Le Fruit de la DxD ✔️

39 - Bendecidos y poseídos

Por supuesto, Rias y Akeno no habían contemplado ni por un segundo la idea de que Yuuji estuviera de algún modo detrás de la desaparición de Seekvaira Agares.

Si la supuesta hora de la desaparición era correcta, Rias estaba más que dispuesta a declarar bajo juramento mágico que su peón había estado con ella... la noche en que desapareció Seekvaira.

Los que habían "incriminado" a Yuuji no habían hecho un trabajo ni remotamente convincente. Era inútil y sin sentido, nada más que un teatro chapucero y macabro.

... Y eso era lo que tanto había preocupado a Rias. No sólo ella, sino Akeno, Azazel, Okaa-sama y Grayfia, a quien Okaa-sama había dado autoridad para ayudar en nombre de la casa Gremory, pensaban lo mismo.

Porque si la prueba pretendía implicar a Yuuji en el secuestro de Seekvaira y su par, era un intento inútil.

Pero si pretendía forzar la implicación de Yuuji en el juicio, tanto para llamar la atención sobre el propio Yuuji como para llamar la atención del propio Yuuji sobre el asunto, entonces había tenido éxito, impecablemente.

¿Pero con qué fin?

Yuuji tenía muchas conexiones con el lado oscuro del mundo, pero era el lado oscuro mundano del mundo (por lo que ella sabía).

¿Quién querría atraerle hasta allí?

Rias no tenía respuestas.

Vaira siempre había sido, con diferencia, la más distante de las jóvenes herederas, pero Rias seguía considerándola una amiga, aunque no se hubieran visto mucho en los últimos años.

Dejando a un lado sus propios sentimientos, sentía que no podía ni debía ocultarle nada a Yuuji y, francamente, él estaba mejor preparado que ella para dar respuestas.

"... Qué bien, ya estás aquí. Cierra la puerta y siéntate".

Debió de delatarlo su expresión, o tal vez Akeno (aunque estaba sonriendo como de costumbre), pero fuera cual fuera el motivo, la expresión de Yuuji adoptó ese sutil y duro tono casi de inmediato.

"¿Quizá tengo un acosador?".

La cabeza de Rias golpeó el escritorio.

Ignorando las risitas de Akeno (aparte de alegrarse de ver que su reina también se había relajado un poco), Rias levantó la cabeza para fulminar a Yuuji con una sutil mirada, exigiendo en silencio que la explicación al menos fuera buena.

Yuuji se encogió de hombros despreocupadamente, y su expresión inexpresiva no traicionó nada mientras observaba las pruebas visuales.

"Parece una tontería, pero si no tengo una respuesta lógica, ¿no es hora de empezar a pensar en tonterías?". La única persona que conocía que le había llamado Nii-san era Gasper, pero Gasper había sido decididamente no psicópata al respecto, así que probablemente no necesitaba un lugar en la lista de sospechosos.

"Debe de ser tu tono el que hace que eso suene algo razonable", suspiró Rias, sin saber qué otra cosa había esperado.

"Tienes razón en que probablemente alguien me esté llamando", admitió Yuuji, tomando las dos muecas de dolor como señal de que ya habían pensado lo mismo, "pero en cuanto a quién podría ser, tu suposición es tan buena como la mía".

"Ya me lo esperaba", asintió Rias, volviendo a su asiento y enderezando la postura. "Como tarjeta de visita, es inútilmente vaga, como ser acechado por un slasher de serie B".

"Quizá si miramos hasta los créditos finales, podamos averiguar quién es el cámara".

"Ojalá fuera tan fácil", Rias se permitió una pequeña sonrisa mientras Akeno soltaba una risita, de timbre más ligero que la anterior.