Viviendo con mi alma gemela

Camino a la madurez

Acababa de amanecer como cada mañana Brian y Jason salieron a correr, les gustaba la tranquilidad y el fresco de la ciudad recién despertada. Tenían su recorrido favorito que comenzaba en la línea del mar paralelo al paseo marítimo y acababa subiendo las escarpadas cuestas que llevan a pico gaviota, una montaña alta y solitaria que se erguía cual vigilante del mar, era un recorrido duro, profesional no apto para corredores de medio pelo, pero Brian y Jason lo llevaban haciendo desde casi su infancia y para ellos aunque exigente no los llevaba al límite. La naturaleza había sido generosa con ambos, estaban en forma y se cuidaban así que muchas mañanas Hardin bromeaba diciendo que cualquier día tenía que probar hacerlo a la pata coja, Jason entonces apretaba el paso al tiempo que lo desafiaba haber quien de los dos llegaba primero arriba y aunque Jason era más fuerte y más resistente Hardin era mucho más rápido así que a Jason no le quedaba otra que escuchar mañana si y mañana también las burlas de Hardin.

Cuando regresaban ,al pasar por el puerto algo llamó la atención de Brian en el tablón donde los patrones de los barcos colgaban los anuncios en busca de marineros, había uno que resaltaba sobre el resto y es que para empezar se notaba que era nuevo, además estaba escrito en español, inglés y alemán . Brian lo leyó mientras que Jason lo alcanzaba al fin , en él se buscaban buzos expertos para reparaciones en alta mar en una plataforma petrolífera, se ofrecía un sueldo elevado y el contrato mínimo era de un año, para terminar con un número de contacto y una dirección en el centro de la ciudad.

Brian agarró a Jason por el hombro y le dijo esta es nuestra oportunidad, con ese salario en un año tanto tú como yo tendríamos dinero suficiente. Lara y yo podríamos comprarnos por fin una casa, y que me dices de ti y de Tessa ya no tendría que ir haciendo fotos a turistas por unos míseros euros podrías ponerle su propio estudió en la ciudad y aún os sobraría dinero para coger un piso,

-Qué me dices Jason, Lo hacemos?

Jason medito unos segundos todo lo que le decía Brian era cierto, Tessa no se quejaba nunca pero sabía que odiaba eso de hacer fotos a turistas estúpidos en los que el único reto era tratar de conseguir disimular sus michelines y al él en lo profesional tampoco le iba demasiado bien los contratos escaseaban y sus ahorros menguaban día tras día. Pero por otro lado estaba el tema de la oferta era un trabajo en alta mar y a espera de conocer más datos Jason sabía que eso significaba peligro muchos buceadores habían perdido la vida trabajando en alta mar, además estaba el tema de la duración del contrato, un año eso solo podía significar que habría de pasar todo ese tiempo fuera alejado de Tessa.

-Brian le repitió, hagámoslo tío necesitamos este trabajo es nuestra oportunidad.

Jason lo miro pensando durante un segundo más, y luego dijo,

Que diablos necesitamos ese dinero, hagámoslo

Brian cogió el móvil , llamó sin perder un segundo al teléfono que venía en el cartel, acordaron una entrevista para esa misma mañana dos horas más tarde. Ambos se dirigieron a sus casas a ducharse y a adentrarse ,quedaron en una hora Brian lo recogería con su coche e irían hacia la oficina donde les habían citado.

Se despidieron y cada uno tomó dirección a su casa en el trayecto que le separaba de donde estaba hasta su puerta Jason sopesó cómo darle la noticia a Tessa y cuando dársela decidió esperar a haber hecho la entrevista y si los contratan ya lo hablaría con ella aunque sabía más que de sobra que a ella no le iba a gustar nada. Brian tenía razón, era el momento de prosperar aunque a Tessa y a él mismo no les entusiasmara la idea era la única forma de poner en marcha sus sueños de casarse y formar una familia.

Cinco minutos antes de la hora en que estaban citados Brian y Jason ya estaban allí, llegaron a la oficina ,una secretaria les hizo pasar aún despacho, donde un hombre de mediana edad les dio la bienvenida con una sonrisa no forzada sino sincera y acogedora les pidió que se sentarán . Acto seguido les preguntó por su experiencia como buceadores, Brian iba a tomar la palabra pero fue Jason quien poniéndole una mano en el brazo a su amigo comenzó a hablar le contó a su entrevistador que llevaban buceando desde niños, que durante un tiempo se habían dedicado a dar clases de submarinismo y que habían trabajado en ocasiones para el astillero reparando los cascos de los buques que atracaban en el puerto, le contó que ambos dominaban la lanza térmica subacuática y eran expertos en mecánica naval.

El hombre una vez terminada la entrevista les comenta que falta la prueba técnica para ver si son aptos para el trabajo, salen fuera y se encaminan hacia el puerto que está al lado de la oficina, suben a bordo y ponen rumbo a alta mar

Llegando al alta mar el entrevistador les dice que se pongan la bombona de oxígeno y comienzan a bucear como él les indica.

Pasan la prueba de acceso les comunica que hay que regresar a la oficina para firmar el contrato

Realizan el trámite y se dan un apretón de manos, se van de vuelta a casa

Cada uno se va a su hogar para hablar con Lara y Tessa

El primero en llegar es Brian le comunica a Lara lo del trabajo la cuál lo entiende.

Jason llega a casa entra por la puerta ve a Tessa y la saluda con un beso en los labios le dice que tiene que charlar con ella.

Se sientan en el sofá uno al lado del otro.

- He conseguido un trabajo en el mar del Norte cariño

- Ah sí? Sobre qué es

- Es sobre ser buzo amor

Tessa empieza a entender y le pregunta _ es peligroso amor

_ si Tessa no te voy a engañar, pero es una oportunidad de prosperar

- Pero Jason ten muchísimo por favor si te pasa algo yo me muero

- si Tessa tendré mucho cuidado e iré con Brian

- Brian también va

- si tessa vamos a ir los dos el trabajo durará un año

- pero jason eso es mucho tiempo no estoy de acuerdo

- pero amor es la oportunidad de nuestras vidas para cumplir nuestra sueños la abrazó para calmarla y le da un beso antes de salir por la puerta y marcharse

Ella se queda en el sofá llorando desconsoladamente, él cierra la puerta sin volver la vista atrás y se encamina hacía su destino con el corazón partido al dejar así al amor de su vida.