Ser el sirviente del posible heredero al trono es más que complicado cada día que pasa, aunque es su trabajo desde que tiene 14 años.
Ahora con 22 sigue sin acostumbrarse al ritmo tan cambiante del príncipe Kornthas y sufre por ello, tanto físicamente como mentalmente por lo que implica ayudar a un alfa a tener su vida en orden.
Nat es un omega huérfano que fue abandonado de niño en el establo del castillo de aquel reino en las colinas, rico en moneda y cosechas. Seguramente abandonado a causa de la guerra con el reino vecino.
Fue criado con la servidumbre, quienes no tuvieron el corazón para abandonarlo a su suerte como inicialmente les habían ordenado los guardias.
Aprendió desde tejer, coser, cocinar y todo para tener las aptitudes necesarias y integrarse como parte de la servidumbre del castillo. Durante sus pruebas a los 14, fue escogido para atender exclusivamente al príncipe Max.
El príncipe Max era un alfa de 25 años, testarudo al que debía atender en todas sus necesidades, 1.82 de puro músculo y imponente aunque fuera el menor de la familia Kornthas.
Siempre fue fuerte, ambicioso y en extremo listo, a pesar de un chance altamente reducido, siempre estudio para ser el heredero oficial del reino y gobernar como rey. Ese era su sueño.
Lucha todos los días para educarse más, crecer más y ser aún más capaz que cualquier otro para obtener ese cargo, Nat lo a visto año tras año estar aún más preparado para cada nueva tarea que le sea asignada y lograr su objetivo.
No tienen los mismos objetivos que su hermano mayor Net, quién para muchos es considerado como el heredero legítimo al ser el primogénito.
Net deseaba con todas sus fuerzas tener una familia, conocer su destinado y vivir en el campo, dedicando su vida a ser padre y esposo ejemplar.
Max deseaba poder, deseaba status, riquezas y ser prospero con su pueblo, expandir el imperio de su padre a como diera lugar. No creía en los destinados.
El pequeño huérfano siempre vio esta constante pelea tras bambalinas de quién rechaza el poder y el que lo desea tan fervientemente.
Al menos hasta que el príncipe Net se fue algunos meses atrás buscando su destinado en los reinos más lejanos y se quedó atendiendo al muy emocionado príncipe Max.
La partida del mayor de los Kornthas representaba una ventaja que tenía ahora el príncipe Max para obtener su más grande deseo. La corona.
Era más que el tiempo que necesitaba para poder convencer al parlamento y sus padres de ser un hombre con lo necesario para llevar este reino en sus hombros.
A pesar de ser su sirviente personal, Nat rechaza muchas de las cosas que su señor propone, por ejemplo, odia que sea tan sediento de poder pero lo que más los diferencia es que el si cree en los destinados.
El cree que Max es el suyo.
La fuerza con la que su corazón late cada mañana por el príncipe es increíble, no es normal la frecuencia con la que se atrapa a sí mismo fantaseando con aquel hombre de pecho ancho y cabellos oscuros.
Al principio pensó que era solo las hormonas y su crecimiento, era un omega en pleno desarrollo cuando fue contratado para un alfa tan atractivo y dominante como lo a sido Max, pero el sentimiento nunca paro, jamás lo hacía.
Cada pequeña acción del mayor era para el la condena, sentía su corazón a mil, imaginaba ese mundo donde el no era un simple sirviente, sino aquel que estaba cabeza a cabeza, lado a lado con el.
Si le preguntan, eso de heredar la corona y convertirse en el rey consorte le importaba nada, Max podía ser un granjero y él estaría feliz de estar con el labrando la tierra.
ESTÁS LEYENDO
Tyrant. - Maxnat
FanfictionMax es un alfa, hijo del rey del reino más rico de Tailandia quien desea heredar el trono. Pero al ser el hijo menor de la familia Kornthas, su única opción es casarse y tener un hijo antes de que su hermano vuelva a reclamar su posición. Por ello y...