🌼 | C A P I T U L O 49| 🌼

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ִ ࣪𖤐| La mitad de la historia|ִ ࣪𖤐

|Román Sokolov|

Por instinto quise maldecir al incompetente de mi hermano por dejar algo tan importante en la habitación donde estaba Athena..

Pero otra era mi sorpresa al verla leer esas palabras. Admito que era uno de mis deseos verla enojada... Pero no de esta manera.

‹ No debía descubrirlo... No ahora ›

Que las pastillas que nosotros veníamos fueron creadas por la misma persona que nos convirtió en monstruos y en su vínculo.

‹ Su madre, Marianna ›

- ¿Crees que nos perdone? - Murmuré incomodo hacia Mikhail.

Todos estábamos en la habitación de Vladimir, tenía que informarles de alguna manera lo que Athena descubrió.. Joder.

Athena ahora estaba sentada encima de la cama con sus piernas cruzadas y maldita sea... Hasta estando sería se ve follable.

- Lo dudo, desde que la vimos por segunda vez era ocultandole una verdad. - Respondió Mikhail frustrado por esta situación.

- ... Pero ella ya lo sabía, ¿No?

Este me miró y después a la pequeña figura de la pelirroja.

- Puede ser. - Respondió secamente.

¿Ahora que debíamos hacer?

Ninguno de los mayores decía algo, menos los menores o Athena.

- ... Entonces... ¿Ustedes fueron secuestrados por mi madre? - Esa fue la primera vez que hablo Athena.

Aún no miraba a nadie, su mirada estaba sobre sus piernas, las cuales estaban descubiertas gracias al corto pantalón pijama que llevaba.

‹ Joder... Roman ponte serio. ›

- Así es.. - Respondió Vladimir suspirando.

En sus ojos se notaba la culpa, culpa de que posiblemente la mente de Athena no pueda resistir tanta información.

- Y originalmente son ocho hermanos.... Pero uno se quedó en ese lugar por alguna razón ¿Me equivoco? - Ahora sí, Athena miró a Vladimir quien se extremecio.

‹ Normalmente era al revés ›

- ¿Cómo...? - Athena lo inteurmpe.

- Lo conocí. - Respondió brevemente. - Pero no sabía que era su hermano... Hasta hoy.

Su mirada vago por cada uno de nosotras hasta parar en mi. Me dió una mirada tan seria que me descolocó un poco.

‹ ... ¿Me estaba empezando a dar miedo? ¿Ella? ¿Una ardilla? ›

Las cosas ya estaban lo suficiente tensas ahora mismo. La pelirroja entrabrio los labios.

— Mi madre... Marianna. Ella creo monstruos en ustedes.. ¿No? — Entrecerró los ojos.

La mitad de todos nosotros asíntio, menos Zakhar.

El fue el único experimento que falló de esa mujer... A veces lo envidio.

— Excepto yo. — Logro hablar Zakhar nervioso.

Estaba igual que todos nosotros, pero menos disimulado.

Athena lo miro confundida, pero poco a poco fue comprendiendo. También nos costó entender como era que Zakhar había sido el que más había sufrido y al final fuera un fallido.

Víndal | Narcolepsia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora