Me Quedaré Contigo

Capítulo 18: Quiero Un Esposo Así

Anteriormente...

— Los estoy escuchando — Dijo el bicolor sorprendiéndolos — Sólo... Denme un momento — Pidió y tras unos minutos se recompuso — ¿A qué cafetería vamos? — Preguntó y Bakugou rodó los ojos.

— El Torbellino te tiene mal — Se burló recibiendo un leve empujón por parte de Midoriya.

— A la que queda a unas cuadras, Todoroki-kun — Respondió el peliverde con calma.

________________________________________________________________________________

Narrador Omnisciente

Una semana pasó lentamente, pero con la compañía de sus 2 amigos fue más ameno para el bicolor, no estaba en ese gran departamento totalmente solo.

Ese día era la graduación de su esposa, a diferencia de la suya la de TN era en la tarde (Aunque eso fue influencia de su suegro), iba a ser una comida formal y un baile tradicional, algunos de sus compañeros iban a hacer una fiesta en la noche y ellos irían después de la aburrida cena que organizó el padre de ella.

Una estúpida cena llena de ancianos con dinero y chicos hijitos de papi mimados.

Ambos odiaban esos ambientes.

— ¿Por qué mierda sigues sin saber atar corbatas? — Preguntó el cenizo frustrado, le quitó la corbata de las manos y se la puso en su propio cuello para hacer el nudo, se la quitó nuevamente y se la pasó al bicolor, él se la colocó y ajustó el nudo.

— Gracias, Bakugou — Dijo cordial mientras se veía al espejo.

— Todoroki, siéntate — Ordenó Midoriya y cuando este obedeció comenzó a arreglar su cabello — Listo —Afirmó al terminar.

— ¿Cómo me veo? — Preguntó abotonando las mangas de su traje

— Te ves bien, Todoroki-kun — Dijo Midoriya.

— Bien, los llevaré a ustedes, paso por unas flores y voy al evento — Avisó tomando sus llaves — ¿Seguros que no quieren quedarse? De todos modos mañana es la cena — Dijo con calma.

— Necesitan tiempo de pareja y nosotros no queremos ver eso — Rodó los ojos Bakugou y Todoroki apartó la mirada sintiendo las mejillas algo calientes.

— Tienen un concepto extraño de nosotros — Afirmó el bicolor para abrir la puerta dándole paso a sus amigos.

Dejó a cada uno de ellos en su casa, luego pasó por una florístería teniendo una lista donde ponía claramente lo que quería

Pidió un ramo con pensamientos multicolor, peonías blancas y malvas, gerberas amarillas, girasoles, ásters, y hiedra adornando para dar ese toque de verde que necesitaban todos los ramos. La joven que atendía la floristería sólo escuchaba esas indicaciones para un ramo que expresaba tanto y que, aunque la combinación de flores no fuera común, se veía hermosa; tanto que le tomó una fotografía.

Pensamiento multicolor: piensa en mí como yo lo hago en ti.Peonía blanca: soy afortunado por tenerteHiedra: Fidelidad matrimonioGerbera amarilla: te desean que, al igual que el sol alcanza su cenit cada día, tu alcances el éxito en la vidaGirasol amarillo: eres mi sol. Solo tengo ojos para ti, y como el girasol, yo me giraré siempre hacia ti.Aster: Un corazón que confíaPeonía malva: mi amistad por ti es fuerte

— ¿Puedo colocar una nota? — Preguntó y la chica asintió dándole una tarjeta y un bolígrafo, claro que como toda curiosa miró lo que escrbió el joven "Cumple cada uno de tus sueños, yo estaré ahí para compartir tu felicidad".