Capítulo 8.- Pijamada.

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Viktor encontró unas luces led que funcionaban con baterías y las uso para dar un poco de luz a uno de los cuartos donde había colocado colchones y sacos de dormir suficientes para que todos los niños pudieran descansar con comodidad.

Claire se ocupo de buscar mantas para todos y en poco tiempo el cuarto estuvo listo.

- ¿Qué se hace en una pijamada?.- pregunto Claire.- Nunca he ido a ninguna.

- Yo tampoco pero he leído que son muy divertidas, se hacen juegos, se canta, se cuentan historias....

- De esa parte ya hemos tenido suficiente.- comentó Claire.

- Esta vez serán los niños quien las cuenten.- dijo Viktor mirando el reloj de reojo.- Bueno, creo que va siendo hora de empezar.

Viktor bajo con la linterna y acompaño al grupo arriba.

Klaus aprovecho el instante de paz para beber algo fuerte, quedándose abajo un rato más.


Los niños llegaron a la habitación preparada, sorprendidos con la decoración y las luces. Stan tuvo la feliz idea de golpear a Aidan con una almohada... iniciando lo que se conocería como la guerra de almohadas mas caótica y salvaje jamás realizada.

Viktor trato de parar a los niños, recibiendo almohadazos por todas partes.

La guerra escalo un peldaño cuando alguien tiro a Dolores al suelo y la pequeña comenzó a llorar. Aidan juro venganza, haciéndose con un par de almohadas grandes, una para cada mano.

Klaus disfrutaba de su pequeño momento de paz cuando los gritos en petición de ayuda le hicieron saltar del sofá y correr arriba.

- ¡Eh, BASTA! PARAR.- grito Klaus internándose en la batalla, que parecía una escenografía de Vietnam.- ¡HE DICHO QUE PAREIS!.- grito a pleno pulmón y los niños tiraron las almohadas al suelo.

Nunca habían visto al tío Klaus serio, menos gritando.

Algunos de los mas pequeños arrugaron el gesto y comenzaron ha hacer pucheros.

- ¡No, no no, vale, lo siento! No quería gritaros.- dijo sonriendo.- No estoy enfadado, solo es que los niños se me dan fatal, lo siento.- repitió.

- Si nos cuentas un cuento te perdonamos.- dijo uno de los pequeños

Klaus miro a Viktor

- ¿No queréis jugar a algo?.- pregunto Viktor.

- ¡¡¡NOOOOOOOO!!!.- gritaron los niños en respuesta.

Viktor acepto la derrota.- Bueno, un cuento mas o menos tampoco puede hacer un daño significativo pero Klaus, por favor... POR FAVOR, uno suave, sin connotaciones adultas.


The Umbrella Academy: Los cuentos del tío KlausDonde viven las historias. Descúbrelo ahora