#9- que coño fue eso

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Ariana

Qué coño había sido  eso? Me lo pregunté, por semanas  aguanté que hiciera lo mismo solo llegar, follar e irse. Solo llegaba y lo hacíamos donde quiera que estuviera sin importar  nada si estaba durmiendo, en la piscina techada de la casa o cocinando, ese día morí de vergüenza con  mi amiga, ella solo salió de la cocina y nos dejó solos. He esperado pacientemente pero nada de las benditas recompensas de las que me había hablado Nora, estaba exhausta, necesitaba saber de mi pequeña pero cada vez que lo intenté me encontraba con un muro de piedra.

Tenía que hacer algo así que empecé a observar a los guardias las llegadas del señor príncipe y por donde se iba, tenía control de todo cuanto podía necesitaba.
Nora : en qué piensas? ( la miré y enseguida se dio cuenta) no me digas no quiero ser tu cómplice  solo te diré algo, te va a encontrar, te ganarás una paliza y no habrá valido la pena...a y no lo hagas mientras  estés conmigo  o yo también recibiré un castigo.
No dije nada no quería comprometer la pero lo tendría en cuenta.

Esa noche sentí como me tocaban así que desperté y él estaba ahí a mi lado. Nunca  venía en las noches era raro verlo a esas horas.
Ariana: qué haces aquí?...quién esta con yiyi.
Günther: deja de preocuparte  por mi hija que  ella  está bien y preocúpate por mí, yo y mi placer es lo único que debe preguntarte de mí depende si vives o mueres así que  se buena y hazme una buena mamada.
Lo miré mal como podía ser tan repugnante este tipo con lo bueno  que  estaba.
Günther: no me mires así eres puta ese es tú trabajo así no te hagas la digna y complace a tu señor o es que quieres una paliza primero tu solo pidela, yo siempre  estoy de humor para unos cuantos azotes antes de follar.
Se que hablaba en serio le gusta eso de golpear y follarme después entre el llanto y los chillidos de dolor así que mejor  hago lo que me dice ya podré dasafiarlo otro día, como dicen por ahí sabio es el que elige sus batallas y con ese gigante hay que pensar las muy bien.

Günther: eres increíble...me vuelves loco Divina...
Aún me seguía  llamando así nunca pregunto mi nombre y yo tampoco sé lo dije así que todos cuando  se van a referir a mí lo hacen así.

Agarró mi pelo con más fuerza y guió mis movimientos por su miembro hasta que lo sacó y empezó  a masturbase con mi cara aún pegada a él, abrió mi boca con su dedo gordo y guiando mi lengua más cerca de su pene soltó su ecensia sobre ella recogió con su dedo lo que cayó fuera de mi cavidad y lo pego a mis labios para que lo chupara de igual  manera.

Ariana: no me vas a dejar verla de nuevo.
Günther: alfin lo vas entendiendo, te a costado un poco pero  lo vas pillando, no eres muy lista  que digamos...bueno  por algo eres puta...no?
Ariana: no! soy puta porque el hombre que prometió cuidar de mí y de nuestra hija  nos abandonó a nuestra suerte en cuanto las cosas se pusieron feas.
Günther: si confiaste en otra persona para resolver tus problemas entonces  eres más estúpidamente de lo que pensé. No mereces ser madre por suerte Gimena ahora está con padres que si la defenderán sobre todas las cosas.

Mis lágrimas comenzaron  a salir, mi corazón dolía por sus palabras aunque eran siertas, nunca debí salir  de mi casa, nunca  debí confiar en Gerardo ahora todo era incierto y no sabía  cómo recuperar a mi hija. Él solo me recostó  en la cama, corrió mi braga y me penetro con rudeza yo solo podía llorar pero eso era lo quería.

Las cosas de la mafia. (El Alemán)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora