𝐭𝐡𝐞 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐜𝐚𝐫𝐧𝐚𝐭𝐢𝐨𝐧-Sunoo Harem

22; Villanos.

La familia Yoon.

Entonces lo supuse, la mujer frente a mi era la villana.
Cabellos marrones hasta los hombros y ojos negros pequeños, ademas de finos labios, todo lo contrario a la protagonista femenina. Pero habia algo en Lia que nunca podria tener Yuri, y  lo sabia muy bien, su personalidad inquebrantable, la cual no desaparecio incluso después de todo lo sucedido a causa de ser la enemiga de la protagonista.

El unico defecto que esa chica tenia era estar enamorada de un hombre que no le correspondia e incluso, uno, por desgracia, bastante idiota.

-¿Por que haces una mueca? ¿Todavia duele?

-Ah, si me duele el cuerpo pero no es nada. En realidad, queria saber, ¿Como llegue aqui? ¿Y quien eres tú?

Obviamente lo sabia, pero en realidad no debia ser asi, nunca Sunoo y Lia se vieron a la cara, jamás ya que Sunoo murio sin que encontraran su cuerpo.

-Soy Lia Yoon, hija de Jaehyun y Jeongyeon Yoon. Y para aclarar alguna duda mas, ya que se que no debes saberlo tampoco, mi hermano mayor, Jeonghan, es esposo del hermano del rey.

-Eso.... Lo sabia.

-Si no me conoces, dudo que supieras de mi familia tambien, no es de avergonzarse, Kim, se quien eres.

-Es asi. Entonces, Lia, eres prometida de el principe heredero.

-Aja.-no parecia sorprenderle que supiera ese hecho.-Bueno, volviendo a lo inportante, para que no te asustes, un medico ya te reviso, tus heridas sanaran rápido una vez que...

-Tu collar es precioso.

Lia se detuvo ante mi intertupcion y miro el objeto colgante en su piel, de forma de gema, de un tono violeta claro casi lila, y con cadenas de oro envonviendolo,  para regresar la mirada a la mia. No me espere que me sonriera un poco, pero la mueca rapidamente desaparecio.

-Es una reliquia familiar que va pasando de generación en generación, en realidad, mi hermano deberia tenerla pero me la obsequio cuando hice mi debut.

-Ademas de una piedra preciosa tiene una historia, cuidalo bien.-asenti, tratando de levantarme para sentarme.

Logre sentarme, soltando una queja cuando mi espalda, y otras partes, me dolieron, pase las yemas de los dedos por esa zona baja, sintiendo la aspereza de una gasa y algo un poco humedo.

-Ya tendrían que cambiarte los vendajes, por lo que veo.-dijo Lia, que habia mirado cada movimiento, y se acerco aun más.-Creo que no podras irte en carruaje, recuestate de nuevo.

-Esta bien, esto no es nada, tengo que volver antes que anochezca.

-Pero...

-Gracias por la ayuda, ya me voy.

-Tu no te iras de aqui, Kim.-me freno cuando me gire para intentar bajar de la cama, el agarre en mis hombros fue fuerte y su mirada descidida.-Vuelve a acostarte, llamare a el doctor de la familia para que te cambie.

Suspire, su tono no daba paso a replica pero ya estaba anocheciendo, lo notaba a traves de los ventanales de la habitacion, y me seria mas riesgoso andar en la oscuridad en el camino a casa, por lo que recurri a lo que me parecio mas sensato.

-Soy un bastardo del rey, y tu eres la prometida de Yeonjun, que crees que pensara este cuando sepa que me ayudaste, podria romper el compromiso.

-No te preocupes, Kim, y haz lo que te digo. No dejaras la casa Yoon con esas heridas.

Sin mas opcion, me recoste de mala gana con un bufido. Mientras ella iba a llamar al dichoso medico, con el cual volvio mas tarde, el hombre, del que no tenia idea por cierto, era bastante mas bajo de lo que esperaba, un delantal blanco que le llegaba a las rodillas, de piel pálida y con unas profundas ojeras, me dio una inclinacion al entrar.