Green Hood (En Pausa)

Capitulo 9

Lunes 23 de enero del año XXXX

Eran como las 5:45 de la madrugada y el sol aun no daba señales de poder salir de la cumbre, lo que significaba que la oscuridad de la noche aún seguía presente por toda la cuidad y no solo eso por la noche llovió un poco. Aunque no duro mucho, al no haber mucho viendo fuerte esa noche, causo qué varías nubes prolongarán su estadía en el cielo dando como resultado una nublada madrugada y algo húmeda... Si te quedarás algo quieto y afinaras un poco el olfato podrías percibir el olor a tierra mojada en el ambiente junto a eso sentirías el viento frío tocando tu piel haciendo que sintieras algún otro escalofríos.

Había una especie de sala de un departamento muy amplio dónde no poseía nada a sus alrededores, no había muebles, ni sillas, ni mesas, ni estanterías para colocar fotos o cualquier otro adornos, ni pinturas de algún tipo, era como si fuera estuviera completamente deshabitado, como si nadie viviera ahí, pero lo único que estaba en ese lugar eran las velas distribuidas por todo el departamento que mantenía el lugar lo suficientemente iluminado para que no te abrumara la oscuridad que daba el sintió... Las cosas estaban en completa calma, nada se escucha a sus alrededores, la brisa no entraba a la sala, ya que las ventanas estaban bien cerradas y en el centro de todo eso estaba el joven Midoriya.

El pecoso estaba parado recto en el centro de aquella sala con los ojos cerrados, sin camisa, sin zapatos, solo usaba un mono y tenía dos espadas cortas "Tantō" es un arma de filo similar a un puñal de uno o de doble filo con una longitud de su hoja entre 15 y 30cm (6-12 pulgadas). A primera vista puede confundirse con una "Pequeña Katana", pero su diseño en realidad es diferente. Pese a que la estética es idéntica, el diseño de la hoja y la tsuka (empuñadura) son sustancialmente más sencillos.

Pero a diferencia de otras espadas Tantō, las que tenía en cada mano poseían una paciencia algo peculiar, entre la hoja y la empuñadura, era como si estás dos partes tuvieran una aspecto algo futurístico por así decirlo... Los minutos pasaron y el joven seguía inmóvil, solo respiraba con suavidad haciendo que su cuerpo se relajará cada vez más, pero por algún motivo desconocido la temperatura de ese departamento comenzó a subir haciendo que el ambiente se calentará tanto que daba la impresión de estar adentro de un sauna, ya que el cuerpo del peliverde estaba mostrando grandes señales de sudor corporal que se hacía muy notable.

De un momento a otro abrió los ojos y comenzó a realizar ágilmente diferentes movimientos a una velocidad impresionante usando su cuerpo junto con sus pequeñas espadas, y cada vez que este hacia un movimiento se escuchaba un silbido fuerte que resonaba por todo el departamento. El pecoso hizo varios piruetas en el aire atacando con sus piernas y con las hojas de sus armas hasta que en uno de esos giros vio cómo una sombra se acercaba hacia el rápidamente, sacando dos especies de dagas de sus fundas a punto de clavárselas en el pecho cuando este tocará en el suelo... Un rápido destello apareció en el lugar junto con el sonido cortante de que algo traspasó limpiamente y a los pocos segundos algo se escuchó que cayó con fuerza al suelo, para que acto seguido apareciera un sonido humo en el fondo de todo, como si de repente es escucharás el sonido de un chorrito cayendo al piso.

El peliverde estaba agachando con una rodilla hincada y la otra doblada con ambos brazos abiertos, mientras sostenía sus dos espadas hasta que se levantó y miro que la sombra que salió de la nada era un hombre disfrazado totalmente de negro. Este hombre estaba un poco jorobado con la vista fija en sus brazos, ya que sus manos yacían tirados en el suelo y junto a eso un gran charco de sangre dando a entender que Izuku le había cortado limpiamente ambas manos antes de tocar el suelo... El hombre grito de dolor y se hecho rápido para atrás poniendo su espalda en la pared. De repente salieron cinco sombras de la oscuridad atacando al joven, pero como si se tratará de un rayo el muchacho esquivó o bloqueo con mucha agilidad el filo de las armas de sus enemigos.