A SPARE'S LOVE || PRINCIPE HARRY ||

Capítulo 38. Los Sussex

Desde que se anunció la llegada de un nuevo miembro de la Familia Real, en Reino Unido no se hablaba de otra cosa. Todos los programas matinales y las revistas no paraban de lanzar teorias sobre el futuro del primogénito de los Sussex. Además, todos los medios sensacionalistas estaban obsesionados con conseguir algún tipo de información de la Princesa ya que seguía sin realizar actos públicos por salud. Por su parte, Aura y Harry seguían viviendo en Nott Cott mientras preparaban todo para la llegada del bebé a la vez que seguían trabajando con la Royal Foundation.

Los Príncipes estaban en el salón de su hogar tomando el té mientras revisaban documentos para las siguientes campañas de salud mental. Ambos estaban muy concentrados en la documentación.

-Hazz, se está moviendo. -Habló la Duquesa muy emocionada al sentir las patadas del bebé.

En ese instante, el joven dejó todo y se acercó a su esposa para poner las manos en el vientre. -Sí, parece que está muy animado. -Respondió.

-Sí, lleva varios días así. Sobre todo, por las noches. -Comentó Aura con una leve sonrisa. - Espero que eso no signifique que va a ser igual de fiestero que su padre de joven... -Bromeó.

-O que su madre... -Completó el Príncipe en un tono divertido. -Aunque yo tenga la fama, tú tambien hiciste tus fiestas de joven.

La Princesa sonrió. -Tienes razón. -Cedió. -Lo que más me importa ahora es que nazca ya. -Dijo mientras se acariciaba el vientre.

-Todo a su tiempo, Auri. -Contestó el Duque. -Lo importante es que todo salga bien.

-Sí, lo sé. -Dijo la Princesa. -Pero ya estoy en la semana 38 y no puedo esperar más. No me gusta ser tan torpe y necesitar ayuda hasta para levantarme del sofá.

Harry se acercó más a ella para abrazarla y ayudarla a que apoyara la cabeza en su pecho. -No queda mucho, cielo. -Habló. -Ya dijo el doctor que, si en unas semanas seguía igual, te provocarán el parto.

-Sí, pero no me gustaría que pasara eso. -Contestó Aura. -Prefiero que todo sea natural.

-Pues entonces lo único que hay que hacer es tener paciencia. -Respondió el joven para después darle un beso en la frente. -¿Quieres algo de comer? -Preguntó cambiando de tema.

-No, no tengo hambre. -Dijo la Duquesa.

-Auri, tienes que comer algo. -Insistió el Príncipe. -Hoy no comiste mucho en el almuerzo...

-Estoy bien, Hazz. -Intentó defenderse la joven. -¿Por qué no vemos un rato la televisión? -Propuso para desviar el tema.

-De acuerdo. -Cedió el Duque. -Pero después haré la cena y tendrás que comer.

-Ya lo vamos negociando... -Comentó la Aura en un tono divertido mientras buscaba el mando y encendía la televisión.

En todas las cadenas de televisión había tertulias donde se hacían apuestas de cuando sería el nacimiento. Al ver eso, la joven se tensó ya que no le gustaba nada que su hijo fuera objeto de comentarios sin ni siquiera haber nacido. Sin embargo, al llegar a la BBC, la pareja vio algo que les sorprendió.

-¿Por qué está saliendo en televisión la foto que me hiciste el otro día en el jardín, Hazz? -Preguntó la Princesa muy nerviosa.

-N-no lo sé... -Respondió el joven muy sorprendido.

-¿Cómo lo han conseguido? -Siguió preguntando la joven. -¿Has hablado con los periodistas?

-¿Cómo voy a hacer eso? -Habló el Duque algo indignado. -Ya sabes que no tengo relación con ningún periodista. -Hizo una pausa. -Aquí la que tiene amigos en la prensa eres tú.