STRANGE BLOOD 독 jaywon

CAP 1. algo más...

Vampiros seres humanos con capacidades especiales adictos a la sangre
O más bien monstruos chupa sangre,
Jay era un vampiro un joven y atractivo vampiro de sangre pulcra.

Quien no podía arrancar de sus propios problemas ni siquiera de los cuales se les otorgó en el momento que nació, el estaba injustamente, como lo decía el, comprometido.
Con un vampiro hombre, es que le gusten las mujeres, tampoco que odie a los hombres o la idea de compartir su vida con uno, solo nunca sintió lo que es normal cuando dos seres se aman y creía que casarse a la fuerza era una total equivocación.

Tampoco es que tuviera una vida más divertida aparte, podía vivir años y no perdería su tiempo si esque un estupido humano lo matase, el estaba en busca de algo que lo llenase y saciarse por completo y acabar con su aburrida rutina.

Una tarde donde el sol dejo de joder y los rayos ya no llegaban a cubrir el espeso bosque no muy a las afueras de los pueblos, Jay decidió buscar el ingrediente faltante de su nuevo plato de cocina, los vampiros obviamente no comen y no les gusta pero era uno de sus tantos hobbies innecesarios que también servían para no aburrirse en sus días de siglos de vida y ya llevaba un mes entero buscando y no lo encontraba.

-genial otro hongo alucinógeno por poco y me lo como.
De pronto Jay sintió un olor muy gustoso la dulce y cálida esencia muy rara para el, considerando que es un ser frío.
- uh y ese olor??
No muy a lo lejos divisó una olla a vapor calentando algo a través de la ventana de una pequeña cabaña rural de las afueras, alrededor de un campo con huertos de frutas desconocidas.

Y un pequeño chico cocinando asustado de no quemarse con la olla caliente.

Jay lleno de intriga pensó en acercarse, de todos modos no creía que lo llegarán a ver en plena noche y ya no quedaba de otra, no pensaba otro mes quedar cuidando de su hermano en cama por comer un hongo de mal gusto que el encontró.

De una se asomó y vio a un chico lindo aguantando el miedo por abrir la tapa de la olla y no quemarse.
-lindo
Después vio como cortaba unas frutas rojas y jugosas en una tabla de madera y las echaba a la olla caliente.

En ningún momento se dio cuenta como ya había pasado el rato mirando a cierto lindo chico con miedo por quemarse.
Por lo que llevaba observando al miedoso, cortando la fruta, el no muy bien cocinero pasa a llevar el cuchillo y se corta una pequeña tajada en el dedo que muy rápido comienza a sangrar.
El vampiro queda en un estado de shock al sentir el olor a sangre del chico.

Era.. como explicarlo mejor que bien más bien exquisito, dulce..

El pequeño altiro llevo su dedo a mojar en agua corriendo mientras buscaba en uno de los cajones cercanos y sacaba un botiquín muy preparado de primeros auxilios.

En tanto el joven vampiro estaba intentando contener su instinto hambriento que no le permitía reaccionar y actuar como normalmente es.

Nunca antes sintió este sentimiento, esta atracción, no sabía si era el olor del chico o su sangre sabía que podía ser la sangre pero si fuera ella, porque no entro y lo mato para saciar su hambre? Que no era el un monstruo?

Por miedo huyo a no querer dañar al extrano chico lindo.

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Pensó que no lo volvería a ver pero no soporto por más de dos días y volvió una noche a ver al chico lindo.

La verdad no le parecía buena idea volver a intentar ver a el chico lindo pero su mente no dejaba de divagar en el y en lo lindo que se veía intentando cocinar y por supuesto en el ingrediente especial que buscaba como excusa para no parecer un acosador o loco.

Ya era hora el bosque se cubrió completamente de oscuridad y eso significaba un lindo paseo a la luz de la luna en la no peligrosa noche sombría, para seguir en su ardua investigación de nuevos ingredientes.

Aunque siendo sincero todo los ingredientes que obtenía eran traídos por su hermano o prometido ya que el no queria ir al pueblo al odiar las multitudes y en especial a los humanos, entonces no conocía muchos ingredientes, en especial las frutas, pero como ya lo mencionado el buscaba un ingrediente dulce para su postre cremoso y todavía no le terminaba de convencer el sabor, entonces, en fin su mayor excusa jamás creada, para ir a la cabaña del chico miedoso.

Ahí estaba en uno de los momentos más decisivos de su vida, de como acercarse al curioso chico lindo y no parecer un loco.

- vamos no es la gran cosa, es como mitad comida y mitad humano y tampoco te puede matar verdad?( Nervioso)

Y al asomarse vio al pequeño comiendo su comida de tarde sentado, bien tierno asiendo caras de disgusto.
- parece que se le quemo lo que preparó, que tonto, sonríe

Después de un rato más bien horas en minutos para Jay mirando al muy tierno chico caras divertidas, el mencionado se fue a la cama.

Jay sintió una pena al ver como el pequeño se iba a dormir cosa que nunca sintió, otra cosa rara que le hacía sentir el pequeño.

Pasaron los días ya meses y Jay nunca paro de ir a ver al pequeño a escondidas como un pequeño gato negro curioso buscando comida, según él era por el ingrediente pero en el fondo sabía que era algo más.

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Espero que les guste es mi primera historia (⁠^⁠^⁠)💗