Dos bandos // Minsung

대양 24: Yo también lo siento 대양

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Allí estaba, el puerto principal de Seúl.

Minho sintió un nudo en su garganta y sonrió. Seguía igual, los marineros y piratas pegando voces, algunas ratas y gaviotas merodeando, niños corriendo por entre los callejones, cajas de pescado amontonadas en varios sitios.

Se hizo un poco de revuelto cuando tuvieron que atracar el barco, ya que enseguida varios hombres en el puerto salieron corriendo y gritaron varias cosas.

Sé bajo la pasarela y Minho se obligó a tomarlo con calma, siendo uno de los últimos en bajar.

Nadie había salido a recibirles, ya que no habían notificado a nadie de su llegada. Posiblemente, recibirían varios regaños y habría lágrimas, pero con el tiempo todo se olvidaría.

-¿Nervioso?- pregunto Minchan, quien había sido recogido en el puerto este. Minchan había decidido quedarse en Corea, en el puerto este, para asegurarse de llevar un control y que las cartas que eran intercambiadas, no fueran interceptadas.

-Mucho.- admitió.- Siento de todo ha pasado en un suspiro.

-¿No hay nadie?- se quejó Jihoon, bajando.- Vaya... recibida.

-¡Seungmin!

Changbin, eufórico, apareció junto a ellos, pero enseguida se puso a correr en dirección a un chico que estaba etiquetando cajas.

Seungmin tiro los papeles al suelo y corrió para abrazar a Changbin, quien lo alzo en los brazos. Minho fantaseo por un segundo y decidió que se pondría en marcha.

Junto a Jihoon, Minchan y Jiae, comenzaron a caminar hacia el Jaem y la casa de los Han, que no estaba a más de cinco minutos de allí.

Cuando podía ver su habitación desde lo lejos, la puerta de la casa se abrió y salió la señora Han, alterada. Los vio y comenzó a llorar, echándose al suelo.

Miyuri y Yunah fueron las siguientes, esta última bajando las escaleras con un niño de casi un año tomado de la mano.

Jihoon fue el primero en correr hacia su mujer, abrazándola. Jiae hizo lo mismo, y Minho termino por bloquearse al notar que nadie más parecía salir de la casa.

Se quedó al inicio de las escaleras, debatiéndose en sí entrar o preguntar a alguien por el paradero de Jisung. Hasta que Jihye salió de la casa y un llanto provoco que todos se giraran en su dirección.

Minchan abrió sus ojos con sorpresa y enseguida se acercó a su mujer.- Jihye... ¿de quién es ese bebé? ¿Hemos tenido un hijo?- pregunto asombrado, y ciertamente alarmado.

JIhye puso una mueca, y todas las mujeres presentes parecieron quedarse mudas. La mirada de la única hermana Han cayó sobre Minho y dudo.

-No es mía.- finalmente dijo.

-¿De quién es?- pregunto Jihoon.- ¿Os la encontrasteis en la calle?

-No digas tonterías.- intervino la señora Han, dándole un golpe a su hijo en la cabeza.- Es una Han de sangre, pero es... complicado.

-No es bueno que hablemos de esto aquí, además, falta...- comenzó a decir Miyuri, nerviosa.

-Minho.- llamo Jihye, apartando a Minchan y caminando hacia él. Minho miro el bulto y noto la cara arrugada de aquella pequeña bebe de mejillas grandes y cabello negro.- Ella es Han Hayoon, tu hija.

Enseguida miro a Jihye, frunciendo el ceño.- ¿Qué dices?

-Es hija tuya.- repitió Yunah.- Y también de Jisung.