Ep (09)

30 5 8
                                    


Pov: Jennifer

La desesperación me está llevando al borde de la locura sin poder evitarlo. La desesperación me consume como el fuego, llevándome a la agonía.

La desesperación por salir corriendo y refugiarme en algún lugar lejos de la sociedad, lejos del dolor, lejos de todo esto que es aterrador.
Me siento vulnerable, vacía, sola, ansiosa y con ganas de llorar, con ganas de desaparecer lejos donde nadie sepa que existo, lejos de la soledad, de la agonía por no saber qué es lo que soy o qué es lo que quiero.

Me siento perdida entre todos, me siento excluida a si tenga el mejor grupo de amigos, así esté rodeada de personas, me siento sola, no encuentro un refugio, no encuentro consuelo, solo estoy en medio de la soledad que es tan asfixiante que me estás acabando por dentro todos los días, así esté muriendo, pongo mi mejor sonrisa, me he convertido en alguien que no soy y al mundo parece no importarle por qué me esfuerzo porque las personas no merecen que me esfuerce por ellos, debo hacerlo solo por mí, pero es muy difícil.

Porque mis fuerzas se deterioran de manera rápida, haciendo que me sienta vulnerable y odio cuando me siento así. Me intento convencer de que estoy bien, que soy feliz y que no necesito de nadie, pero es una total mentira, ya que todos en algún punto necesitamos de alguien, pero me rehúso a necesitar de alguien, me rehúso a ser vulnerable ante alguien, así que por más pérdida qué este yo sé que soy lo suficientemente orgullosa para buscar un consuelo.

Así que por más sola y vacía que me sienta no haré nada, porque para mí nada de esto tiene sentido alguno, yo ya me perdí en un laberinto de oscuridad.

"Jennifer, ¿se puede saber cuál es tu puto problema?" dijo molesta Alison.

"Ninguno" dije molesta.

"Pues eso no es lo que parece, Jenni" dijo Javier, viéndome con curiosidad.

"Que no tuviera ganas de sentarme enfrente no quiere decir que tengo un maldito problema" respondí en un tono casado.

"Es inusual en ti Anderson, nunca lo habías hecho" dijo Dilan que por cierto parecía más entretenido comiendo.

"Siempre hay una primera vez " dije dando por terminada la conversación.

Después de terminar la conversación continuaron hablando, pero no me molesté en prestar atención ya que mi vista se dirigió a una persona en particular que estaba hasta el otro lado de la cafetería y era nada más y nada menos que Liam.

Su vista estaba en su teléfono, parecía como si algo le molestara. Mi curiosidad se hizo presente, quería saber que era eso que tanto le molestaba, pero era demasiado metiche de mi parte o no.

Me levanté de golpe llamando la atención de mis amigos y de uno que otro que se encontraba en la cafetería. Lleve mi vista hacia mis amigos y ellos me miraban en busca de respuesta sin responder. Me di la vuelta, hacia la salida necesitaba aire. Caminé por los pasillos hasta el estacionamiento.

Necesitaba calmar mis pensamientos antes de que la ansiedad me consumiera. Me sentía frustrada, mis manos comenzaron a temblar, quería llorar, pero porque ni siquiera lo sabía, solo sabía que estaba entrando en crisis.

Mis ojos se sentían pesados con ganas de llorar. Que está pasando no evitó preguntarme ¿por qué?.

Saqué un cigarro de mi chaqueta ya que necesitaba relajarme ya que sentía todo mi cuerpo tenso, pero que me estaba pasando ni siquiera yo lo sé.

Llevé el cigarrillo a mis labios y lo encendí, sintiendo el humo en mi boca, saboreando el sabor a nicotina. Di una cala tras otra, sintiendo el humo traspasar mis pulmones. Se sentía bien, mi cuerpo se relajó, no por completo, pero lo hizo. Estaba a punto de llevar el cigarrillo de nuevo a mis labios, pero inevitable fue arrebatado de mi mano.

"Qué es lo que te pasa" reclamo molesta que le pasaba a quien se creía.

"La nicotina no es buena, ya te lo dije"respondió tranquilo mientras le daba una calada al cigarrillo para después botarlo.

"Dice que no es buena la nicotina y le das una calada a Mi cigarro" dije haciendo énfasis en mi cigarro.

"Si lo hago, algún problema" dijo acercándose demasiado a mí. Los nervios me invadieron de inmediato.

"No sé si te das cuenta de que estás evadiendo mi espacio personal, no sé tú, pero me incomoda" dije mirándolo con mala cara.

Él solo se río, ¡maldito imbécil!

"Te incomoda que me acerques demasiado" dijo con una maldita sonrisa socarrona.

"Si me incomoda, no me gusta que evadan mi preciado espacio personal por si no te has dado cuenta" dije molesta, no parecía querer alejarse, al contrario, se acercaba lo suficiente haciendo que su aliento choque en mi rostro.

"Pues a mí no me molesta, al contrario, creo que me gusta" dijo sonriendo de oreja a oreja.

"Puedes quitarte" dije arrugando mi ceño molesta.

"Bien" dijo alejándose lo suficiente haciendo que pudiera expulsar el aire que estaba contenido.

"Gracias" le dije a regañadientes.

"Quieres hacer algo divertido" dijo.

"Hacer algo divertido" dije.

"Si ya sabes el típico cliché de escaparnos de clases, ¿qué te parece, aceptas" cuestionó.

No sonaba mal, la verdad es que eso de comportarme como la niña perfecta no era lo mío.

"Bien" respondí.

"Vamos" dijo extendiendo su mano en clara señal de que la tomara.

"¿Adónde vamos?" dije caminando, ni loca pensaba tomar su mano.

"Un lugar lejos de toda esta mierda" dijo caminando a mi lado.

Creo que es todo la verdad, no sé si le guste qué espero de corazón, qué si.
Y ¿cómo están?, ¿qué tal los trata la vida? bueno, espero que les guste cualquier falta. ortografía me pueden decir con confianza, ya saben críticas constructivas. A decir verdad, no sé si lo estoy haciendo bien, pero soy nueva e intento hacer lo mejor que pueda para que tengan una buena lectura, creo que es todo por hoy. Nos leemos pronto, adiós.

ATT: Abril Chávez H

Loving wasn't enoughDonde viven las historias. Descúbrelo ahora