Como Alimentar a un Ab1smo

Capítulo 18: Apodos

El 11 de septiembre, tercera reunión interna del Teatro de la Rosa Salvaje.

"¡Compañeros, hemos sido penetrados por el enemigo!" Dijo Cheng Youwen.

Shi Yuan recogió un trozo de pan y se concentró en desayunar. En los últimos días, descubrió que los bollos de leche que vendían junto al teatro eran buenos. Los compraba todos los días y los comía. No se dio cuenta de que Cheng Youwen se refería a sí mismo.

Cheng Youwen volvió a insistir: "¡Está dentro!"

Qin Luoluo se rizó las puntas del pelo, se miró en el espejo para comprobar sus pestañas postizas y oyó las palabras: "Ese es tu enemigo imaginario, no tenemos opinión sobre el General Lu".

Tracy vitoreó: "¡Quiero su autógrafo! ¡Una foto! ¡Un autógrafo! ¡Una foto!"

Shi Yuan levantó la cabeza al oír 'General Lu'. Cheng Youwen suspiró pesadamente y preguntó a Shi Yuan: "¿Cómo se conocieron?".

Shi Yuan dijo vigilante: "No conozco a Lu Tinghan".

Recordó que Xia Fang había dicho que a Cheng Youwen no le gustaba Lu Tinghan.

Las cejas de Cheng Youwen saltaron: "¿Entonces dime quién vino ayer?"

"Fue Lu Tingting", dijo Shi Yuan. "Se parecen un poco, pero ése es Lu Tingting".

Cheng Youwen: "......"

Nadie cree esto realmente, ¿verdad? ¿Cómo puede Shi Yuan decir tales mentiras tan seriamente?

Mirando su expresión, ¡realmente pensaba que podía engañar a todo el mundo!

Cheng Youwen respiró hondo unas cuantas veces antes de calmarse: "Shi Yuan, Shi Yuan, ¿por qué no dices simplemente que son clones, ah?". Se frotó las cejas. "Bien, bien, ¿entonces cómo conociste a ese 'Lu Tingting'?".

"Vino a verme antes", dijo Shi Yuan.

Cheng Youwen: "Hasta el guerrero más fuerte puede ser seducido por una belleza".

Shi Yuan dijo de nuevo: "Entonces se fue sin mí".

Cheng Youwen: "Desde la antigüedad, dos hombres suelen tener mala suerte".

Shi Yuan dijo: "Le encontré de nuevo".

Cheng Youwen: "¡Un espejo roto unido!"

En sólo tres frases, Xia Fang ya se imaginaba una sangrienta historia de amor con altibajos. En voz baja le dijo a Qin Luoluo: "No había visto que el General fuera un hombre escoria".

"Yo también", susurró Qin Luoluo. "Mira la cabeza tonta de Shi Yuan, todavía está tan contento de que le engañen, que el General incluso soporta mentirle".

Como guionista, Cheng Youwen obviamente se inventaba más tramas. Tomó la mano de Shi Yuan y odió que el hierro no pudiera convertirse en acero, y dijo: "Shi Yuan, cuando se rompe, se rompe. No necesitas perder el tiempo con él. Verás, hay tantos jóvenes talentos en esta ciudad, y hay más que suficientes hombres buenos. Hay un rincón de citas a ciegas en el lado oeste de la plaza de la ciudad. Ve allí a dar un paseo y asegúrate de tener a alguien. Hay 1, 0 y 0,5. Si quieres una raíz número dos, puedo encontrarla para ti..."

"¡Para, para, para, para!" Qin Luoluo le interrumpió. "Mírate ahí, Shi Yuan lleva mucho tiempo sin comer un trozo de pan. Cuando tengas tiempo libre, podrán discutir el tema de la raíz número dos, ¿de acuerdo? Esta reunión ya ha durado bastante, así que date prisa y ensaya".

Cheng Youwen se detuvo amargamente.

Después de la actuación de ayer, la compañía recibió una tras otra las opiniones del público, y Cheng Youwen estaba revisando el guión. Y hoy ensayarían el segundo acto, Shi Yuan tenía que interpretar otro papel: el demonio árbol.