Capítulo 40

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Minato caminaba con Jiraiya a su lado y Naruto sin su traje anbu, el menor llevaba su uniforme jounin, no permitían por seguridad shinobis con máscara, portaban sus grandes capas que los cubrían del frío, llegaron al enorme pico escarpado en las montañas nevadas del país del hierro, las puertas se abrieron ante ellos dejándolos entrar al enorme edificio, era un edificio oscuro lleno de samurais que veían con cuidado al grupo, las puertas de la sala donde se llevaría a cabo la cumbre se abrieron frente a los tres, el silencio fue evidente, los observaban con precaución al entrar.

Naruto podía identificar a los kages y a sus guardias, las habilidades heredadas del demonio lo hacían percibir a los bijuus, giró su mirada a Rochi, apretó ligeramente el ceño al identificar a un jinchuriki, giró nuevamente su mirada observando al nuevo Kazekage, era el chico que salió de control aquel día en la invasión de Suna, Gaara, el jinchuriki del Ichibi, giró sus azules nuevamente, podía ver al jinchuriki del Hachibi y a la chica del Nibi, guardó silencio girando suavemente su rostro con duda, todos lo veían específicamente a él, el anciano debió hablar sobre su identidad como Senju.

-Minato Namikaze, veo que trajiste al chico Senju- el Hokage vió con filo en su mirada al maldito anciano, veía ambición en sus ojos- dime una cosa, se parece bastante a ti, ¿no habrás cometido un desliz en años pasados?- sonrió con burla, el rubio kage sonrió con sarcasmo- veo que estás bastante informado Oonoki, ya sabes, Naruto no es un jounin en servicio, me pregunto, ¿qué más sabes?- guardaron silencio, el anciano lo veía con coraje, A apretó el ceño- ¿para qué mierda nos citaste Oonoki?, espero sea importante, tengo bastante trabajo- Gaara veía al rubio menor con seriedad, era noppera bo, el sujeto que había humillado a su padre, era joven, abrió sus ojos bastante, parecía de su edad, entonces cuando atacó a su padre era casi un niño, observó cómo lo veía con detenimiento, parpadeó con curiosidad.

-Konoha violó el tratado de los bijuus, el estatus quo se perdió, como podrán entender, esto nos involucra a todos- guardaron silencio, A apretó el ceño, giró su mirada a Minato que veía con la mirada fría a Oonoki -¿de qué demonios hablan Minato?, esto podría desatar una nueva guerra- el rubio levantó una ceja con molestia -niego esa acusación, no sé de qué demonios habla, pero yo sí tengo pruebas, Iwa traspasó nuestras fronteras y atacó deliberadamente a mi gente, intentó secuestrar a Naruto, asesinaron a mi guardia en la frontera y el equipo anbu que respalda a mi shinobi regresó herido, no hubo jinchuriki, hubiera sido evidente su presencia, estoy seguro que un jinchuriki hubiera causado un daño grave a mi anbu, Han y Rochi son poderosos- guardaron silencio, Oonoki apretó sus puños cabreado, golpeó la mesa- no te quieras pasar de listo Namikaze, ese mocoso robó a mi jinchuriki y a la bestia- apuntó con coraje al rubio menor, Naruto veía con la mirada gris al anciano, giró su rostro analizando al sujeto.

Minato se enderezó- ¿qué pruebas tienes para señalar tu acusación?, por mi parte puedo presentar al mismo Naruto y a su equipo, como testigos del ataque, también puedo dar información- guardaron silencio -¿de qué información hablas Minato?- el Hokage sonrió ligero a A- ¿le vas a creer?, demonios, es obvio que es mentira todo lo que salga de su boca maldita sea -Mifune levantó su mano callando al Tsuchikage- dejemos hablar al Hokage y que dé la información que tiene -Minato ignoró al anciano de la roca y sus gritos- tengo información sobre una organización criminal que está detrás de las bestias con cola, su nombre es Akatsuki, está formada por desertores rango s, tengo el nombre de algunos de sus miembros, no sé específicamente su objetivo, pero estoy seguro que si nueve criminales de gran poder se unen para robar a las bestias con cola, su objetivo no debe ser nada bueno y eso involucra a todas las naciones ninja-

Afilaron su mirada -esto es mierda, quieres distraer nuestra atención del principal objetivo de esta reunión, ¿dónde demonios tienes a la bestia?- Minato giró su mirada grisácea hacia el sujeto, el anciano tragó pesado- Oonoki-san, Minato no miente, nosotros también tenemos información sobre esta organización, no es un juego, sospechamos que el anterior Mizukage fue controlado por un genjutsu por alguno de los miembros de esta organización, la niebla sangrienta fue el resultado- guardaron silencio escuchando a Mei, esa era una declaración peligrosa, Minato apretó el ceño.

Naruto y Jiraiya apretaron el ceño preocupados, entonces estaban en lo correcto, Oonoki veía a todos analizar, escuchó la información que tenían, él mismo había usado los servicios de estos sujetos, apretó el ceño cabreado, sabía que no recuperaría tan fácil a Han, levantó su mirada viendo al rubio menor, apretó su mandíbula, necesitaba desquitarse- Iwa accederá a cooperar y trabajar con el resto de las aldeas ninja, olvidaremos los rencores de guerra, a cambio de una simple petición-

Minato afiló su mirada, ese maldito anciano no era de fiar, todos escuchaban con cuidado, era obvio que buscaba algo- entrega al mocoso y firmaremos un tratado de paz con konoha- el Namikaze hizo gris su mirada, Naruto apretó el ceño bastante, Jiraiya apretó sus hombros respaldando al chico, el menor no estaba de humor -Konoha no accederá a chantajes Oonoki, no te pases… -Naruto interrumpió haciendo grises sus azules- Minato-sama- el kage giró su mirada molesto sin voltear hacia atrás -tal vez debería considerarlo- los kages abrieron sus ojos bastante, Minato volteó cabreado viendo a su hijo, Naruto lo vió con seriedad- vamos, el chico ya accedió Minato- el pequeño Senju levantó su mirada fría al Tsuchikage que sonreía con maldad -siempre y cuando regrese el legado Uzumaki y su nieta entregue su vida a cambio de la destrucción que generó Iwagakure en el Remolino, sería un trato justo- abrieron sus ojos bastante -¿cómo te atreves mocoso?, eso a ti no te incumbe-

Naruto levantó su mirada con fastidio- no entiendo, le estoy entregando mi vida, ¿no era lo que buscaba?, es un trato justo, al final es una guerra donde cada parte ha perdido a sus seres queridos, sería infantil y deshonroso seguir con una lucha donde nadie más quiere pelear, konoha está cansada, supongo su gente también, sería egoísta sólo pensar en los rencores personales, las nuevas generaciones no saben nada de esas guerras, ¿por qué involucrarnos?, simplemente me entregaré y usted entregará a su nieta, así sólo moriremos dos en lugar de miles de personas- el anciano abrió sus ojos bastante- un gran kage siempre piensa primero en su gente, mi sueño es ser Hokage, sería humillante no entregar mi vida por la paz de mi aldea y seguir buscando cobrar venganza de antiguas disputas, prefiero morir antes de humillarme de esa forma-

Minato y Jiraiya sonrieron ligero orgullosos del chico, Naruto dió un paso al frente con una mirada llenada de determinación, el chico no jugaba, Oonoki apretó sus puños cabreado, tomara la decisión que tomara quedaría mal, era un hijo de puta astuto ese mocoso, se las pagaría -entregue a su nieta, el legado Uzumaki y en este momento ambos daremos nuestra vida- el Tsuchikage golpeó la mesa con coraje, si seguía con la guerra ahora sería visto como alguien bélico e infantil, alguien a quién no le importaba su gente, se humillaría, si accedía al trato del chico, su nieta amada perdería la vida y quedaría como un estúpido al entregar su vida y ceder ante los caprichos del enemigo, demostraría debilidad -mierda mocoso astuto- guardaron silencio, A, Mei y Gaara sonrieron ligero con algo de diversión- entonces hablemos de un tratado momentáneo de paz en lo que resolvemos la situación de Akatsuki- Minato sonrió al escuchar a A, había orientado la plática hacia ese tratado, si él lo planteaba, Oonoki se opondría, observó cómo todos accedían y comenzaban a redactar el acuerdo.

Noppera bo (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora