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Continuación...

Deje el plato otra vez frente a Takumi volviendo a tomar mi asiento el volvió a estar derecho y comenzó a comer, yo solo puse mi codo sobre la mesa y apoye mi barbilla sobre la palma de mi mano mirándolo cómo come.

— Tú ya cenaste? — Sube la mirada y asíento con la cabeza — Mmm... Me alegro... — Suspiro para volver a comer

— Y que pasará ahora? — Pregunto ahora cruzando los brazos sobre la mesa y el me mira extrañado

— De que?

— Trapnest necesita a un guitarrista, recién me lo has dicho Takumi

El bufa y ríe ligeramente negando lentamente con la cabeza — Amor, eso no te debe de preocupar, yo solo lo resolveré — Da un bocado a la cuchara que anteriormente tenía del guiso

— Bueno... Ya se que no debería preocuparme pero me resulta... Amm... Cómo lo digo?... — Bajo la mirada al suelo intentando buscar alguna palabra que describa el sentimiento

— Aja?... — Siento como su mirada me fulmina por unos segundos

— Un poco molesto escuchar tus quejas cada que llegas... Y eso sucede desde que comenzaste a crear Trapnest... — Volteo a verlo y el solo tiene el ceño fruncido — Tal vez deberías hablar con Yasu, ya sabes, quizás el conozca a algún guitarrista disponible

Creo que decir eso fue una de las peores cosas que se me habían ocurrido... Tal cómo lo dije el llamo a Yasu días después y a la semana Ren Honjō ya formaba parte de Trapnest, los Blast se desintegraron y se armó todo un revuelo, tanto en las revistas... Cómo en lo que hago llamar hogar...

Ahora Takumi ni siquiera llegaba a casa, y si estaba solo era para tener intimidad, ahora nada faltaba en casa, más que el... Llena de lujos, pero, acaso un collar de perlas me dará un abrazo?
Todas las mañanas sin falta había un ramo de flores blancas frente la puerta y una carta de disculpas, ya ni para que preocuparme en hacer comida, todo terminaba guardado hasta pudrirse dentro del refrigerador en espera de ser degustado por Takumi. Tantas clases de cocina echadas al caño.

En otras noticias!
Trapnest se está volviendo el hit del momento, pues la llegada de Honjō a causado más impacto del que ya había dentro de la agrupación...

Apague el monitor, pues no había caso seguir escuchando lo mismo de siempre, maldito Ren...

Cerré mi maleta para salir del departamento dejando las llaves en recepción tomando un taxi, ya había ahorrado lo suficiente para salir de casa. Me sentía tan sola ahí dentro, solo abrazando la almohada de Takumi y dejando lágrimas esperando su llegada que sabía que tardaría en pasar. Cambie mi apariencia, de un rubio castaño a uno platinado, casi blanco siendo muy llamativo, mi estilo no lo cambie, pues mi esencia de chica rebelde no se borra de forma tan sencilla, al igual que mi apariencia también cambie mi número telefónico, pues lo que menos quería era volver a hablar con el, cambio completamente que "Reira" era lo único que salía de su boca.


[•••]



El departamento es algo pequeño, pero no necesito una gran suite. Al paso de los meses me adapte a mi nueva vida, sin Takumi e mi molesta familia, a excepción de Nao, mi confidente #1.

[Actualidad]

Anda que se cree, preguntar cómo si no supiera nada, me llena de rabia tanto que podría golpearle la nariz de un golpe seco pero también me dolería a mi

— Ya Grace, abrí un espacio en mi agenda para esto y no aceptare tu silencio cómo respuesta — Su agarre se dejó de sentir y solo voltie derecho exhalando — Dejaste todo, las flores en la puerta marchitas y ni siquiera contestabas las llamadas...

Escuchar sus quejas me llenaban de más enojo, es cómo ponerle alcohol a una herida recién hecha, pegarse en el dedo pequeño del pie o morderse sin querer la lengua al comer, porqué tanta incistencia, Ichinose?

— Pues debiste ahorrate en abrirlo, no se cual sea tu intención en venir aquí a amargarme más la tarde tan pesada que tengo — Gire mi cabeza para verlo, estar dentro de casa después de tanto tiempo me revolvió el estómago y Takumi, estoy mareada de tanto que vomité

— Deja tu orgullo y también de ser tan testaruda, todo iba perfecto Grace! No se qué mierda o quién te dijo algo para que te fueras!? — Su voz cada vez se alteraba más y mis nervio tanto cómo la rabia igual

— Desde que Ren llegó tú solo provocaste eso, te ausentaste demaciado! — imite su tono, pues la irá me consumía — Y si abrías la boca mencionabas a Reira... Y yo? Que paso conmigo!?... ¿Cómo estás, Grace? ¿Ya comiste? No te preocupes por guardar comida, no llegaré a casa hoy... Ni una simple excusa me dabas y ni siquiera me llamabas. Salí de casa y me brindaste un hogar... Para después devolverme a ese mismo sentimiento

Escupí las palabras, pude haber dicho más pero conozco a Takumi, ni pio diría.

Un trago de saliva se escucho por parte de el y volteo a otro lado, exhale aire y me levanté de el escalón

— Quieres que diga más?.. Por mi estaría encantada — El sarcasmo salió como su fuera a respirar aire y metí las manos dentro de mi chaqueta — Mm?

— Sabes... Bueno ya nada — El se levanto y fue a adentrarse hacia su coche, un todo terreno negro y se fue

Me quedé un momento más ahí parada, los grillos se escuchaban y la noche comenzaba a caer, era lindo no estar en la ciudad llena de sonidos molestos. Volví adentró a seguir intentando hacer el esfuerzo de convivir con mi familia. Subí a mi antigua habitación que era compartida con Nao, mi cama seguía igual, del lado derecho con mi peluche de Popeye en el centro de la cama, me acosté abrazado el peluche y suspire, sin quererlo las lágrimas salieron, llenar mi mente otra vez de esos momentos que viví con Ichinose es peor que una estaca en el corazón.

Takumi Ichinose 𝑼𝒏𝒂 𝑺𝒆𝒈𝒖𝒏𝒅𝒂 𝑶𝒑𝒐𝒓𝒕𝒖𝒏𝒊𝒅𝒂𝒅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora