Freak [GIDLE]

XII. Alma perdida.

En el video no había ningún rastro de Soojin. Se veía claramente que le hablaba a la nada y ni siquiera se escuchaba sus respuestas. Seo Soojin estaba muerta y como era común, no se había dado cuenta. Estaría enojada por eso si no fuera porque su muerte significaba demasiadas cosas buenas y más si peleó con el asesino ¿Y si ella sabía todo? Tenía la respuesta en sus narices y lo único que tenía que hacer era tocar su cabeza para poder verlas. Sin embargo, primero tenía que hacer que la misma Soojin lo recordara ¿Y como iba a hacer eso si ni siquiera recuerda que murió? Era un caso mucho más frecuente de lo que a Yuqi le agradaba. Como la gente que suele ver en los hospitales o caminando en la calle. Suele provocarse por muertes repentinas, como atropellos; por el trauma del momento; o solo para negar que están muertos.

Detuvo el video de su computadora y miró su pizarra con todas las pistas. Taehyun estaba un poco más alejado, pero más cerca del nombre de Soyeon. La foto de Yeonjun estaba arriba, junto con una línea y un corazón que apuntaba a un signo de interrogación. Dando entender su relación tóxica amorosa con el desconocido. También tenía una flecha con Soobin, ya que en Halloween se les había visto hablando. Se levantó de la mesa e hizo una flecha desde el "?", hasta Beomgyu y otro hacia Taehyun. Luego de la conversación con Soojin, Miyeon confesó que le había pisado con todas sus fuerzas a al asesino. Los dos chicos eran los únicos que vio que le costaba caminar.

Se puso las manos en el bolsillo trasero de su pantalón y comenzó a tararear una canción de Frank Sinatra mientras se balanceaba sobre sus pies. Recordó el mensaje que le envió un seguidor para invitarla al parque, el mismo que recibió Shuhua. Ese hijo de puta elegía sus víctimas antes de que entraran a Neverland ¿Es que ella estaba entre su patrón de sus víctimas? No lo podía entender, no tenía nada común con las chicas, según ella.

Al dejar de tararear dio vuelta la pizarra y rayó con el plumón el nombre de las seis: Soyeon, Shuhua, Minnie, Miyeon, Soojin y con mucha lentitud, el suyo. A lado de Shuhua escribió todo lo que creía que era relevante para ella: Que es famosa, bonita, tímida, le gusta el terror. Luego siguió con Minnie: solitaria, feliz, rara, bastante amable, debió de hablar con el asesino antes, tratándolo lo suficiente bien como para llamarle la atención. Miyeon: tenía muchas deudas, fue con amigas, optimista, amiga de Minnie. Soyeon: otaku, pequeña. Borró eso al pensar que no era relevante.

No sabía nada de Soyeon ni de Soojin.

En su nombre anotó todo lo que ya había anotado en las otras chicas: Famosa, bonita, le gusta el terror, solitaria, feliz, rara, optimista.

Entrecerró los ojos y volvió a tararear la canción de Frank Sinatra. Tenía más cosas en común en cada una que las chicas en sí. Se mordió el labio para contener su emoción y bajo su nombre escribió con una sonrisa "Próxima víctima". El asesino no era inteligente, pero sí bueno para ser sutil. Beomgyu y Soobin lo eran, según ella. Enviar un comentario, entre miles de sus fanáticos no iba a llamar atención a nadie, ella recibía hasta correos electrónicos con recomendaciones de lugar. El asesino debió de sorprenderse al verla entrar para trabajar. A pesar de que en sus videos no solía mostrar su cara para que no tuviera problemas con un par de cosas ilegales que hacía en sus videos, sabía que era fácil de identificar, especialmente por la voz.

Hizo una cara de desagrado al notar que estaba justo donde el asesino la quería ¿Él sabía lo de la película o solo estaba esperando que saliera un video con alguna psicofonía en el lugar? Dejó de tararear al darse cuenta de un enorme detalle. Él se cuidaba de que no lo vieran sin la máscara, porque sabía que había fantasmas viéndolo. Las chicas no sabían quién los mató por su culpa.

—De todas formas ganaré—suspiró mientras se daba vuelta, dejando su investigación de un lado para irse a dormir.

(...)