Había sido bastante clara con el.
No lo iba perdonar así de fácil después de lo que me había dicho, si algo me decía mi madre era que tuviera un poco de amor propio respecto a los hombres porque nunca sabías de lo que eran capaces.
"Ahora que te crees tu mamá".
Hoy no iba a ir a el partido de España, a pesar que estaba en Qatar y tenía la suerte de ir, no lo haría.
Prefería quedarme en mi casa viendo el partido desde la televisión.
Pero los seguiría apoyando igual.
Seguro que iba a asustar a media colonia con mis gritos.
Jugábamos contra Marruecos octavos.
Confiaba mucho en ellos.
Confiaba en qué ganaríamos, lo mereciamos.
Teníamos nivel.
Tome un bolso, me puse unas gafas de solo y salí del hotel.
Iba a ir a un museo.
¿Tendría que perder el tiempo en algo, no?.
Llegué, mostré mi identificación y entré.
Me pidieron que me quitara las gafas y yo obedecí.
España jugaba a las 8:00 p.m. y recién era las 3:00 p.m.
Había varias pinturas y esculturas que en mi vida había visto.
Qatar no era un país muy conocido.
Volte a mi derecha y ahí estaba, tomándole foto a una pintura.
"Espero que no me vea, porfavor".
Me había quedado viéndolo, y el volteo en mi dirección encontrándose con mi mirada clavada en el.
Me dió una sonrisita, que en lo personal me volvía loca.
Era de esas sonrisas con las que decías "hazme tuya".
O al menos eso creía yo.
Le devolví la sonrisa con calor en mis mejillas, seguramente había quedado como tonta.
El iba con una señora, que supuse que era su mamá.
Voltee cuando sentí un tacto en mi hombro.
Me encontré con un chico castaño.
Inna: uumhh? -dije alzando la ceja.
Me dijo algo en un idioma que no entendí ni un poco.
Le hice una seña con la mano que para mí significaba que no le había entendido, pero por su cara me dió a entender que el no lo había hecho.
Sonreí un poco apenada y me aleje de el.
Voltee de nuevo a dónde el, que me veía mientras se reía de mi.
Le sonreí y seguí mi camino viendo las esculturas.
Aunque siendo sincera ya no les ponía atención a las esculturas, teniendo tremenda obra de arte enfrente, ¿Quien quería ver esculturas si tenía enfrente a Joao Félix?.
Tome varias fotos y cuando termine de ver todo salí y fui a comprar un agua con hielo.
Creo que ya lo había dicho pero el calor en Qatar era insoportable.
Era de esas personas que se ponía de malas con el calor.
100 x 100 era team frio, quien era team calor era un complemento loco.
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Desde 0 | João Félix
RomanceIna Moll es una chica muy dulce, linda, tranquila, tímida y sensible. En cambio João Félix es muy atrevido, lanzado, brusco y en algunos momentos era romántico. Dos polos completamente opuestos se enamoran, ¿su amor será verdadero o solo una tonterí...