25: Molestia.

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Ya habían pasado dos días de que salí fuera de esta cárcel, en la que me encontraba en estos momentos, mientras la mas joven de los Yoon ingresaba como siempre. Demasiado tiempo que no los veía a ellos estaba comenzando a inquietarme, pero nunca seria tan suicida para quejarme en esta casa.

-Buenos días, ¿Descansaste bien?

-Hola.... Si, ¿Y tu Lia?

-Por supuesto. 

-Viniste temprano  hoy.-observe, ella siempre venia cuando estaba desayunando para su saludo diario.-Ni siquiera me cambie el pijama aun.

-Aja. ¿Ya me viste correctamente?

Después de su comentario, detalle su figura y su atuendo, entonces, recordé lo que habíamos hablado ayer.

-Que lindo vestido, es ese el que llevaras a la cacería?-dije, con mis ojos clavados en la tela de encaje.

Ella, luego de terminar uno de sus libros de historia, había comentado sobre que le llego lo que usaría el primer día en la caza, ya que era una de las señoritas que asistiría solamente de invitada, sin familiares que se presenten, aunque no sabia bien por que, solo estaría en las fiestas, y el vestido que tenia puesto, de tonos blancos y negros, era hermoso para eso.

-Así es, me alegra que te guste, Sunoo.

-¿Ya no mas, Kim, eh?

Ella rio un poco, con las mejillas sonrojándose un poco, era la primera vez que pasaba, y me divertía bastante.

-Tengo buenas noticias para ti.-su cambio de tema me descoloco un momento.

Entonces, una lucecita se encendió, y mi sonrisa creció.

-¿Me voy?

Ella carcajeo al verme, y asintió, moviendo los mechones de su peinado, desordenándolo.

-Acertaste, Kim.

Sin contenerlo, solté un suspiro de alivio, y me levante como resorte de la cama, dejando atrás la calidez de las sabanas para enderezarme, aunque el frio en mis pies descalzos me incomodo, no volví a sentarme, mi cuerpo estaba ya cansado de estar echado. Mientras Lia rodeaba la habitación, dirigiéndose a las ventanas de espaldas a mi, yo aproveche para estirarme e hice crujir algunas partes.

Era hora, aunque no me agradara, necesitaba verlos urgentemente, a todos, y en especial a Jay. Me había comportado como un idiota la ultima vez que nos vimos, e incluso lo que paso antes, el conmigo. Sus besos, en mis labios, mi cuello, mis clavículas, y ahí.... Definitivamente lo necesitaba.

-Llamare a Hansol, Chaeryeong  y a Yuna para que te asistan. Desayunaras con nosotros en el comedor, y después de eso, iremos al carruaje.

-Si, si, claro... Espera, ¿Cómo que, "iremos"?

-Te acompañare.

-No es necesario.

-Por supuesto que si, quiero hacerlo, y aun así, mi hermano me obligaría junto con Joshua.

-En serio, Lia, puedo ir solo.

-No.

Rodé los ojos, y por un momento, a mi mente llegaron seis rostros que eran igual de insistentes que ella. Ya en poco tiempo volvería a verlos, no podía negar que estaba muy ansioso debido a eso.

Ellos.... No me odiarían o algo así, ¿Verdad? Jay tal vez...

No quería, con suerte se haría el tonto, y me saludaría con una sonrisa, con esos labios...

𝐭𝐡𝐞 𝐫𝐞𝐢𝐧𝐜𝐚𝐫𝐧𝐚𝐭𝐢𝐨𝐧-Sunoo HaremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora