Devon
Habían pasado días, hasta incluso semanas, seguía sin poder asimilar lo que había pasado, mis días se volvieron monótonos.
Despertar.
Dejar a Elliot en el preescolar.
Ir a la constructora.
Ir a algún hotel.
Recoger a Elliot.
Regresar a casa.
Hundirme en mi maldita miseria.
Había noches donde soñaba con ella, era hermoso, pero solo era eso un maldito sueño, despertaba con esa extraña sensación cálida, como si aún estuviera conmigo, al darme cuenta de que no era así generaba una crisis de llanto en mi e insomnio.
Todo los días era igual, no sabía lo que hacía, donde estaba, con quien, ¿comía? ¿Dormía? Esas cosas habían dejado de importarme desde hace tiempo, ya no quería estar más aquí, necesitaba... ¿Qué necesitaba? ¿Necesito algo acaso? Si, claro que si, necesito irme, no a otro lado u otro país, necesito dejar de respirar y sentir este jodido mundo.
-¿Señor?- La maestra de Elliot llamó mi atención al recogerlo, estaba tan hundido en mis pensamientos que no escuché una palabra de lo que me estaba diciendo- Espero y pueda acompañarnos en el festival de cierre de ciclo, se que no ha sido fácil, pero Elliot se ha esforzado mucho.
-Ah sí, haré lo posible por asistir, muchas gracias. --respondí sin mucho ánimos, tomé la mano de Elliot para ir al auto.
Mamá dijo que no estaba en condiciones para conducir, pero también dijo que ella estaría bien, mentiras, solo mentiras.
Si saber cómo o cuándo (como la mayoría de las cosas que habían sucedido en el último tiempo) habíamos llegado a casa.
Elliot bajó apresurado y corrió hacia adentro siendo recibido por Viviane.
-Buenas tardes ¿Gusta algo de comer señor?- preguntó amablemente a pesar de mi aura pesada que ya venía manejando.
No respondí y seguí de largo a mi habitación, también se había vuelto rutina llegar a casa y dormir hasta que una llamada furiosa de alguno de mi padres llegara y tuviera que emprender viaje al trabajo, era horrible; así fue, recibí una llamada de mi padre horas después diciendo que llegara al hotel del lado oeste para una reunión de no se que.
Me aliste lo más "formal" posible y baje por las escaleras, eran casi las 5:00 pm, no recordaba la hora exacta en la que había llegado junto con Elliot ¿1:00 pm o 12:30? No me importaba, al bajar note que la casa estaba más silenciosa de lo común, aplaste sin querer un pequeño juguete chillón en forma de elefante de Elliot, haciendo que este asomara su cabeza desde el sillón de la sala, todos sus juguetes estaban regados por el piso, al menos él mantenía la casa con vida.
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La Inmensidad De El Mar (𝗢𝗺𝗲𝗴𝗮𝘃𝗲𝗿𝘀𝗲)
RomanceTras años de maltratos por el que se supone que seria su compañero de vida, Nun Sun huye de su país de origen y de un alfa manipulador junto con su pequeño, llegando a un puerto donde comenzara una vida nueva, lleno de miedos y temores, también don...