Ya había pasado una semana desde que los tortolitos habían dicho lo que sentían el uno por el otro. Nadie del equipo lo sabía, querían esperar al menos un mes para decirlos, esto fue decisión de Kageyama, ya que el enano queria gritarlo a los cuatro vientos.
Ambos no sabían cómo actuar a partir de acá ya que ninguno estubo en una relación anteriormente. Para ellos todo esto era un mundo nuevo.
Ya había sonado la primera campana del descanso, asi que como siempre, Kageyama fue a buscar a Hinata, pero esté último estaba riendo con sus compañeros de clases por una chiste que hicieron entre ellos. Eso le molestaba mucho a Kageyama, pero no era por los chistes si no por otra cosa...
Hinata se da cuenta de la presencia de su novio.
- ¡Kageyama! -dijo agarrando su almuerzo y llendo con Tobio-. ¡Nos vemos luego, chicos!
- ¡Si! -dijieron sus amigos-.
Kageyama estubo callado desde que salieron del salón de Hinata, hasta un árbol que había cerca del gimnasio.
Al sentarse, Hinata ve que esté otro estaba raro.
- oye, Kageyama... -dijo algo tímido-, ¿Estás bien?
- si, ¿Por qué no lo estaría? -lo dijo un poco brusco, lo cual hizo que el enano se preocupara más-. ¿Por qué me miras así?
- porque se que no estás bien, aunque lo niegues.
- que no me pasa nad...
- entonces, ¿Qué te pasa? -dijo Shoyo cortando por completo a su novio-. Luego que salimos de mi clase...
En ese momento, Hinata se quedó pensando un momento hasta que deducido todo.
- Kageyama... ¿Estás celoso?
- ¿Celoso? ¿Yo? -dijo con un leve sonrojo y nervioso-, nunca.
- ¡No me lo puedo creer! -emocionado grito Shoyo-. ¡Estás celoso!
- b-bueno... Si, lo estoy... ¡Pero no lo grites! -estaba avergonzado porque nunca en su vida estubo celoso de alguien-.
- jeje, está bien -dijo el peli naranja, dándole final a la conversación-, pero... No tienes que ponerte celoso por nadie, Kageyama, solo me gustas tu ¿Me entendiste? -dijo agarrándolo de la cara con sus manos-.
- s-si...
- ¡Muy bien! ¡A comer!
- a comer...
Ambos se la pasaron su descanso comiendo y charlando, hasta que tocó la campana.
- muy bien -dijo Hinata levantándose para partir-, hay que volver.
Kageyama lo estaba siguiendo, pero se detuvo un momento. Hinata al no sentir a su novio cerca de el, decide darse la vuelta.
- ¿Qué sucede, Kageyama? -pregunto curioso Shoyo-.
- creo que tienes algo en la cara -se acercaba mientras que hablaba-. Dejame ver.
Hinata se deja sin pensarlo, pero no se da cuenta de las intenciones de su novio hasta que no siente sus labios contra los suyos. Al principio fue un beso tierno y suave, pero de un momento al otro, Kageyama lo empieza a besar con más ganas. Ambos se separan por falta de aire. Kageyama quería un poco más, asique se lleva a Shoyo lejos de la vista de los demás.
- Kageyama, tenemos que... Mh~
No término de hablar que Tobio lo había empezado a besar de nuevo con ganas. Cuando Hinata abre un poco la boca, el peli negro aprovecha y mete su lengua dentro de la boca del enano. El peli negro empieza besar su cuello y le habla al peli naranja.
- ¿Sabes? Me gusta más cuando me llamas por mi nombre~
Y lo siguió besando.
Haci estubieron unos minutos más, hasta que Hinata se separo de Kageyama por completo. El primero estaba echo un desastre, y el peli negro quería seguir pero tenían que volver a clases. Ambos se arreglaron un poco para verse más presentables, pero antes, Kageyama besa una vez más a Hinata y le susurra algo a su oído.
- recuerda que eres mios y nadie más -eso hizo que Shoyo se pusiera nervioso. Nunca había escuchado a Tobio sonar tan posesivo, y eso le encanto-. ¿De Acuerdo?
Esté solo asintió porque no podía hablar de lo nervioso que se había puesto.
Ambos se despiden del otro cuando llegan a sus salones. Kageyama fue regañado por a ver llegado tarde a sus clases, pero esté no le dió mucha importancia. Al sentarse, lo primero que agarra es su diario.
30 de abril
Hoy almorcé como siempre con Hinata pero cuando lo fui a buscar estaba riendo con sus amigos y eso me molestó mucho. Yo quiero que me sonría solo a mi no a todo el mundo. Pero para que sepan de quien es lo bese, nunca bese a alguien si soy sincero pero con él me salió natural, además lo bese con ganas y le deje un marca en el cuello.
Con eso, Kageyama guarda su diario en el bolso.
*Con Hinata luego de despedirse de Tobio*
- oye, Hinata -dijo uno de sus compañeros-.
- ¿Si? ¿Qué sucede?
- ¿Qué te sucedió en el cuello?
- ¡Eso es un chupetón! -dijo otro de sus compañeros-.
- ¿Qué...? -no entendía nada hasta que un compañero le da su celular para verse. Ahí se da cuenta del enorme chupetón que tiene en el cuello. Hinata estaba rojo, sabía que cunado vea a Kageyama lo iba a matar-. ¡E-e-eso fue p-por un mosquito!
- ¿Un mosquito? Jajaja. Solo a ti se te ocurre Shoyo.
Definitivamente Hinata iba a matar a Kageyama cuando lo vea.
Ya había llegado la hora de la práctica. Shoyo le había pedido a una de sus compañeras que le tapara el chupetón para que no se notará tanto.
Cuando Hinata se encuentra a Kageyama, este se acuerda que del chupetón y se pone todo rojo.
- ¡KAGEYAMA! -le grito con enojo al peli negro-.
- ¿Qué sucede, Hinata?
Esté último, se acerca al odio del más alto, muy enfadado.
- la próxima vez que me dejes una marca en el cuello o un chupetón te voy a matar -se lo dijo muy enfadado-. ¿De acuerdo?
- de acuerdo. Aunque no prometo nada.
Esto hizo que el peli naranja se alterará más.
- ¿¡Pero para que dejarme un marca que la ve todo el mundo!?
Kageyama hace una media sonrisa y se hacerca hacia el oído del más pequeño.
- para que sepan de quién sos. Así que, espero que no vuelvas a ponerme celoso, porque la próxima vez no solo te dejare un pequeño chupetón ¿Okey?
Hinata estaba sonrojado, nervioso y sin palabras. No sabía que su novio sería así de posesivo, pero de alguna forma le gustaba eso, aunque claro no lo diría. Todavía.
- s-si -dijo Hinata sin mirar a los ojos al más alto-.
- bien. Vamos, el resto de seguro nos estará esperando.
- ¡S-si!
Con eso, ambos se van al vestidor para cambiarse y comenzar la práctica.
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El diario de Kageyama Tobio
Short StoryUn día después de la práctica, Kageyama se encuentra un diario tirado en la parada de autobús. El decide quedarselo y desde entonces fue notando como iba cambiando su forma de ver a Hinata Shoyo, aunque... ¿Qué es lo peor que podría llegar a pasar?