II

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Escuchaba el sonido lejano del sonido de la puerta al ser tocada.

--- ¡Joven Iván!

Volvieron a tocar y despertando de apoco frunció un poco el ceño a los molestos ruidos.

--- ¡Joven Iván por favor despierte!

"¿Qué mierda?" Se sentó en su cama aún adormilado y ahora frustrado. Observó a su alrededor por pequeñas rendijas entraba la luz natural. Tomó su celular que tenía a un lado de su cama. 6:50 a.m decía el reloj en la pantalla.

Volvieron a tocar la puerta y soltando un suspiro habló.

--- Ya estoy despierto. -- su voz ronca resonó en su gran habitación. Alertó a Micha quien estaba dormida en su cama.

La pequeña felina, se levantó y empezó a estirarse para luego subir a la cama de su adorado amo. Este la recibió con una pequeña sonrisa y comenzó a darle caricias, mejorando su mañana al escucharle ronronear.

--- Voy a entrar. -- anunció la voz masculina del otro lado y al segundo se abrió la puerta. --- Buenos días joven. Vengo anunciarle que el desayuno ya está listo, sus padres salieron temprano. -- Iván asintió. --- Hoy el horario del entrenamiento es dos horas más temprano, debido a la reunión que habrá hoy, se le pidió a su profesor que lo cambiará.

El príncipe asintió aún acariciando a la pequeña gata.

El joven observó en la tablet que traía en sus manos, viendo las actividades para ese día.

--- Luego tendrá que medirse los trajes que se le dejaron preparados para hoy, son en total cinco, diferentes colores a su gusto. -- le observó. --- Usted podrá elegir cual sea. La clase de piano está cancelada por hoy y el rey dijo que fuera luego de esto a su oficina.

Terminó por decir esperando la respuesta del pelinegro.

--- Esta bien, muchas gracias. -- dijo sin más. --- Podés retirarte.

--- Con su permiso. --- el muchacho salió y cerró la puerta tras de sí.

Luego de eso, Iván no tuvo más opción que levantarse y se dirigió a su baño para lavar sus dientes y enjuagar su cara. Se observó en el espejo, tenía un poco la cara marcada a un lado por la posición.

Esa noche tendrá que juntarse con personas que no quería, algunos jóvenes mimados deben de haber y se sentía agotado, de solo pensar en que tenía que actuar para guardar apariencias. Poner una falsa sonrisa y fingir estar interesado en ellos.

Será una tarde/noche muy cansada. Pero tenía que aguantar y buscar a alguien que le llame su atención para que sus padres no le busquen una pareja por él. Sólo esperaba que sea quien sea, tenga una personalidad buena, que sea un poco compatible con la suya para interesarse un poco.

Podrían llegar hasta ser amigos y compartir ese disgusto por un matrimonio obligatorio. Deseaba que al menos valiera la pena esa noche.

 Deseaba que al menos valiera la pena esa noche

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Sutileza. [Rodrivan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora