-Jay...-llame su nombre en un suspiro, estaba agotado.
El subdicho que se había acostado boca abajo a mi lado, sonrió al mirarme entre su cabello revuelto que le tapaba un poco la visión.
-¿Si, mi príncipe malcriado?-tarareó, levantando una mano para apisonar mi mejilla y con sus dedos, rozar mi oreja. Envolviéndome en calidez con solo ese toque.
-Dame mucho mas amor.-pedí, sonando como una orden, y su respuesta fue besarme.
Me desperté con ese sueño fresco en mi cabeza, parece que había pasado demasiado tiempo de esa noche. Aunque no me gustara, lo extrañaba a el, y al resto, pero con Jay... Me provocaba algo extraño en el cuerpo, eran cosas diferentes.
Había pasado ya una semana. No faltaba nada para la cacería, tres semanas exactamente, hecho por el cual no pude dormir bien, y les cause molestias a las sirvientas que en vano intentaban hacerme sentir mejor, dándome todo lo que se les ocurriera, porque yo era como un niño allí, al que debían cuidar y que este siempre tranquilo, como una muñeca nueva que los Yoon querían pulir para devolverme en el mejor estado posible.
Dos toques sonaron en el silencio del cuarto, y después una voz familiar, por lo que dije que podía pasar. La joven castaña, de piel pálida y llevando puesto un vestido color violeta con detalles blancos , entro con calma. Seguida de tres sirvientas y un sirviente, todos con sus trajes a juego, blanco y negro.
-Buenos días, ¿Cómo despertaste hoy?-saludo sonriendo un poco, y miro al sirviente, quien rápidamente y de manera suave, me dejo la bandeja de comida en una mesita, entre mis piernas.
Le agradecí con una sonrisa al chico castaño, y mire a Lia, que en un gesto que no me paso desapercibido, se limpio el sudor de la frente mientras acomodaba su cabello, parecía recién llegar de algún evento. No tenia idea de la hora, pero no debía ser tan temprano como creí segundos atrás.
-Bien, como siempre.-refunfuñe, lo que le causo una risa. Comencé a comer mi desayuno en lo que continuaba.-¿Cuando me voy a ir?
Una de las jovenes se me acerco, tenia una trenza que le quedaba linda aun con esos pañuelos que les hacían ponerse en la cabeza, pero evitaba mis ojos en lo que me servía el te. Le murmure un agradecimiento, y olí el aroma que emanaba la humeante taza de porcelana blanco con trazos dorados, era preciosa. Parecía ser de frutilla, no me gustaba mucho pero me calle y lo bebi de todas maneras, sin querer inquietar a los sirvientes.
-Paciencia, Kim, paciencia. ¿Quieres que te preparen el baño para cuando termines con tu comida?
Trague con fuerza el pan tostado, para poder hablar.
-¿Paciencia..? Hace un jodido mes que estoy aquí perdona si no puedo sentirme cómodo en estas paredes que veo todos los días y todas las horas.... Lo siento por mis modales, discúlpame Lia, y no, me bañare mas tarde.
Lia suspiro, y se sentó en el sillón florido frente a la cama, peinando su cabello en un habito. No entendía su cara en estos momentos, se veía cansada y como si me estuviese ocultando algo.
-Te entiendo, de verdad, pero tu deberías hacerlo con nosotros, solo nos preocupamos de tu completa recuperación.
-Ya estoy recuperado, además que siempre me lastimo seguido, no es nada importante..
-Pero eres tu, Kim, por lo que tu estado si es relevante para los Yoon.
Antes de que pudiera responder que aquello me daba igual, la puerta se abrió, una silueta de hombros anchos con un traje blanco pegado al cuerpo, y con cabellos dorados como los míos, ingreso a la habitación, llenándola con un aura demasiado distinta, que me puso tenso.
![](https://img.wattpad.com/cover/328523420-288-k378413.jpg)
ESTÁS LEYENDO
𝐭𝐡𝐞 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐜𝐚𝐫𝐧𝐚𝐭𝐢𝐨𝐧 [Sunoo Harem]
FanfictionSeonwoo es un estudiante normal, pero cuando cree morir, reencarna en una novela romantica.