- Oye, Bri...

- ¿Sí?

- En verdad lo siento mucho. - Musitó ella.

- ¿Por que?

- Porque no debí entrometerme desde un inicio... entiendo completamente si estás enojada.

- Diría que más que enojada, estaba asustada... lo sigo estando.

- ¿Hizo algo que no querías anoche? - Preguntó alarmada.

- Todo lo contrario... incluso yo lo empecé.

- ¿En serio?

- En serio... y fue increíble, no hay nadie más con quien hubiese preferido tener mi primera vez.

- ¿Entonces?

- Me asusta lo que vendrá a continuación... ¿Qué pasará después de esto?

- El futuro es incierto, Bri... si algo he aprendido es que no hay manera de controlarlo. - Me respondió mirando abajo al bar en el primer piso frente a nuestro balcón, aún desde tan arriba podíamos escuchar la música que ponían. - Pero podemos poner de nuestra parte para que las cosas mejoren.

- ¿Cómo?

- Hablando. - Me sonrió. - No te angusties, aún tenemos todo el día de mañana y hasta el domingo a la noche... incluso si no quieres hacerlo hasta que lleguemos a Lima, está bien... pero piénsalo al menos.

- Lo haré... gracias Lore.

- No hay de qué, preciosa. - Dijo levantándose de su silla y besando mi cabeza. - Estaré en mi habitación por si necesitas algo, buenas noches.

Me quedé al menos un par de horas mirando a la luna esa noche... como brillaba sola y no necesitaba de nadie para hacerlo, era realmente hermosa.

Estaba segura de que yo también, sólo tenía que encontrarme.

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Pero incluso si intentamos poner de nuestra parte aquel sábado, solo resultó en desastre cuando después del desayuno, grupos se dividieron y no hicimos absolutamente nada juntos lo que quedó de la tarde.

Michelle y yo pudimos conseguir que Sophia se levantara de la cama para acompañarnos al centro un rato pero luego la pelirroja terminó uniéndose al grupo de Lia, Ben, Richard y Caleb, partiendo hacia la playa, el otro, conformado por Mathew, Mike, Robin, Ron y Sam prefirió ir al gimnasio del lugar mientras que Alina, Parker y Lily exploraban un poco el resort, más que nada las tiendas de souvenirs, y últimamente el dúo de Loraine y Andrew estuvo brevemente en la piscina y terminó por hacer lo mismo que sus otros tres amigos pero por su propia cuenta por alguna razón.

Y era aquello lo que daba vueltas en mi cabeza.

Loraine es mi mejor amiga y sé que jamás lastimaría a Andrew porque además de saber todo el cariño que le tengo, ella misma lo aprecia bastante, pero tiene esa personalidad que enamora, y obviamente no es culpa suya pero aún así no podía evitar preocuparme por que el pelinegro confundiera las cosas, porque incluso si negaba sus sentimientos mil veces ante mí, mil y un veces los confirmaba al ver a la castaña y escucharla hablar, prestarle tanta atención y sonreírle sin razón.

Al menos me pasé toda la tarde pensando en eso y el hecho de aún no haber podido hablar con Mathew, sin lugar a dudas nada ayudaría a despejarme

- ¿Entonces? - Michelle me sacó de mis pensamientos con una sola palabra.

- ¿Entonces qué?

- ¿Qué tal tu primera vez con Mathew? - Preguntó yendo directo al grano y soltó una risa cuando vio el sonrojo en mis mejillas.

HopelessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora