𝑇𝐸 𝑂𝐷𝐼𝑂 ☔︎ 𝐴𝐺𝑈𝑆𝑇𝐼𝑁 𝐺𝐼𝐴𝑌

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Narrador omnisciente

La semana escolar empezaba nuevamente, y esta vez más picante que nunca. Ya se acercaban los exámenes que llevarían a cabo las notas finales del primer cuatrimestre. Eran orientadores, eso significa como te está yendo en la materia, si estás bien, si estás más o menos, si estás muy mal.

El lunes les trajo pruebas de historia y lengua y literatura, un poco de lo que vieron el año pasado, muchas clases no tuvieron con el profesor, no sería muy justo que les de un tema que no logró desarrollar lo suficiente.

Algunos entregaban la hoja en blanco, ya que, mucha participación en clases no tienen, y mucho no les interesa. Es un desperdicio y una falta de respeto para los profesores que se toman el tiempo de explicar tema por tema para que les sirva en un futuro, futuro que ya está a la vuelta de la esquina. Sinceramente, es muy triste el nivel académico de 5°B, sólo se salvan unos pocos, los de siempre.

Por más que adviertan de la repitencia, parece que les entra en un oído y les sale por el otro.

Respecto a ese tema, años anteriores no se podía repetir al no asistir al colegio y hacerlo de manera virtual, el gobierno optó por eliminar la repitencia por temas relacionados a algunos adolescentes que no tenían lo necesario para estudiar de manera virtual. Gracias a eso, la mayoría de los adolescentes ya no le ponían atención al colegio, llevándose materias al no entregar trabajos, no presentarse en las clases virtuales, y demás cosas. Pero no podían repetir, se las llevarían previas, y así acumulan hasta el día de hoy.

Fue una ventaja muy grande para ellos, ahora les pasa factura.

Debían aprobar todas las materias de este año si quieren sacar las de años anteriores. Por ejemplo, cierto chico debe matemáticas de tercer y cuarto año, si aprueba este año aprueba los años anteriores sin necesidad de rendir temas apartes. Demasiado fácil, aunque, algunos no saben aprovecharlo.

Días repitiendo el nuevo sistema de aprendizaje para que les quede en la cabeza, pero... Al parecer, no les importa su futuro.

La mayoría del curso no entregó el trabajo completo, por más que hagas dos o tres puntos, no servía en algunos profesores, y era el caso de estas materias rendidas el lunes. La exigencia era mucha, y este solo era el comienzo, nadie se quiere imaginar lo que viene.

Solo un alumno tenía justificación por la falta, y ese era Agustín Giay, concentrando con San Lorenzo, citado para jugar contra Unión de Santa Fe. Se venía el debut de la promesa que más sonaba en la reserva del ciclón, el lateral derecho con bastante historia en la selección, no era cualquiera, era un jugador que pintaba para crack.

La emoción en él era notoria, iba a estar junto a grandes jugadores, iba a cumplir su sueño, el de su familia, ansiosos por ver el partido que sería transmitido el martes por la tarde, un horario totalmente aleatorio, imposible para algunas personas verlo.