Líneas del Caos - CRYMUA/YERAY

ROUN 2 - Encuentro inesperado.

—No.. no, no, no... Eso sí, que no. — Yeri estaba que echaba humos por las orejas, caminaba de una pared a otra mientras se quejaba de la decisión de padre. —¿No sólo haces a que mi mayor hater me tenga que escribir mis canciones, sino que también lo invitas a MI APARTAMENTO?

Cry quien estaba tranquilo, sentado en el sofá tomándose una taza de café como si nada, levantó una ceja en respuesta — Mayor Hater? — Interrumpió.

—SI!! — le contentó ella sin parar de caminar de un lado a otro ni que un Lobo enjaulado.

—Mira Yeri no tengo tiempo de discutir contigo ahora, El viaje que teníamos planeado con el productor se pospuso una semana, sabes lo que es eso? UNA SEMANA, el tiempo es oro y nosotros lo estamos perdiendo, así que arréglense ustedes como puedan que yo debo ir a la oficina a preparar todo para el viaje, descansen un poco lo que queda de la semana antes de nuestro viaje. — Después de decir eso el Sr. Silvio sólo salió del apartamento, se subió a su auto y se fue.

Yeri miraba por el vidrio del ventanal totalmente perpleja, como su padre se marchaba, estaba que con la boca abierta de la incredulidad. —Y se fue... así nomás... no lo puedo creer.

—Ya cálmate, ni que te fuera a comer o algo. —

Yeri volteó con el rostro completamente rojo por que él acababa decir, tan tranquilo ahí sentado tomando su café, y ella sin poder si siquiera respirar correctamente, qué le pasaba con él.? Desde cuándo Yeri Mua se ponía nerviosa con los hombres? NO, ella no es la que debería estar sintiéndose así, sino el.

Sólo lo miró con cara de asco y  una mueca en los labios. —Ya quisieras— le respondió para luego dirigirse rápidamente a su habitación y cerrar de un portazo haciendo que Cry saltara en su lugar con la taza en mano.

Yeri se despertó al día siguiente con una mezcla de irritación y resignación. Desde que Cry había llegado, la atmósfera había cambiado drásticamente. El pequeño apartamento se convirtió en un campo minado de tensión y miradas furtivas. Ya no podía disfrutar de su de su rutina habitual. Cada vez que giraba una esquina o entraba en una habitación, se encontraba con su mirada hipnotizante y su sonrisa burlona.

Ella, decidida a evitar cualquier contacto con Cry, se movía por el espacio como un ninja, buscando cualquier escondite que la librara de su presencia.

Cry, por su parte, parecía disfrutar de cada momento. Se movía por el apartamento con una tranquilidad exasperante, siempre encontrando formas de interponerse en el camino de Yeri.

—¿Es realmente necesario que te sientes ahí? —preguntó Yeri esa mañana, encontrándolo en la zona de la alberca, dónde ella pretendía entrar pues ese día estaba extrañamente caluroso, aunque marcaba 25 grados, ella sentía calor, mucho, mucho, calor, necesitaba refrescarse y despejar su mente, cosa que sería difícil si estaba él mirándola.

Oh, ¿quieres bañarte sin que te miren? No te preocupes, eso no pasará de todos modos —respondió Cry con un rostro serio sin levantar la mirada de su laptop.

Yeri se mordió la lengua y decidió ignorarlo. —heh, con que no me consideras digna de ser observada no?, bien pues ya veremos cuanto aguantas— Se dijo ella misma, procediendo a sacarse la bata de baño de la forma más sensual posible, despacio, disfrutando el momento, cuando por fin cayó al suelo, le dio la espalda para luego ir alzándose el pelo en un rodete revelando por completo su sexy espalda.

Cry que estaba demasiado concentrado en escribir lo que sea que se le venga a la mente, y así ir juntando las frases para las canciones, se dio cuenta del repentino silencio, conociendo a Yeri, era raro que no lo mandara a volar después de lo que le había contestado, aparto la mirada de la pantalla y la vio... sacándose la bata como si se tratase de uno de esos videos eróticos que obviamente él nunca ha visto, ejem... tragó saliva sin poder apartar la mirada atónito, ella revelando su sensual espalda, no sabe en qué momento había abierto la boca sólo la cerro de golpe cuando sintió que su saliva estaba a punto de caer, obvio que había visto muchas mujeres hermosas y que le lanzaban al 2x3 pero por algún motivo que ni él mismo que podía explicar, ella despertaba en él sensaciones que nunca antes había experimentado, se paró rápidamente y entró en la casa con la laptop en mano.