Y gracias por entrar en mi mundo, cambiarme los papeles, desordenarme la vida y exprimirme el alma.
Ya entiendo tu juego y sus reglas.
Muchos me han abierto los ojos y ahora soy totalmente consciente del gran despilfarro que hice de mi tiempo por regalártelo a ti.
Y te digo adiós, pero no para que te quedes en la puerta. Quiero que te vayas, que dejes entrar a quien quiera entrar, que dejes salir a quien así lo desee, pero que te retires por siempre.
Cierra ya el circuito y no vuelvas si tienes como destino mi corazón, porque me cansé de jugar, me cansé de jugar con un tramposo.
Solo espero que seas feliz.
ESTÁS LEYENDO
Cruda realidad
Random¿Dónde fueron los momentos felices? ¿Dónde se fueron los besos y las caricias? ¿Dónde quedó el romance? ¿Dónde quedó el amor? No sé por qué me hago preguntas que sé que no tienen respuestas. No sé por qué aún te escribo si sé que nunca lo leerás. ...