Let Me See, Lou.[L.S]

4"Día 3"[1ra parte]

Harry giraba la vista en todas direcciones buscando incansablemente algo que necesitaba, y que de una forma u otra necesitaba encontrar.

Una vela color azul y verde

Se encontraba en la tienda de velas "Belle Epoque" si, obviamente donde más las encontraría.

El problema principal era que ya había visitado más de cinco tiendas y perfumerías distintas en donde vendían velas con aromas y sin ellas. "con o sin"-pensó- ¿Cómo diablos no le pregunto a Louis algo tan importante? Opto por dejarse llevar por la intuición, no le había dado su numero al castaño, no podía.

Se maldijo mentalmente, encontrar una simple vela azul y verde no tendría que ser tan complicado.

Había una fila de tan solo tres personas delante suyo, así que para pasar los minutos comenzó a observar todo el lugar: filas y filas de aromatizantes repartidos por color y aroma, cerca del mostrador estaban ubicados varios cuadros algo rústicos pero agradables a la vista. Por otro lado, en dos estanterías había montones y montones de distintas velas, separadas también por colores y aromas, obviamente también sin aroma, pero ver toda esa cantidad de velas y no poder encontrar una simple vela de dos simples colores.

Luego de unos minutos más por fin era su turno, una señora ya pasada de años-notable ya que su cabellera algo ondulada estaba repleta de canas-lo atendió con una cálida sonrisa.

-Buenos días, joven, ¿En qué puedo ayudarlo?

-Bueno, supongo que estoy buscando velas.-rio ante su estúpido comentario.-Necesito solo una vela, una vela azul y verde.

La adorable mujer mostro una cara de confusión pero luego sonrió para sí misma al recordar algo que probablemente ayudaría a Harry.

-Bien, aguarda un momento, tengo lo que estás buscando.

-¡Genial!- el rizado no esperaba que esta vez si tuvieran lo que el quería.

A los minutos-minutos de nerviosismo para Harry-la señora apareció detrás del mostrador con una pequeña bolsita.

-Tinte para velas verde y azul, y una vela blanca.

-Ouh.

-No es tan difícil joven.-La mujer comenzó a explicarle paso a paso como debía hacer para teñir la vela, no era tan difícil, pero sabía que no quedaría perfecta de todos modos.

Al cabo de unos minutos Harry agradeció cordialmente a la vendedora y se retiró de la tienda con una amable sonrisa y un "Adiós"

*

A pasos acelerados, casi corriendo, el rizado se trasladaba por todo la edificación buscando a su nuevo amigo Louis, ya tenía todo listo y estaba más que feliz por cómo le había quedado el trabajo, en esos momentos no pensó si era necesario el aroma o no, por eso mismo compro un aromatizante de velas y lo coloco en la caja que contenía la vela azul y verde.-"perfecto"-pensó.