La verdad

288 52 4
                                    

ADVERTENCIA

ESPERO QUE LA PLATAFORMA ENTIENDA QUE NO ES PARA OFENDER A NADIE Y QUE LA HISTORIA NO SEA CANCELADA.

Rosé: ahora comenzaremos la segunda grabación...

T/N: antes de que lo hagas, quiero pedirte una sola cosa.

Rosé: ¿qué cosa?

T/N: no me harás preguntas de nada, simplemente escucharás, puedes grabar audio y video, lo que necesites, pero sin hacer una sola pregunta, al menos no hasta que yo termine de hablar ¿podrías hacer eso?

Rosé: ¿quieres que grabe con mi celular?

T/N: si así lo deseas, he visto que realizas apuntes en tu libreta después de observar mi rostro en cada sesión, así que no quiero que te distraigas con nada, solo... solo quiero que me escuches.

Rosé: de acuerdo, - sacó su celular y lo acomodo sobre la mesa, recargándolo en su grabadora de tal forma de que pudiera enfocar bien a T/N, una vez que lo consiguió, le dio una señal de que ya podía comenzar. –

T/N: supongo que sí este vídeo ya salió a la luz es porque por fin les he dado la confesión que tanto habían estado buscando y que por fin dieron con los cuerpos de mi padre y mis dos tíos. Bien, ahora que ya no tengo nada más que perder, quiero contarles, la verdad de los hechos, la verdad de porqué los maté y cómo lo hice, sin omitir nada, los motivos por los cuales tomé la decisión de quitarle la vida a esas tres personas. Y todo comienza así:

Soy una persona intersexual, nací como mujer, pero con el aparato reproductor masculino, mi infancia fue "normal" al menos hasta que cumplí los ocho años. El día de mi cumpleaños, mi madre tenía que trabajar doble turno en una fábrica, ya que mi padre jamás trabajo por andar siempre de borracho, o al menos, yo no recuerdo haberlo visto en algún trabajo y mucho menos sobrio.

Al estar sola con él, me escondí debajo de mi cama, sabía que cuando bebía siempre terminaba golpeándome o golpeando a mi madre, a veces era a ambas, pero esa noche solo me encontraba yo con él. Pensaba que, si no me veía, quizás ese día, solo por ese día no me daría una golpiza. Pero lo que sucedió... fue mucho peor.

En algún momento, su vista se posó en mí, con dificultad se puso de pie y me saco de mi pequeño escondite, yo grite y traté de retorcerme para que me soltara, pero ¿qué podía hacer una niña de ocho años contra un hombre adulto? En cuanto me tuvo fuera de mi pequeño escondite, yo cerré los ojos, esperando el primer golpe, pero... no fue así.

Sus manos comenzaron a recorrer mi pequeño cuerpo hasta llegar a... a mi zona intima. Comenzó a frotar mi pequeño miembro, mientras sentía su aliento caliente y apestoso de alcohol muy cerca de mi rostro. Y entonces dijo "te daré tu regalo de cumpleaños, te enseñaré para que sirve esto que tienes aquí".

Comencé a llorar, le pedí que se detuviera, que me dolía, repetía el nombre de mi madre una y otra vez, deseando que ella llegara a rescatarme... pero no pudo hacerlo. Así que solo cerré los ojos y rezaba para que todo terminara rápido.

Cuando al fin termino de lastimarme, me ordeno acostarme en la cama y no hacer ningún ruido o mi madre pagaría las consecuencias por desobedecerlo.

Después de ese día, los abusos comenzaron a ser más frecuentes, con o sin mi madre presente, por mucho que ella intentará detenerlo... era imposible, ella muchas veces trato de levantar una denuncia, pero, la justicia para las personas como nosotras no existe. Fue por eso por lo que decidí salir de casa a buscar con que perder el tiempo, y sin proponérmelo comencé a trabajar recogiendo latas de la basura.

FIN DEL JUEGO ( Rosé Y Tú) (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora