Capítulo 43 Paz Ilusoria

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En una isla remota para muchos e increíbles para unos cuantos sucedió aquello que sería como el primer ladrillo derrumbado en el futuro brillante que muchos tenían en mente

Gotas de agua caían con fuerza en un balcón cercano, las ventanas creaban una sinfonía natural ante la tormenta que había fuera de la habitación

Con el aire acondicionado encendido el lugar era frío, sin la luz del sol solo podía distinguirse las gruesas nubes de tormenta que invadían completamente el cielo dejando caer de ellas su refrescante y precioso regalo

Acostado en un lugar que parecía un hospital un joven de cabello verde se encontraba esposado a su cama mientras miraba el techo como si viera la nada

Con ojos bien abiertos aquel joven parecía perdido, no solo en sus pensamientos, sino que parecía estar ausente tanto en cuerpo como en su mente

Respirando con tranquilidad su única compañía en aquel lugar era una manta de colores verde olivo, azul cielo y blanca que abrazaba en su pecho como si lo protegiera

De repente sus ojos nuevamente enfocaron su entorno y girándose observo el cielo gris que retumbaba de agua y relámpagos

Casi en un estado de trance sus ojos parecían estar observando cosas que solo él podía observar... y era cierto

Su mente era clara como el día, su pasado estaba completamente sobre él, todos sus actos y su verdadero ser, sus errores, sus decisiones, sus pactos, sus habilidades y su poder

Pero sobre todo... sus pecados

Ahora podía recordar todo y la razón del porque Ashley había decidido sellar sus memorias en un primer lugar

Ya no había culpa, no había remordimiento o cualquier deseo de cambiar el pasado... había aceptado esa culpa, ese dolor, sus decisiones y el camino que había tomado

Aun si sintiera culpa ya no había nada que hacer, no podía cambiar el pasado ni revivir a los muertos

En eso la puerta se abrió y con calma entró la heroína número uno de los estados unidos Star and Stripe

Al verla el joven salió de aquel trance al notar más movimiento en la sala y con respeto se sentó en su cama

Star: buenos días joven Izuku Midoriya -amable le sonrió, esperando que calmara la fría actitud del joven- ¿Cómo te sientes?

Izuku: me siento bien señorita Bate -intentando no parecer maleducado se comportó formal- ¿Qué la trae por aquí?

La gran mujer suspiro con un poco de pena y tomo asiento en una silla cercana sin dejar una sonrisa comprensiva

Star: quería verte, quizás conocerte un poco más, no hablamos mucho en la convención ni tampoco en la fiesta

Izuku: ¿de qué quiere hablar? -mirando con la vista un poco baja miró sus manos- usted ya conoce mucho de mí por lo que sé

Star: digamos que solo lo que dicen, pero... no al verdadero Izuku Midoriya -de una bolsa que llevaba sacó una caja de galletas- te traje algo para comer, apuesto a que debes tener hambre

Aceptando el presente le dio una pequeña reverencia al tomar la caja circular

Izuku: el verdadero Izuku Midoriya... ¿Qué quiere saber? -abriendo la caja tomó una galleta-

Izuku y la leyenda del abismoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora