El rostro de Román estaba bañado por las tenues luces rojas, de sus nudillos caían gotas de sangre al suelo, me miraba directamete, con sus ojos rojos ardiendo de ira, mi corazón latía muy rápido, era encerio lo que me estaba pidiendo, quería casarse conmigo.
Estaba bromeando no ?Un momento atrás se estaba besando con un Omega a mis espaldas, disparando y golpeando la puerta donde estaba como un loco sin control y un momento después me pedía matrimonio, algo no giraba bien en su cabeza.
-Ahora tú eres el que ofrece poco Román, si acepto y tú ganas viviría el resto de mi vida como tú esclavo, con un grillete en mi dedo anular en forma de anillo, y si yo gano, solo serías mío una noche, la balanza está muy inclinada a tu favor, no lo crees?- se hacerco a la pared de cristal, recargo su frente y me miró con ojos de cachorrito
-Te aseguro que tú sales ganando más que yo, no importa quien gane Ethan- yo no ganaba ni una mierda en todo esto.
-elije otra cosa, preferiría morir a estar casado contigo, no quiero que un día me digas Te amo, y al siguiente llegues oliendo a perfume barato de tus amantes, yo no soy un juego Román- golpeó muy fuerte la pared con su puño ensangrentado, está vez hizo temblar el cristal, el ruido estruendoso del golpe me sobresalto,
por un momento creí que el cristal se romperia, me aleje hasta estar completamente pegado a la pared.
-¡YA TE DIJE QUE NO TE FUI INFIEL, NUNCA LO HARIA!, YO... SOLO ESTABA- su respiración se agitó, volvió a golpear el cristal más fuerte, escuché sus huesos crujir, pero siguió golpeando, yo solo lo miraba desde lejos.
No paro hasta que los huesos de sus nudillos quedaron expuestos, todo quedó embarrado de sangre, agachó y recargo la cabeza sobre el cristal, su voz se escuchó quebrada
-No quería que te burlaras de mi-no podía ver su rostro,
-y por qué me burlaría de ti Román-
-Por que no se hacerlo-
-no sabes hacer que- se quedó callado por un momento,
-Besar-su cabeza seguía agachada, no podía ver la expresión que tenía en su rostro, camine hasta estar frente a el, solo nos separaba el cristal blindado
-Roman mírame- necesitaba verlo, no sabía si me estaba mintiendo, tal vez solo quería manipularme,se quedó inmobil.
-Era asqueroso, no quería hacerlo pero tenía que aprender, me gustó mucho el beso que me diste cuando estábamos en el sótano,y yo quería hacerte sentir de la misma manera, no quería decepcionarte- levanto su cabeza y me miró , estábamos cara a cara, a esta distancia podía ver sus ojos con más claridad, estaban completamente dilatados, su rostro estaba cubierto de sudor y su pecho estaba agitado como si le costará respirar, en su nariz tenía manchas blancasEstaba drogado.
-Los iba a matar después lo juro, ellos no son nada para mí exepto pedazos de carne, que utilizo para alimentar mi cuerpo, tu eres el único para mi, lo siento Ethan, ahora me doy cuenta que estuvo mal, - no podía creer lo que me estaba diciendo, era mentira seguro era una mentira,pero en sus ojos veía una vulnerabilidad que me quebraba, puse mi mano a un lado de su rostro.
-No tenías por qué recurrir a otros Omegas cuando me tienes a mi Román-
-La última vez que fui a tí, trataste de asesinarme con una taza de café- se rió yo solo me quedé callado.Sentí culpa, mi corazón se apretó en mi pecho.
él tenía razón, no habíamos empezado de la mejor manera, el me hizo daño y después yo a él, era como un círculo de violencia donde ninguno sedia.
-Puedes salir por favor corderito, te necesito-las puntas de mis dedos ormigueban, mire el escáner a un lado de la puerta, y luego mire a Román quería ir con él, pero necesitabamos iniciar de nuevo, si no el ciclo se repetiría una vez más, ahora que estaba drogado era más impredecible que cuando estaba sobrio, no importa que tan dulces sonarán sus palabras y que tan vulnerable se veía en este momento, si salía de la habitación así sin más, no tenía idea de lo que podria hacerme, lo quería pero tenía que aceptar que ahora mismo en el estado en que se encontraba era un peligro para mí.

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Amo Temerte
Romance- Omegaverce Bl La noche en que lo conocí cambio todo para mí, sus ojos rojos tan intensos como el fuego me provocaron terror, al escuchar su voz, sentí como el mundo a mi alrededor se caía en pedazos, no pude pedir ayuda, deje que tomara mi mano y...