Capitulo 14 Especial Ría.

1K 152 19
                                    

Narrador...

Después de su conversación con Tom el omega se había encerrado en su cuarto y Ría le estaba haciendo compañía mientras le enseñaba sobre astronomía.

— "Como sabes tanto".— Le preguntó Bill por señas.

— Nunca he podido quedarme quieta, siempre quiero aprender más.— Respondió la  omega y se  encogió de hombros.

— "Hay algo que he querido preguntarte".— Dudo Bill.— "Pero sé que es imprudente"

— ¿Es sobre mi hijo?.— Pregunto Ría después de meditarlo por  un rato.

Bill afirmó con la cabeza y ella no tubo más opción, soltó el aire lentamente.

— A veces comentemos errores que nos salen muy caros Bill, yo tuve a Andreas cuando tenía 25 años.— Negó con la cabeza.— No era más que una cachorra, pero al mundo poco le importa la edad que tengas cuando quiere joderte.— Extendió sus dedos hacia la ventana, como queriendo tocar las nubes. — Creí que con su llegada todo mejoraría, el alfa que me embarazo quería tener un hijo desde hace mucho, pero nada cambió, él seguía siendo un bastardo y yo seguía siendo una mocosa, solo que esta vez, yo tenía algo por que luchar. Andreas me dio fuerza.— Los ojos de la Omega se llenaron de lagrimas.— Para ese punto Tom ya había llegado a nuestras vidas, me ayudó a luchar, nos formamos un camino, seguíamos en la oscuridad pero al menos ahora la dominábamos, él desde la mafia y yo con mis chicas. —Se acercó a Bill como si le quisiera decir un secreto.— No te imaginas lo que un hombre es capaz de revelar o de hacer por una persona que le da orgasmos, a veces no somos más que animales Bill. Mi mundo estaba manchado, pero creí que podría mantener a mi hijo puro, ese fue mi error, sabía que Andreas era malo desde mucho antes de su traición, las cosas que hacía, incluso en medio de la mafia eran dignas de sentir repulsión. Creí que cambiaría, que era solo una fase, pero solo empeoro, hasta que se me salió de las manos, hasta que tuve que elegir entre él y todo lo que sabía que estaba bien.

Bill se acurruco cerca de ella, queriendo darle un poco de consuelo.

— Jamás voy a superar su pérdida Bill, pero quiero creer que la madre luna lo ayudará a reencarnar, en otro lugar, con una madre mejor, rodeada de un mundo que no lo consuma, que no lo haga un monstruo.

Las lágrimas se deslizaban por las mejillas de la omega como si fueran perlas. La imagen hizo que Bill pensara en la vieja historia que había leído sobre una triste sirena, una criatura que lo perdió todo por amor cuyo final fue ser burbujas en el aire, explotando antes de alcanzar el cielo. Se pregunta si Ría se quedará, si seguirá aquí siendo su amiga o si se ira lejos, siendo llevada por el viento y dejando que sus rizos rojos se difuminen hasta no ser más que aire.

— "Gracias por compartir tu historia conmigo, no creo que ese tipo de heridas estén para olvidarse, quizá se crean porque el destino las quiere allí para hacernos más fuertes, más valientes".— Bill limpio las  lágrimas de la Omega  suavemente.— "Yo creo que todo tiene una razón de ser, y que nuestro camino por tortuoso que sea lleva a algún lado, quizá no el que imaginamos, pero definitivamente uno con un final feliz"

— ¿Incluso para gente como yo?.— Pregunto Ría con un poco de esperanzas.

— "Principalmente para gente como tu, para personas, valientes, fuertes, leales y amorosas, eres increíble Ria, solo tienes que creerlo"

Bill limpió su garganta suavemente y le dio una mirada determinada a su amiga. Tomó su rostro y la hizo mirarlo fijamente. Abrió los labios y sacó su voz, suave, casi como un susurro,no era una voz gruesa era como una calida caricia, una nota delicada y suave, pero segura, como un bálsamo para el corazón de la omega.

— Gracias por estar viva y gracias por estar aquí conmigo.— Susurro Bill con una sonrisa.

Los sollozos llenaron la habitación mientras Ría se arrojaba a sus brazos, sus corazones se sentían cálidos al saber que estaban para apoyarse.

A veces quien crees tu familia es quien más daño te hace, a veces la vida es tan cruel que te hace sentirte completamente solo, pero en esas ocasiones, en esos horribles momentos de oscuridad es cuando aparece gente, personas con las mismas heridas que tu, personas que te entienden y que se convierten en eso que tanto has querido, una compañía.


La Luna De Un Alfa...(Toll,Twc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora