PERDON SI LOS CAPITULOS SON CORTOS, TRATARE DE SUBIR SEGUIDO LOS CAPITULOS PARA NO OLVIDARME DE QUE VA LA HISOTRIA.
El silencio volvió a imperar en el recibidor, los ahí presentes sabían que debían darle el tiempo para que el ariano ordenara sus ideas. Mu bebió lo que quedaba de contenido del té que Aphrodite le había invitado, más que nada para infundirse el valor que había perdido, de solo recordar ese aciago día.
Tras soltar el aire que acumulo en su pecho momentos antes, dirigió su mirada a ningún punto en particular, empezó con lo que recordaba.
Como olvidar aquel día, aparentemente inicio como un día cualquiera, su rutina fue la misma hasta entrada la tarde en que regresó a su templo dispuesto a continuar con su trabajo de reparador, para lo cual accedió directo a su taller donde el crepitar de las llamas le dio la bienvenida. Hasta ahí todo iba con normalidad, más al trascurrir la primera hora un inusual cansancio empezó a hacer mella en él, ahogo un bostezo al tiempo que accedía al pasillo para ir hacia el baño, pero su borrosa visión le dificultaba seguir ya que apenas divisaba algo, antes de alcanzar cualquier puerta todo se volvió negro.
Despertó desorientado y aturdido, la cabeza le daba vueltas y todo su entorno parecía levitar como si su telequinesis estuviera fuera de control, tras analizar su entorno fue que reconoció su recamara, pero no recordaba el momento en que llego hasta ahí, a medida que transcurrían los minutos y se hacía más consciente de su estado, fue que descubrió su desnudez y sumado a esta el dolor en su zona intima. El miedo lo embargo cuando comprendió lo que había pasado. Era un hecho que no podía estar ni un segundo más en ese lecho en el cual había sido mancillado su honor, aun adolorido fue hasta el baño poniéndose bajo el agua con la firme intención de dejar correr junto con el agua su vergüenza y deshonra.
Para nadie fue novedad que no saliera de su casa, ya que su rutina era conocida por todos, si no estaba en el entrenamiento, estaba en su fragua y sino estaba en su fragua, estaba con su novio, por lo tanto, la ausencia del ariano no genero ningún tipo de suspicacia o sospecha de que algo le haya sucedido. Necesito de dos analgésicos para mitigar el dolor físico por que la pena que llevaba en el alma difícilmente lograría borrar.
Ahora venía lo complicado, enfrentar al mundo con el corazón destrozado, hubiera deseado desaparecer de ahí, pero al ser la primera barrera del santuario no podía, aparento serenidad cuando algunos compañeros cruzaron su casa, eso fue fácil, lo difícil fue mantener la misma fachada frente a su novio, quien no advirtió la mirada llorosa de su prometido al regresar de dos guardias continuas, con unas enormes ganas de alcanzar su templo y su cama. Aldebarán no saldría de su casa hasta el día siguiente ignorando la tragedia de su novio.
Tomo cuantas provisiones pudo para resguardar su integridad, el día representaba su seguro refugio, pero las noches, eran un verdadero tormento, el recuerdo de hacía días estaba latente, fue cuando una noticia conmociono a toda la orden: cáncer y piscis dieron por finalizado su compromiso, esa inesperada noticia le hizo bajar la guardia.
Había ingresado a su templo, luego de supervisar una ronda con un destacamento de plata. Un "estoy cansado" fue la nueva respuesta del santo a su novio quien empezó a sospechar algo raro, quien malhumorado dejo a su novio sin permitirle dar una explicación. Para cuando Mu se percató de que estaba completamente solo una agradable fragancia inundo su salón, sonrió pensando que se trataba de piscis, pero no tuvo ni tiempo de volverse hacia la presencia que perciba a su espalda, solo vio una flor dirigirse a su rostro y de ahí todo se puso negro otra vez....
Cuando despertó, estaba tan adolorido que ya no soporto las lágrimas y estas cayeron por su rostro, iba a pedir ayuda, pero antes de siquiera pensar en una palabra la puerta de su recamara se abrió revelando a un muy colérico Aldebarán, quien no dejo al carnero dar explicación, le acusó de ser lo peor, sumando cada vez más adjetivos hirientes a su persona. tauro se fue dejando a un Mu desolado y abatido.
Para cuando logro reunir fuerzas salió de su recamara dispuesto a rogarle a su amado que le perdonara, asumiendo una culpa que no tenía, fue cuando llego al salón y vio sus prendas regadas por el suelo, ahora comprendía que su novio pensara lo peor, todo parecía indicar que se había ido a la cama con otro y que las pruebas de su falta estaban ahí regadas.
Sin fuerzas para siquiera llorar más, cayó al suelo inconsciente, nadie lo socorrería, despertó horas después en el mismo lugar, incorporándose para asearse y asear su templo, sintiéndose vacío el que lo ataco no solo le quito su virtud sino también el alma.
Una segunda conmoción, Aldebarán anuncio que habían terminado, al toro se le notaba dolido y tal vez fue por eso que, asumió la culpa de la ruptura, porque a pesar de todo amaba al ariano, pero esa traición no podía perdonarla. Así que opto por cortar por lo sano, para no seguir haciéndose más daño, luego de eso el caballero prefirió marcharse y poner distancia de un vulnerable Mu.
El santo de piscis, había notado ya ese cambio en Mu, pero no fue el único hubo otro santo quien también había notado ese abrupto cambio, y empezó a sospechar que algo estaba pasando ya que dos parejas formales y con fecha de boda habían dado por finalizado su compromiso, al tiempo que Aphrodite abordaba a Mu, este otro santo los seguía y vigilaba de cerca.
Tras escuchar a su compañero y saber que no era el único, solo pudo pensar en algo denunciar el hecho con su maestro y diosa, antes de que el que los acechaba volviera y atacara a alguno de ellos otra vez.
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LA FUERZA DE TU AMOR.
Romancecamus ha sufrido un ataque, nadie lo sabe, ni el mismo conoce al que lo agredio.