A la mañana siguiente estábamos en clases y Christina estaba conversando con Sara.
-¿Podemos hablar?-le pregunte a Christina acercándome a donde estaba.
-¿Qué quieres?-me pregunto con odiosidad cruzándose de brazos.
-Vamos-le dije haciéndole caminando hacia la puerta y ella me siguió.
-No tengo tiempo para esto Nieves, en pocas horas todos lo sabrán-me dijo con su típica mirada desafiante.
-¿Por qué quieres hacer esto?-le pregunte.
-Porque ese espejo ha traído muchos problemas-me dijo.
-¿Quién te dijo eso? Ese espejo está en el sótano de mi casa y nunca nadie había viajado a través de él antes-le dije.
-Sí lo han hecho, según Sam muchos han viajado a través de él y han ocasionado muchos problemas en la línea del tiempo, por eso ellos protegen a los viajeros-me dijo.
-¿Sam? Es el chico rubio ¿Cierto?-le pregunte y ella asintió con la cabeza.
-Yo no lo sabía, Scott y yo estamos aquí por equivocación-le dije.
-Entonces ¿Por qué quieres quedarte? ¿No quieres volver con tu familia?-me pregunto.
-Claro que quiero volver, pero también quiero volver aquí-le dije-Escúchame Christina, ese espejo es la única manera de viajar así que por favor no lo destruyas y tampoco se lo cuentes a nadie y sea lo que sea lo que te hayan dicho Jacob y Sam, creo que están mintiendo-le dije seriamente y me fui.
Al entrar al salón Scott llegó junto a mí.
-Y ¿Hoy vamos a salir?-me pregunto entusiasmado.
-Eh... no lo sé Scott, es muy riesgoso-le dije.
-¿Por qué? Oye vi que Christina volvió ¿De que hablaban?-me pregunto y me detuve en seco.
-Christina me amenazó con contárselo a todos Scott, así que debes volver a 1910 lo más pronto posible-le dije con seriedad.
-¿Qué?-me pregunto sorprendido. Lo vi fijamente y luego me aleje caminando.
Las clases habían terminado, Mell y yo nos dirigíamos a nuestra habitación. Al entrar vimos a una chica pelirroja sentada en la cama. Era mi hermana Claudia.
-Hola Nieves-me dijo con seriedad. Estaba sorprendida, tenia los ojos bien abiertos, no sabia en qué pensar.
-¿Claudia? ¿Qué haces aquí?-le pregunte sorprendida.
-Creo que me debes esa misma respuesta-me dijo.
Estaba sentada en frente de Claudia y Mell estaba junto a mí.
-¿Co... como viajaste?-le pregunte.
-Eso mismo te pregunto yo a ti-me dijo con seriedad, se notaba algo molesta.
-Bueno llegué aquí hace tres días y...-le dije pero no me dejo terminar.
-¡Tres días!-me grito-Pero te vi ayer por la noche-me dijo.
-¿Cómo sabias que estaba aquí?-le pregunte.
-Bueno te vi salir corriendo por las calles y al llegar a casa y vi a una chica castaña atravesar el espejo-me dijo.
-Entonces, ¿Lo sabias? ¿Sabias lo del espejo?-le pregunte.
-Creo que ya tienes edad para saberlo, mamá dice que eres muy joven pero te lo voy a contar-me dijo con seriedad-Nieves, somos viajeros en el tiempo-me dijo.
-¿Por qué nunca nadie me dijo nada?-le pregunte.
-Tienes 16 años Nieves, eres muy joven para saberlo-me dijo.
ESTÁS LEYENDO
Nieves y el espejo encantado
FantasyHola soy Nieves y esta es la historia de como mi vida cambio por completo. Viaje del año 1910 hasta el siglo 21 a través de un espejo encantado.