CAP 10

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-que mierda..eres- cuestionó a el de cabellos rojos, al ver que sus golpes no hacían efecto alguno en el chico más bajo.

-yo? Soy un vampiro- dándole una sonrisa de oreja a oreja.

- no digas estupideces imbecil, los vampiros no existen-

-quieres apostar? Y sin pensarlo clavo sus colmillos en la muñeca del chico, succionando el líquido rojo mientras salía un destello en sus ojos y sus uñas crecían agarrando más fuerte la piel blanca de el joven humano.

El de cabello oscuro comenzó a palidecer al no tener control alguno de si mismo, viendo cómo ese extraño tomaba a gusto de su sangre.

Sunoo detuvo lo que estaba causando al ver como el humano caía rendido sin ningún tipo de resistencia, y sacando sus colmillos dejo una marca en el, dejándole en claro que volvería para tomar de toda su sangre para la próxima.

-niño esta vez te dejo, pero cuando regrese quisiera que fueras más amable- lamiendo la herida.

Dejando al chico inconsciente, se dio cuenta de que se había excedido bastante.

-y eso que solo fue la muñeca..

Tomando en brazos al joven de cabellos oscuros y dejándolo a la puerta de un hospital, se marchó.

-oye Riki, NI-KI RESPONDE!

El de ojos oscuros como su cabello, se levantó de la camilla del hospital mirando a quien lo estaba llamando.

-heeseung... Que hago aquí? Tomando partes de sus mechones.

-eso mismo me preguntó estupido, como es que te encontraron en la entrada del hospital?

-co-como yo estaba.. la verdad no me acuerdo, un tipo..-

-todavía sigues inconsciente o que?

Mira vamos a calmar nos y tú después me vas a contar que como carajos acabaste tirado aquí, si? Recostó a Ni-ki.

-tu.. como sabes que acabe aquí? Mirando a su mayor.

-iba por unos parches y otras cosas, nada del otro mundo, pero cuando estaba por irme vi como te ingresaban y me preocupe.

El chico de cabellos oscuros se avergonzó de que su mayor lo hubiera visto de esta forma, escondiéndose en las mantas tapando su rostro ruborizado.

-ni-ki? Estas avergonzado? Comenzó a reírse tapando su boca.

Ni-ki miro como su mayor se reía de el, y con una patada comenzó a reclamarle.

-AY, NO TE RIAAS NO ES GRACIOSO!! haciendo un puchero como un niño pequeño.

-para mi si lo es- tratando de esquivar los golpes de Ni-ki.

-siempre te burlas de mi.. hyuun ya basta, ya no soy un niñoo-

-pues sigues pataleando como uno así que, eres todavía un niño pequeño.

Reafirmo al de ojos oscuros.

-y bien, ya recordaste como es que terminaste aquí? Repitió la pregunta.

-la verdad, solo puedo recordar que alguien me cargó hasta aquí.

-SOLO eso? Golpeo con su puño no tan fuerte la cabeza del peli oscuro.

-auch, Hyun te juro que no puedo recordar, estaba de un momento contando lo que me había robado y de pronto estoy acostado acá.

-espera un momento.. volviste a robar MALDITO MOCOSO? Abriendo sus ojos con ganas de matar a Ni-ki.

- tal vez.. solo un poquito- haciendo una seña de menos con sus dedos.
-estoy que te entierro vivo sabes- amenazando de broma al menor.

-que chistoso eres hyun- riéndose nervioso en lo que sabía que le haría al llegar a su casa.
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Al día siguiente Ni-ki volvió a salir a buscar pertenencias de extraños, sabía que la anterior vez el mayor lo había regañado por robar pero necesitaba conseguir ese dinero.

Si bien no vivía en las calles en cualquier momento acabaría en el, su amigo heeseung muchas veces le permitió hospedarse en su casa pero no quería ser una molestia y acabo por mudarse en los suburbios, barrios de mala clase afueras de las ciudades sobreviviendo de husmear en las cosas de extraños y vender los productos en el mercado ambulante, como todo un genio, finalmente terminaría de conseguir pagar la casa que con prestaciones pago cada año.

Llevaba ya ocho años pagando la casa, una cabaña cerca del bosque con la cual viviría de vender verduras y pollos alimentados por el, con heeseung, ese era su sueño.

El metía su mano en los bolsillos de un señor, lentamente estaba cerca de los billetes que guardaba este - ya casii.. tu puedes.. solo un pocoo.. y estirando el brazo sintió una mano agarrando la suya.

Ahora sí estaba frito pensaba Ni-ki cuando sintió que la mano lo jalaba, cayendo al suelo.

-valla niño no pensé que volvería de verdad a verte, que coincidencia no?
Levantando su cabeza, un chico de pelos rojos con una linda sonrisa felina estaba mirando hacia abajo donde se encontraba el.

No estaba seguro pero sabía perfectamente, que estaba acabado.

En un rincón el de cabellos oscuros estaba de rodillas suplicando al vampiro.

-porfavor.. te daré lo que sea pero déjame vivir, todavía no termino de pagar mi casa y ni siquiera le eh confesado mis sentimientos a el chico que me gusta y también..- aferrándose a los pantalones de Sunoo mientras imploraba piedad.

-no te matare, deja de lloriquear como un bebé- en lo que se agachaba para quedar a la altura del más joven.

El vampiro curioso por como se comportaba el de ojos oscuros quiso hacerle una pregunta.

-cuentame más del el-

-de quien?

-del chico que te gusta-

-el no solo me gusta, yo lo amo-

-como digas cuéntame de el-

En lo que agarraba a Ni-ki y lo subía para estar a su altura.

-que vergüenza, no quiero- se cruza de brazos.

Sin quedarle de otra Sunoo tomó el brazo de Ni-ki y comenzó a correr a una gran velocidad, llegando a un lago no muy conocido para los humanos.

-que acabas de hacer? Sin darse cuenta de cómo Sunoo lo llevo.
-te gusta? Aquí voy cuando me aburro de ser un inmortal-
-por que estamos aquí?ladeó la cabeza.

-para que me hables de el chico que amas, en un lugar más privado- agarrando una piedra y lanzando la.

-que buen tiro, yo también quiero intentar! Se animó para agarrar un piedrita y la lanzó igual como lo hizo el pelirrojo, fallando en el intento.

-wow eres un experto- un pulgar arriba como forma de burla por el horrible lanzamiento del chico.

-el chico que me gusta se llama heeseung, es mayor que yo por unos años pero nos criamos como amigos- lanzando otra piedra esta vez mejor que la anterior vez.

-ya piensas hablarme, de el eh? Lanzando también una piedra.

-si vas a volver a molestarme no pienso seguir hablando- en lo que lanzaba una piedra más grande.

-disculpa sígueme contando- buscando una piedra para tirar al lago.

Una tarde completa pasaron los dos en que hablaban del amor y lanzaban piedritas al lago compitiendo por quién era el mejor lanzando.

Esa misma tarde Sunoo se dio cuenta que había establecido una amistad con su comida al sentir un poco de empatía por el chico de muy mala suerte.

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⏰ Última actualización: 8 hours ago ⏰

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STRANGE BLOOD 독 jaywon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora