Víndal | Narcolepsia

🌼 | C A P I T U L O 51| 🌼

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ִ ࣪𖤐| Una revelación.|ִ ࣪𖤐

M A R A T O N ⅕

| Athena Ferris |

Después de aquella escena de fantasía Gala había llegado para llevarme a casa y en el fondo le agradecía.... No iba a sobrevivir con siete tipos devorandome con la mirada.

Ahora estaba en el Lamborghini de Gala mientras ella conducía en silencio a mi destino.

Me había dedicado a simplemente observar el paisaje, bueno, las calles de la ciudad.

Aún me sentía sorprendida por lo de las marcas... Osea.. ¿Viviamos en un mundo de magia y ni me daba cuenta? O ¿El futuro en dónde los autos volaban se acercaba?

Bueno, estábamos en el 2028... No creo que falte mucho para la invasión de los Aliens.

¿Estaré pensando mucho?

La marca ya se había desvanecido totalmente en mi nuca, era como si solo cerca de Oleg se manifestará... Además... Me mordió.

Y dolió, como nunca... Bueno, aunque me sentí brevemente estraña... Cómo si me hubiera gustado.

¿Me volví masoquista?

« No, en realidad lo eres. »

Eso de sentir dolor no es algo que me atraiga de echo..

« No físicamente pero si sexualmente quizá. »

Mi ceño se frunció, ¿No era lo mismo? De echo, ni sabía sobre este tipo de cosas... No debía pensar al respecto porque estaba claro que nunca lo haría... Antes muerta.

- Athena... ¿Todo bien? - Gala me saco de mis pensamientos.

Gire hacia ella y está igual, el semáforo se había puesto en rojo hace unos minutos.

- Si, todo bien. - Le ofrecí una amable sonrisa, cual no le devolvió.

- Eres... Una chica muy linda, inocente y sobre todo con un alma pura... Demasiado para mis hijos. - Ella suspiro. - Mis hijos no son santos, pero tampoco es que sean unos diablos...

¿De que hablaba? Mi ceño se frunció al no notar a que dirección se iba está conversación.

- Athena, ¿Te gustan mis hijos todos ellos? - Me miró seriamente.

Me quedé en shock.

¿Me gustaban? Si cualquier otra persona me hubiera preguntado lo mismo sobre ellos definitivamente diría que no... ¿Pero porque no me salen las palabras de la boca?

Siento un peso extraño cada que abro la boca para dar mi no.

- No.... No lo sé. - Murmuré en un tartamudeo.

Mire la pista llena de autos detenidos por el semáforo en rojo... ¿De verdad...?

- Entiendo. - Ella suspiro.

El auto se puso en marcha al ya ver qué el semáforo estaba en verde.

Suspiré y mire por la ventana. ¿Que debía pensar al respecto?

¿Ellos? ¿Gustarme? Suena como una fantasía... Pero lo que he visto estando con ellos era mucho más que eso.

A la mente se me vino la imagen de todos los hermanos... Incluyendo a ese último.