Amor, dem- Espera ¿Amor?

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Volvió la mierda 🗣🗣🔥🔥🔥.

[xXx]

El cuerpo de Rei se sintió cálido ante el frío tacto de los dedos de Quanxi. Ella no dijo nada porque se había acostumbrado. Pero Quanxi siempre disfrutaría de aquellos quejidos o chillidos cuando pasaba su mano por la espalda de su amante.

Rei le devolvió el gesto, pasando su propia mano por la espalda de Quanxi. Rei alguna vez le había comentado que le gustaba que la espalda de Quanxi fuera así de amplia, no dijo porqué, sólo lo dijo.

"¿En qué piensas?" La voz de Rei sacó a Quanxi de sus pensamientos. Desde su posición en el pecho de Rei, Quanxi respondió.

"En tí, como siempre."

La risa melodiosa de Rei fue suficiente como para complacer al híbrido de cabello blanco.

"Eso fue dulce. Pero casi nunca recibo un cumplido tuyo ¿Ha pasado algo?"

Quanxi no frunció el ceño, pero Rei podía sentir en aquel leve movimiento al acomodarse que algo había causado su comentario en Quanxi.

"¿Qué pasa?" Cuestionó.

"...Tengo que escribir música..." murmuró. "Pero, en verdad, no quiero... no por obligación." Dijo, enterrando su rostro en el hueco del cuello de Rei, lo que le valió una suave risa. "He intentado, pero nada me convence."

"Bueno... pues está difícil que alguien más lo haga por ti." Rei peinó el cabello de Quanxi con ternura. "Te daré un consejo; haz lo que siempre haces, pero esta vez hazlo pensando en alguien que te apasiona o que te gusta para que lo hagas lo mejor que puedas. Yo hago eso ¿sabes?"

Quanxi no respondió.

"Además, Mune-rin me ha dicho que te ha visto salir muy seguido ¿para dónde estás yendo?"

"Ese chico es un bocazas, algún día descubrirá que es mejor fingir ignorancia." Resopló Quanxi sin molestia alguna en su tono ni en su rostro.

"A mi me gusta que mi hijo me diga que hace mi pareja durante el día cuando no estoy presente ¿No lo crees?" Rei interrogó. Quanxi se tomó un momento para responder.

"A mi nunca me cuenta qué haces mientras estoy afuera." Dijo. "¿Es favoritismo?"

"No creo que sea sólo favoritismo... pero debes darle un tiempo, pronto se acostumbrará a ti." Dijo Rei con calidez.

"Pero no negaste que fuera favoritismo."

"Quizás... pero debes saber que si no intentas hablar con él, no lograrás nada." Dijo. "Intenta buscar algo que les interese a los dos, así podrán volverse más cercanos."

Aquí estaba ella. Encaminando, como la mayor parte del tiempo, al hijo de su novia. Ambos iban en silencio, lo que no era ninguna novedad, salvo pequeños momentos donde Munenori le lanzaba preguntas a Quanxi acerca de a qué hora vendrá a recogerlo. Pero el silencio se sintió increíblemente incómodo, aunque probablemente fue sólo para Quanxi, por eso se quedó con la boca entreabierta, deteniéndose en mitad de un cruce peatonal.

Munenori la observó con una ceja alzada, acostumbrado a la rareza que caracterizaba a la novia de su madre. Se acercó con cierta prisa, un tanto preocupado y avergonzado.

"¿Qué te pasa?" Cuestionó. Agarrando de la manga al híbrido de cabello blanco, tratando de ocultar su rostro de los molestos conductores que tocaron el claxon un par de veces hasta que la vía quedó despejada. "No puedes detenerte así como así en la calle, te pueden atropellar."