Capítulo 1

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HE HECHO KARATE DURANTE TODA MI VIDA. Aunque al principio fuera inducido por mi padre, las artes marciales se convirtieron en mi pasión.

Por lo menos, hasta que llegó el All Valley.

¿Cómo podía ser que Cobra Kai, un dojo que llevaba sin aparecer treinta años, ganara el torneo a la primera?

El último dojo en el que estuve yo, Karate Topanga, había ganado cinco años consecutivos, ¿qué había cambiado este año?

Llevaba dos semanas sin poder sacarme de la cabeza el momento en el que Miguel Díaz me quitó la oportunidad de poder pasar a la final.

Todo el peso de la victoria de mi dojo cayó sobre mí cuando Xander perdió contra Díaz.

Yo... creí que podría vencerle. Toda mi experiencia tendría que servir para algo.

Pero al llevar un rato peleando, miré a mi equipo.

Un error que me costó muy caro.

Todos estaban expectantes, vitoreando mi nombre y dándome ánimos.

Esperaban que yo ganara.

Saber eso nunca me había añadido presión, al contrario. Estaba acostumbrada a llevar la carga.

Sigo sin saber qué me pasó en ese momento.

Y entonces, cuando me quise dar cuenta, el árbitro estaba alzando la mano de ese chico pelinegro y no la mía.

Y aquello me afectó bastante más de lo que debería.

Me sentía una decepción.

Incluso mi hermana Erika se preocupó.

Se me quitaron las ganas de todo. No salía de mi habitación, apenas hablaba con nadie...

Años y años siendo Brooke Jones, la estrella del dojo, para que me terminara ganando un novato en su primer campeonato.

Sin embargo, mi hermana me dio una idea usando el típico dicho de "si no puedes vencerlos, únete a ellos"

Y tenía razón. Ahora Cobra Kai era el mejor dojo de El Valle. Por algo sería.

Si me unía, quizá podría ser mejor de lo que al menos creía que era.

Mi plan era dormir hasta medio día e ir por la tarde. Y así hubiera sido, si no fuera porque los gritos de los niños más molestosos del mundo me habían despertado temprano.

— ¡Chase, ¿dónde está mi cepillo?!

— ¡¿Y yo que sé?! ¡¿Por qué lo iba a querer?!

— ¡Porque te preocupas más por tu pelo que por respirar!

Me tapé la cara con la almohada. Dios, en momentos como estos desearía que se hubieran ido a pasar todo el verano con su padre.

Chase y Sky son mis sobrinos y tienen doce años.

Y sí, parece que lo de los mellizos es genético en esta familia, ya que yo también tengo un mellizo, se llama Ethan.

No obstante, este se ha pasado la mitad de su vida mejores colegios extranjeros. Según mi padre, y cito textualmente sus palabras, él ve en mi hermano todo lo que a mí me falta.

Digamos que, en lo que a los estudios se refiere, soy tirando a normalita. Mientras que mi hermano resultó ser un prodigio.

Sumándole a eso que toda mi energía y mis ganas de aprender se las dejaba al karate, a mi padre llegó a molestarle. Dice que es lo único que me importa.

I'M THE BEST || miguel diaz. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora