Enferma.

Una vez más.

Otra vez, como siempre.
Me refugio en la música.
En los poemas.
Pero el papel se moja, se desgasta.
La tinta se corre.
Mis lágrimas borran mi esfuerzo de superar el dolor. Eso que me costó tanto lograr. Se rompe.

¿Por qué?
Por qué fue que salió tan mal.
Por qué fue que no hubo otra oportunidad.
Por qué no puedo darte un abrazo ahora, y llorar en tu hombro. Acariciarte el pelo hasta qué me digas basta. Por qué.

Me duele la cabeza.
Lloro y no me puedo contener.
Porque duele tanto.
Porque me apuñala el corazón miles de veces, tu recuerdo.
Porque anhelo cosas que se sienten lejanas.
Porque anhelo fantasmas, ilusiones.
Nada de eso fue real.
Estoy confundida, aturdida, perdida.

Y no te encuentro.
No sé dónde buscarte.
No sé porqué es que quiero buscarte.
No sé cómo encontrarte.
Porque ni siquiera te perdiste.
Perderme te llevo a donde tenías que estar, lejos mío. Sin mí.
Duele, mierda, como duele.
No te perdiste.
No estas perdido sin mí.
Eso. Me duele.

Imagine muchas cosas.
Miles de formas de cambiar todo.
Si volviera el tiempo atrás.
Todo sería mejor, si retrocediera, si cambiara.
Y no puedo.
Me desgarraría intentando viajar en el tiempo, te lo aseguro. Que si pudiera por lo menos intentarlo. Lo haría.

Y por largas horas esta desesperación no se va. Las lágrimas no paran. Ya no sé qué más hacer. Ya no sé.
A lo mejor ¿debería rezar? ¿tendría que ponerme de rodillas y orar para olvidarte?
¿orar que ocurra un milagro y despertar justo el día antes de que todo se fuera al carajo? ¿o justo antes de conocerte?
Qué. Ya no sé que.

Todo esto me está hundiendo.
Yo me hundo en un dolor insoportable.
Y lo peor, es que no quiero nadar.
No quiero olvidar.
No quiero frenar la música, ni dejar de llorar, no quiero dejar de escribirte, todas las noches.
No quiero. Porque te quiero, todavía lo hago, incluso más de lo que podrías imaginarte.

Siento un nudo en la garganta. De hilos entretejidos: de poemas, de canciones, de cosas no concretadas, de besos, de abrazos, de palabras, de risas, y de todo lo que quiero decirte, de todo lo que te quiero y te espero. Ese nudo, me está ahorcando, me está ahogando, me está matando.

Amor. Nunca te dije amor, pero quería decirtelo. Porque vos si me pusiste un apodo, más o menos. Y yo quería devolverte el gesto. Pero pensé, que iba a ser muy pesada diciendo eso sin casi conocernos.
Amor.
Amor.
Amor.

Te amo.
Estuve tan cerca de decírtelo.
Y ahora esa cercanía se ensanchó. Se hizo un abismo enorme, que parte la tierra.
Pero yo quiero alcanzarte.
¿Y si me tiro? ¿Me atraparías?
¿O me moriría intentándolo?
Porque a este punto, cualquiera de esas opciones se ve tentadora.
Te amo, pero ya no sé que más hacer.
Y todo este amor, me está matando

Y volví. :)
Guren.