13. My you

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JungKook no quería irse de nuevo, no otra vez. Miro hacía tras las puertas del tren estaban por cerrase, por otro lado NamJoon sostenía su maleta. Miro al omega azafata y luego al alfa que se veía a lo lejos a través de la ventanilla del tren.
NamJoon miro a JungKook, conocía a su amigo y sabía que si lugar era aquí y no Seúl, señaló al alfa con su mentón indicándole que podía ir con el y que estaba de acuerdo con la decisión que tomará. JungKook no lo dudo y fue hacía la salida empujando sin querer a la azafata que se encontraba en la puerta, corrió hacía al alfa, YoonGi se sorprendió al ver a su omega bajar del vagón, no lo dudo también y corrió hacía JungKook, cuando estuvieron juntos se abrazaron y besaron con desesperación. - JungKook – balbuceo YoonGi entre el beso.

- No puedo, no puedo – Sollozo en medio del abrazo.- No puedo irme, no podré sobrevivir sin ti otra vez, te amo demasiado que mi lobo no lo soportaría de nuevo, me moría de tristeza.

- No digas eso.

-Te amo

- Yo te amo aun más no sabes cuanto..

YoonGi era el hombre y alfa más feliz del mundo, su vida había cambiado después de que JungKook regresará a su vida, había sido un idiota al dejarlo ir.
Se había arrepentido demasiado de rechazarlo. Pero todo había acabado, su tristeza se había ido y la felicidad lo había remplazado, su familia estaba completa, su vida estaba completa ya que JungKook se encontraba a su lado al igual que el de su hija.

DaHyun y su pequeño cachorro  habría los regalos de navidad con desesperación, JiMin movía las cajas de regalo para buscar la más pesada, sabía que de todos su abuelo había hecho una para el, especialmente para su nieto.

- Mami… Este, este -  dijo tartamudeando y señalando el regalo más grande de todos

- ¿Y porque ese? – pregunto su mamá

- Porque se que ese me la dio el abuelo – respondió con seguridad.

- Y que tal si ese me la dio mi papá – reto.

- No a mi.

YoonGi río al ver la pequeña discusión de su querido nieto y consentida hija. En verdad que su princesa no había cambiado, era la misma pequeña que había criado hace 17 años. JungKook con cautela se sentó en el rasgado de YoonGi haciéndolo salir de su pequeña ensoñación. - ¿Qué tienes mi vida? - pregunto JungKook con curiosidad al ver que su alfa no despegaba la mirada hacia la mesa dela sala.

- Nada, solo pensaba en lo feliz que me haces y en lo dichoso que soy al tener una familia como esta. Te amo lo sabes – lo apego más hacía el.

El alfa se sentía demasiado raro al estar junto a JungKook pero no de incomodidad si no lo contrario se sentía más cómodo de lo costumbre, hasta sentía que era más territorial con el, apretó la cadera de su omega cuando lo beso, su aroma era más dulce de lo de costumbre, pero había otro que no era el.

Un carraspeo se escuchó por parte de SeokJin al ver tal escena de su suegro y novio. – Papá suegro hay niños – dijo refiriéndose a su amada esposa e hijo.

- A si lo siento. – JungKook se bajo de su rasgado para ir con su niña y niño.

- Hola, mis amores – saludo JungKook besando la coronilla de ambos casi al mismo tiempo. - ¿Qué hacen? – Pregunto al ver la pequeña discusión .

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