Este lugar debe de tener muchos malos recuerdos para ti. No tienes por qué quedarte".

"Pero..." Intentó decir Isaribi.

"Debe de haber otra salida", razonó Naruto. "No habrían nadado siempre hasta aquí a través de los remolinos. La encontraré". 'Y arrastraré aquí a ese estúpido de Kaze', añadió mentalmente. 'Para que me ayude a mirarlo todo'.

"¿Sabes... qué es este lugar?". preguntó Isaribi en voz baja, apartando de nuevo la mirada.

Naruto asintió lentamente. "No exactamente, pero puedo adivinarlo", dijo. "El tipo que utilizaba este lugar experimentaba con la gente. Secuestraba a todo el que se acercaba y lo utilizaba para sus desastrosas investigaciones. Probablemente... la mayoría murieron. Pero tú lograste escapar".

Finalmente, Isaribi asintió. "...Es porque soy..." No pudo pronunciar las palabras.

En su lugar, levantó un brazo, el que antes había estado envuelto en vendas. Todo ese brazo... estaba cubierto de escamas.